Arabia Saud¨ª renuncia a llevarse de Madrid la sede de la OMT
Riad informa al Gobierno de que no presentar¨¢ candidatura en la pr¨®xima asamblea general de la Organizaci¨®n Mundial de Turismo
Una llamada dispar¨® todas las alarmas y otra llamada ha devuelto la tranquilidad. Arabia Saud¨ª ha renunciado finalmente a formalizar la candidatura para llevarse de Madrid la sede de la Organizaci¨®n Mundial de Turismo (OMT), seg¨²n confirman fuentes del Gobierno espa?ol, que se?alan que el pa¨ªs ¨¢rabe ya le ha transmitido su decisi¨®n. Si semanas atr¨¢s Riad avisaba al Ejecutivo de que exploraba sus opciones para llevarse el ¨²nico organismo de Naciones Unidas (ONU) con base en Espa?a, como adelant¨® EL PA?S, ahora lo descarta y as¨ª se lo ha comunicado al Ministerio de Asuntos Exteriores.
La candidatura nunca pas¨® de ser una declaraci¨®n de inter¨¦s porque Arabia Saud¨ª no la present¨® de forma oficial a la OMT. Hace un mes se daba por hecho y parec¨ªa inminente este tr¨¢mite, aunque finalmente se ha frenado en seco. Todav¨ªa tiene margen de tiempo: podr¨ªa dar el paso hasta el mismo d¨ªa en que se celebre la pr¨®xima asamblea general del organismo, prevista para el pr¨®ximo 30 de noviembre en Marraquech (Marruecos). Pero la falta de apoyos y una votaci¨®n que da por perdida ha tumbado su ataque. La Moncloa, que en su d¨ªa calific¨® como ¡°un gesto poco amistoso¡± que un aliado como Arabia Saud¨ª se plantease quitarle la sede de la OMT, ya no ve la probabilidad de que eso ocurra.
Como parte de la ofensiva diplom¨¢tica que inici¨® Exteriores para que el organismo de Naciones Unidas contin¨²e en Espa?a, el pasado 15 de septiembre se present¨® el proyecto para la construcci¨®n, a partir de 2022, de una nueva sede de 8.000 metros cuadrados junto al Palacio de Congresos de Madrid, en el paseo de la Castellana. A la presentaci¨®n asistieron los ministros de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Manuel Albares; y de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto; junto al alcalde de Madrid, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida, y el propio secretario general de la OMT, el georgiano Zurab Pololikashvili.
Tras ese acto, informan fuentes gubernamentales, la OMT firm¨® la extensi¨®n del acuerdo por el que Espa?a cede el edificio a Naciones Unidas, lo que ya ha sido ratificado por el Ejecutivo. De esta forma se daba casi por descontado que la sede se quedar¨ªa en Espa?a y le daban portazo a la crisis. As¨ª lo dej¨® entrever Albares en una intervenci¨®n durante la presentaci¨®n del proyecto, cuando asegur¨® que Espa?a hab¨ªa sondeado a otros pa¨ªses miembros del organismo y no percib¨ªa ning¨²n inter¨¦s a aceptar el traslado a Riad, la capital saud¨ª.
En los ¨²ltimos d¨ªas, fuentes empresariales tambi¨¦n daban por hecho que Espa?a retendr¨ªa la sede central de la Organizaci¨®n Mundial del Turismo. El argumento es el mismo: Arabia Saud¨ª ha explorado sus opciones y ha llegado a la conclusi¨®n de que no cuenta con suficientes apoyos. Al Ejecutivo tambi¨¦n llegaban esos rumores, pero faltaba un gesto saud¨ª, aunque fuera por canales extraoficiales, que finalmente se ha producido. Una llamada de alivio.
En poco menos de dos meses, el Gobierno ha pasado de la sorpresa inicial ¡ªal conocer que Riad pretend¨ªa llevarse la sede de un organismo de la ONU, algo muy inusual¡ª a respirar tranquilo. Entre medias se vivi¨® la situaci¨®n con inquietud, ya que no era descabellado que Arabia Saud¨ª consiguiera los votos necesarios. De ah¨ª que Espa?a movilizase su artiller¨ªa diplom¨¢tica en la Uni¨®n Europea, en la propia ONU y tambi¨¦n en contactos bilaterales con algunos pa¨ªses. El objetivo era dejar en el dique seco a Arabia Saud¨ª y as¨ª fue. La suma para dar luz verde al traslado era complicada y a Riad no le sal¨ªan las cuentas: necesitaba al menos 106 votos (dos tercios) a favor de los 159 miembros de la OMT en esa hipot¨¦tica votaci¨®n.
Evitar la votaci¨®n
La prioridad de Espa?a, que en la campa?a saud¨ª ve¨ªa incluso la connivencia de Pololikashvili ¡ªel organismo siempre se ha mantenido neutral ya que se deb¨ªa a la decisi¨®n de los Estados miembros¡ª, era que el asunto no llegara al orden del d¨ªa de la reuni¨®n de Marraquech. Es decir, evitar que hubiera votaci¨®n porque ser¨ªa dif¨ªcil de controlar. La estrategia ha funcionado.
La OMT es el organismo de Naciones Unidas que vela por un turismo responsable, sostenible y accesible. Se instituy¨® en 1975 y su primera asamblea, en mayo de aquel a?o y con Franco todav¨ªa en vida, se celebr¨® en Madrid, donde ha estado radicada su sede desde el principio. Formalmente se integr¨® en la ONU en 1976, cuando Espa?a, una potencia tur¨ªstica de primer orden, ya era una democracia naciente. Actualmente cuenta con 152 empleados en la capital, seg¨²n su p¨¢gina web, y es la ¨²nica base central de una sede de Naciones Unidas en el pa¨ªs.
Arabia Saud¨ª, por su parte, ha apostado fuerte por el turismo en los ¨²ltimos a?os: inaugur¨® el pasado mayo el primer centro regional de la OMT en Oriente Pr¨®ximo y en 2019 empez¨® a recibir turistas (hasta entonces solo se pod¨ªa entrar con invitaci¨®n del Estado o con un visado de negocios). En este contexto, acoger la sede del organismo era visto como un espaldarazo a su estrategia de apertura al mundo para tratar de convertirse en una gran potencia tur¨ªstica a medio plazo. Pese a ello, el peso del pa¨ªs de Oriente Pr¨®ximo todav¨ªa es ¨ªnfimo y cuenta con cifras que palidecen frente a las de Espa?a, el segundo pa¨ªs m¨¢s visitado del mundo. Ni su poder diplom¨¢tico, que tiene en las reservas de petr¨®leo un poderoso argumento, ha conseguido llevar a la regi¨®n la que ser¨ªa la primera sede de la ONU. Al menos por el momento.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.