La seguridad del suministro de gas a Europa
La infraestructura continental de importaci¨®n est¨¢ muy infrautilizada. Actuando juntos, los pa¨ªses de la UE podr¨ªan aprovechar este margen de flexibilidad y crear un sistema com¨²n de seguridad que pudiera activarse en caso de interrupci¨®n en el abastecimiento
El precio del gas natural est¨¢ experimentando subidas hist¨®ricas en Europa debido a la tormenta perfecta causada por la coincidencia de numerosos factores relacionados tanto con la demanda como con la oferta.
La demanda europea de este combustible ha ido aumentando, tanto para calefacci¨®n de uso dom¨¦stico como para la industria y la generaci¨®n de energ¨ªa debido a las fr¨ªas temperaturas invernales, a la pr¨¢ctica generalizada del teletrabajo, a la re...
El precio del gas natural est¨¢ experimentando subidas hist¨®ricas en Europa debido a la tormenta perfecta causada por la coincidencia de numerosos factores relacionados tanto con la demanda como con la oferta.
La demanda europea de este combustible ha ido aumentando, tanto para calefacci¨®n de uso dom¨¦stico como para la industria y la generaci¨®n de energ¨ªa debido a las fr¨ªas temperaturas invernales, a la pr¨¢ctica generalizada del teletrabajo, a la recuperaci¨®n constante de la producci¨®n industrial, a las olas de calor veraniegas que impulsan el uso del aire acondicionado y a la enorme subida de los precios de las emisiones de CO2, que fomentan el cambio del carb¨®n al gas.
Del lado de la oferta han surgido tambi¨¦n restricciones, ya que la producci¨®n interna europea no ha dejado de caer, la competencia mundial por los cargamentos de gas natural licuado (GNL) ha aumentado enormemente como consecuencia del aumento de la demanda asi¨¢tica, y Rusia ha limitado sus exportaciones por gaseoducto a Europa por diversas razones, como la elevada demanda interna, las interrupciones de la producci¨®n por motivos t¨¦cnicos y una posible voluntad pol¨ªtica de limitar discrecionalmente los env¨ªos naturales a Europa para defender su postura de empezar a suministrar a trav¨¦s del Nord Stream 2.
Como consecuencia de esta situaci¨®n, los niveles de reservas de gas natural en Europa est¨¢n en su nivel m¨¢s bajo en al menos una d¨¦cada justo antes de que empiece el crucial consumo invernal para calefacci¨®n. Esto exacerba el riesgo de que se produzcan nuevos picos de precios por encima de los m¨¢ximos ya alcanzados y plantea la amenaza de una posible escasez de suministro durante el invierno, en caso de que el tiempo sea especialmente fr¨ªo.
En medio de esta emergencia, la cuesti¨®n de la seguridad en el suministro de gas est¨¢ volviendo con fuerza a Europa, tras al menos cinco a?os de relativa tranquilidad. Se han retomado los debates sobre c¨®mo aumentar la capacidad negociadora del bloque comunitario frente a proveedores externos, con una reanudaci¨®n tambi¨¦n de viejas propuestas planteadas en los primeros tiempos de la Uni¨®n de la Energ¨ªa en la UE, como la creaci¨®n de una plataforma europea centralizada para la compra de gas natural.
En nuestra opini¨®n, en lugar de hacer todo lo posible por reducir los suministros de gas de proveedores clave como Rusia, la seguridad en el suministro podr¨ªa alcanzarse de manera m¨¢s eficaz garantizando que se mantienen alternativas no utilizadas. As¨ª podr¨ªan aprovecharse en caso de interrupci¨®n del suministro por parte de un proveedor clave.
La creaci¨®n de estas reservas alternativas podr¨ªa ser muy dif¨ªcil a escala nacional, pero es bastante f¨¢cil a escala comunitaria. De hecho, como tendencia general, la infraestructura europea de importaci¨®n de gas est¨¢ en la actualidad muy infrautilizada. Actuando juntos, los pa¨ªses de la UE podr¨ªan aprovechar este margen de flexibilidad y crear una suerte de sistema de seguridad para toda la Uni¨®n que pudiera activarse en caso de interrupci¨®n del suministro.
En t¨¦rminos pr¨¢cticos, bastar¨ªa con exigir por ley a todos los importadores y productores de gas del bloque que dispusieran de cierta cantidad de suministros alternativos (como el 20% de la demanda contratada durante un a?o) para hacer el sistema gas¨ªstico europeo m¨¢s seguro, flexible e interconectado. Es importante se?alar que, dise?ado como tal, este sistema no entorpecer¨ªa el volumen normal de las operaciones de mercado.
Aun siendo t¨¦cnica y econ¨®micamente factible, esta opci¨®n es pol¨ªticamente compleja por la sencilla raz¨®n de que la mayor¨ªa de los pa¨ªses de la UE sigue considerando la seguridad en el suministro de gas una cuesti¨®n relacionada exclusivamente con los pa¨ªses de Europa central y del Este, que dependen en gran medida del gas ruso. La situaci¨®n actual, con los precios del gas disparados en toda Europa, demuestra que se trata de una percepci¨®n b¨¢sicamente err¨®nea.
De modo que, si bien Europa no tiene m¨¢s opci¨®n que afrontar el pr¨®ximo invierno principalmente sobre la base de un racionamiento de la demanda de gas basado en el mercado, para el pr¨®ximo a?o un margen de reserva en consonancia con lo que proponemos, organizado a escala de la UE por los proveedores, podr¨ªa librarnos del problema, con poco gasto a?adido en los buenos tiempos y ventajas enormes en los malos.