Las grandes empresas creen que otro confinamiento ser¨ªa un ¡°desastre¡±

Las grandes empresas rechazan un nuevo confinamiento domiciliario pr¨¢cticamente de forma un¨¢nime. Todas los ejecutivos consultados, una veintena, que en su mayor¨ªa prefieren permanecer en el anonimato para dar su opini¨®n, expresan su respeto a las medidas sanitarias, pero destacan los perjuicios que tendr¨ªa otra vuelta de tuerca en las restricciones. Piden mayor ...

Las grandes empresas rechazan un nuevo confinamiento domiciliario pr¨¢cticamente de forma un¨¢nime. Todas los ejecutivos consultados, una veintena, que en su mayor¨ªa prefieren permanecer en el anonimato para dar su opini¨®n, expresan su respeto a las medidas sanitarias, pero destacan los perjuicios que tendr¨ªa otra vuelta de tuerca en las restricciones. Piden mayor coordinaci¨®n del Gobierno con las comunidades y consenso pol¨ªtico. En esa l¨ªnea se manifiesta la CEOE, cuyo presidente, Antonio Garamendi, declara a EL PA?S que el confinamiento ¡°ser¨ªa un desastre para la econom¨ªa, las empresas y el empleo¡±.

¡°Un nuevo confinamiento implicar¨ªa que fallezcan muchas pymes, que no pueden resistir como las grandes, lo que llevar¨ªa a adoptar medidas excepcionales y urgent¨ªsimas¡±, asegura Garamendi. El l¨ªder patronal no anda con tapujos. ¡°Cuando lleg¨® la primera ola, las empresas estaban mejor situadas, pero con la segunda ya llevan meses sufriendo las consecuencias de la pandemia, con sectores, como el turismo, el comercio y la hosteler¨ªa, que han quedado absolutamente arrasados por decisiones administrativas¡±, declara a EL PA?S. No obstante, adelanta que la CEOE elabora un plan de apoyo para las decisiones que se adopten. En parecidos t¨¦rminos se manifiesta el presidente de la C¨¢mara de Comercio de Espa?a y de Freixenet, Jos¨¦ Luis Bonet, para quien, adem¨¢s, ¡°hay que buscar un equilibrio entre el control riguroso de las medidas de protecci¨®n a la salud y el acompa?amiento al tejido empresarial¡±.

Pero m¨¢s all¨¢ de los l¨ªderes empresariales, acostumbrados a salir a la palestra, las dos decenas de primeros ejecutivos de grandes empresas consultados prefieren mantenerse en la retaguardia. Desde el punto de vista cient¨ªfico-sanitario hay opiniones para todos los gustos, que piden controlar la pandemia aumentando los test y los rastreos y el n¨²mero de camas en las UCI. Lo esencial es la conciencia ciudadana, la reducci¨®n de aforos y la limitaci¨®n de las reuniones sociales. Pero desde el punto de vista econ¨®mico todos coinciden en que hay que preservar la actividad, manteniendo los ERTE y prorrogando los cr¨¦ditos ICO o d¨¢ndoles una moratoria porque muchas pymes no van a poder pagar.

El Gobierno parece decidido a apurar todas las posibilidades antes de recurrir a un nuevo confinamiento. La ministra Mar¨ªa Jes¨²s Montero pidi¨® el martes a las comunidades que adopten medidas contundentes contra la pandemia pero eludiendo por ahora los ¡°confinamientos superiores¡±. Todo esto ocurre mientras los vecinos europeos toman medidas m¨¢s dr¨¢sticas: Inglaterra y Francia han decretado un confinamiento m¨¢s laxo que el de primavera y Alemania ha cerrado todo el ocio.

Pero los empresarios espa?oles no desean ir tan lejos. ¡°El salto en el vac¨ªo de todos para casa es demasiado brutal¡±, comenta un ejecutivo que recuerda que en ¡°las oficinas no se est¨¢n produciendo contagios porque se han tomado las medidas oportunas¡±. Otro consultado cree que ¡°la dicotom¨ªa salud-econom¨ªa es una falacia como se vio ya en el anterior confinamiento¡± y destaca que hay que parar el ocio al menos un mes.

¡°El confinamiento es lo f¨¢cil para un pol¨ªtico. Pero ahora estoy de acuerdo con el ministro Illa y soy totalmente contrario; hay que tener serenidad y esperar el resultado de las medidas adoptadas¡±, afirma el presidente de un grupo multinacional. ¡°Hay que volcarse a hacer test, test y test¡±, a?ade.

Tanto este empresario como la mayor parte de los consultados se muestra resignado a aceptar algunas medidas inevitables como el cierre o la restricci¨®n de la hosteler¨ªa. No obstante, alguno recuerda que esa medida deber¨ªa ir acompa?ada con la concesi¨®n de ayudas directas, como ha hecho Alemania.

¡°Es menos impacto que cerrar todo y mandar a todo el mundo a casa¡±, incide otro. Para otro ejecutivo ¡°no hay una respuesta ¨²nica, depende de cada territorio¡±. ¡°Cuantos menos confinamientos se hagan, mejor. No se pueden cerrar ni la industria ni las escuelas, porque eso supone que los padres tengan que estar en casa con sus hijos y que no funcione la econom¨ªa. Ser¨ªa una verdadera cat¨¢strofe. Otra cosa es que se reduzca el ocio y la movilidad¡±, apunta un banquero, que aboga por ¡°ir conviviendo con el virus, tomando medidas, poniendo en marcha m¨¦todos de detecci¨®n. Si antes se hizo mal la desescalada y la falta de coordinaci¨®n con las comunidades, h¨¢gase bien ahora¡±.

¡°No tiene sentido que nos quieran ideologizar, estamos muy cansados y somos muy mayores para ello; por favor que se pongan de acuerdo, porque es lamentable el circo que se suele montar cuando debieran ponerse de acuerdo¡±, subraya otro.

¡°No creemos que un confinamiento sea una buena medida. Hemos visto el resultado de marzo y su efecto casi nulo. Creemos que antes de aplicarlo deben agotarse todas las soluciones posibles para evitar la paralizaci¨®n en seco de la econom¨ªa. Medidas como control de horarios de sectores determinados, autorizaciones de movimientos con cierres parciales de barrios o ciudades o aislamiento en centros de trabajo para evitar que trabajadores sin relaci¨®n laboral diaria puedan relacionarse f¨ªsicamente¡±, se?ala el representante de un grupo energ¨¦tico.