Europa responde
El acuerdo alcanzado esta semana en Europa es importante no solo por su contenido sino tambi¨¦n por el giro en la direcci¨®n pol¨ªtica que supone, tras meses de una discusi¨®n que parec¨ªa interminable.
Esta semana, despu¨¦s de jornadas de much¨ªsima tensi¨®n, se ha llegado a un acuerdo en el seno del Consejo Europeo, el Acuerdo Europeo para la recuperaci¨®n econ¨®mica. Ya antes los sindicatos europeos, sin distinci¨®n entre pa¨ªses del norte o sur, hab¨ªamos llegado a una unanimidad sin precedentes y, en un documento de la Confederaci¨®n Europea de Sindicatos -impulsado por el sindicalismo espa?ol-, hab¨ªamos exigido el aumento de los recursos propios de la Uni¨®n Europea y una financiaci¨®n masiva destinada a la inversi¨®n respaldada a trav¨¦s de instrumentos de deuda com¨²n garantizados por la Comisi¨®n E...
Esta semana, despu¨¦s de jornadas de much¨ªsima tensi¨®n, se ha llegado a un acuerdo en el seno del Consejo Europeo, el Acuerdo Europeo para la recuperaci¨®n econ¨®mica. Ya antes los sindicatos europeos, sin distinci¨®n entre pa¨ªses del norte o sur, hab¨ªamos llegado a una unanimidad sin precedentes y, en un documento de la Confederaci¨®n Europea de Sindicatos -impulsado por el sindicalismo espa?ol-, hab¨ªamos exigido el aumento de los recursos propios de la Uni¨®n Europea y una financiaci¨®n masiva destinada a la inversi¨®n respaldada a trav¨¦s de instrumentos de deuda com¨²n garantizados por la Comisi¨®n Europea. La Uni¨®n Europea ha seguido finalmente ese rumbo y no podemos sino felicitarnos por ello. Porque el acuerdo alcanzado esta semana es importante no solo por su contenido sino tambi¨¦n por el giro en la direcci¨®n pol¨ªtica que supone, tras meses de una discusi¨®n que parec¨ªa interminable.
Como consecuencia del Acuerdo, se efect¨²a la mutualizaci¨®n de una parte de la deuda y una importante parte de las ayudas se efectuar¨¢n a trav¨¦s de transferencias (390.000 millones de euros de los cuales 72.750 millones vendr¨¢n para Espa?a) y otra parte, 360.000 millones a trav¨¦s de pr¨¦stamos. Todo ello con el respaldo de la Uni¨®n Europea, sin condicionalidades estrictas ni hombres de negro -a diferencia de la anterior crisis-. El Acuerdo nos encamina a una Europa m¨¢s fuerte, con un presupuesto m¨¢s potente. El Marco Financiero Plurianual 2012/2027, queda dotado con m¨¢s de un bill¨®n de euros.
No era sino eso lo que ped¨ªamos. Podemos discutir las cifras, tambi¨¦n los modos y las perspectivas de los pa¨ªses anclados en la defensa de sus privilegios fiscales y posiciones de preferencia, pero el ¨¦xito es indudable. Europa, a mi juicio, esta vez ha sabido responder a las preguntas sobre su futuro.
Quedan los flecos, los interrogantes, los ego¨ªsmos y miserias pol¨ªticas. El descarado alineamiento de una parte de nuestra clase pol¨ªtica con intereses ajenos a nuestro pa¨ªs, intentando conseguir fuera lo que no han conseguido dentro, denostando nuestros intereses con tal de conseguir una mis¨¦rrima ventaja pol¨ªtica. Comp¨¢rese esta posici¨®n con la mantenida por las organizaciones sindicales y patronales m¨¢s representativas (UGT y CC OO, y CEOE y Cepyme, respectivamente), que han alcanzado pacto tras pacto a fin de favorecer los intereses de las personas de nuestro pa¨ªs. El acuerdo obliga a los Estados a presentar planes de reforma e Inversi¨®n para obtener los Fondos, planes destinados a cumplir los objetivos marcados en el Acuerdo, favorecer el crecimiento, la resiliencia, el aumento del empleo, la digitalizaci¨®n, la transici¨®n a una econom¨ªa verde. En ning¨²n lugar del Acuerdo, aparece menci¨®n alguna a las pensiones o a los mecanismos implementados en el 2012 por la reforma laboral.
Es cierto, y eso es un punto fruto del consenso con los pa¨ªses m¨¢s contrarios a la direcci¨®n pol¨ªtica que marca el acuerdo, que estos han visto reducida su aportaci¨®n al presupuesto plurianual, y que los pa¨ªses de forma individual pueden discutir los Planes presentados por los pa¨ªses que quieren acceder a los Fondos de Recuperaci¨®n.
La Uni¨®n Europea ha logrado alcanzar un acuerdo hist¨®rico, en la l¨ªnea que requer¨ªamos las organizaciones sindicales europeas. Pero falta todav¨ªa mucho camino por recorrer. La baza concedida a los pa¨ªses contrarios a la nueva l¨ªnea pol¨ªtica augura una serie de batallas continuadas en torno a los planes de cada pa¨ªs, en los cuales aquellos intentar¨¢n convertirse en los paladines de la ortodoxia liberal. Habr¨¢ que lucharlas desde la unidad.
Igualmente positivo, es la salida a la luz de la realidad de las posiciones privilegiadas de los pa¨ªses m¨¢s contrarios al acuerdo. La fiscalidad aparece como una de las cuestiones claves en el futuro de la Uni¨®n Europea. La reciente sentencia del Tribunal General de la Uni¨®n Europea sobre el caso Apple demuestra las carencias que una Europa que pierde 35.000 millones de euros de recaudaci¨®n en el impuesto de sociedades. Las propuestas de la Comisi¨®n Europea, destinadas a impulsar la equidad fiscal no son lo potentes que desear¨ªamos pero, al menos, son un comienzo y una alerta sobre que algo se est¨¢ moviendo en esta materia. No es posible un futuro europeo si algunos pa¨ªses siguen absorbiendo los recursos de los otros y de la propia Europa a trav¨¦s de pol¨ªticas fiscales insolidarias y antisociales.