El ¡®gr¨¢fico Ribera¡¯ del precio de la luz
La vicepresidenta sintetiza en un posavasos el esquema con el que busca atajar la escalada el¨¦ctrica
¡±Si me dais un papel y un boli¡¡±. Tiene fama de dura, pero mucha vocaci¨®n explicativa. Ante reiteradas preguntas de sesgo esc¨¦ptico, Teresa Ribera agarra el rotulador y el ¨²nico material sobre el que escribir que tiene a mano: el posavasos de su vaso de agua. Ah¨ª dibuja el diagrama de su soluci¨®n para rebajar el precio de la luz, que a¨²n tiene que ser visado por Bruselas. Tras un conato de regateo y risas ¡ª¡±para nosotros, esto es como ...
¡±Si me dais un papel y un boli¡¡±. Tiene fama de dura, pero mucha vocaci¨®n explicativa. Ante reiteradas preguntas de sesgo esc¨¦ptico, Teresa Ribera agarra el rotulador y el ¨²nico material sobre el que escribir que tiene a mano: el posavasos de su vaso de agua. Ah¨ª dibuja el diagrama de su soluci¨®n para rebajar el precio de la luz, que a¨²n tiene que ser visado por Bruselas. Tras un conato de regateo y risas ¡ª¡±para nosotros, esto es como la servilleta de Laffer¡±, ironizan los redactores¡ª, asume brindarlo a los lectores. Se reproduce junto a este texto.
La quinta columna a la derecha es la fundamental: el precio del gas. M¨¢s alta, porque es m¨¢s caro y justo la que busca intervenir con este mecanismo de nuevo cu?o. Las otras cuatro a su izquierda, las del resto de tecnolog¨ªas: solar, e¨®lica, nuclear, hidr¨¢ulica... La trama de l¨ªneas oblicuas por encima da la l¨ªnea horizontal ¡°gas¡± es el coste actual: de la quinta columna, el del mercado; de las otras cuatro, el sobreprecio por ¡°contagio¡± del gas en las subastas del pool por la naturaleza misma del mercado marginalista. Esas cuant¨ªas deber¨ªan desaparecer. ?C¨®mo se reemplazan? Bajo la l¨ªnea que indica el tope introducido al gas, el tramado es el beneficio ca¨ªdo del cielo que obtiene el resto de energ¨ªas y con el que ahora se financiar¨ªa el sobrecoste de ese combustible.
No hay muchos posavasos con ilustraciones famosas. Las servilletas han tenido m¨¢s ¨¦xito. La del economista Arthur Laffer contiene el diagrama que les dibuj¨® en 1973 a los dirigentes republicanos Dick Cheney y Donald Rumsfeld con su discutible teor¨ªa de que bajar impuestos incrementaba los ingresos. Ronald Reagan la aplic¨®. Fracas¨®, al cosechar d¨¦ficits presupuestarios desmesurados. Pablo Picasso sol¨ªa pintarlas. Es muy conocido el dibujo de una mujer de la calle que le sirvi¨® en 1945 para pagar la cuenta en un restaurante parisino. Entre el fiasco de Laffer y los ¨¦xitos de Picasso, pronto se ver¨¢ el resultado del gr¨¢fico Ribera.
Aunque las cifras del gr¨¢fico no son exactas, seg¨²n la vicepresidenta, en la charla habla de un rango de entre 100 y 140 euros por megavatio hora como resultado del tope. Eso supondr¨ªa reducir pr¨¢cticamente a la mitad el precio de la luz respecto a su nivel actual. ¡°Nos hemos acostumbrado a que est¨¦ entre 230 y 250, con picos de 500 y solo a veces, con suerte, baja a 150¡å, dice Ribera. ¡°Es un horror. Nuestra referencia hist¨®rica de lo insoportable era 180: nadie pensaba que se fuera a llegar ni siquiera a eso¡±.
?C¨®mo se llega a ese precio? Dos especialistas consultados por este diario, que prefieren mantenerse en el anonimato, desgranan la cifra paso a paso. Primero, la traslaci¨®n del gas natural a la luz: para generar un megavatio de electricidad necesitas dos de gas, as¨ª que el precio pasa autom¨¢ticamente de 30 a 60. Segundo, hay que sumar el coste de las emisiones de CO?: cada central de ciclo combinado tiene que pagar unos 36 euros por esos derechos, deja la cifra en 96. Pero a¨²n queda m¨¢s: hay que repercutir el sobrecoste del gas (de 30 a 120 la brecha no es menor) sobre cada MWh consumido. Depende, entre otras cosas, de cu¨¢nto gas se consume cada d¨ªa para generar electricidad.
Con todas las cautelas posibles, que son muchas, el resultado es el que sigue: en torno a los 125 euros por megavatio hora en el mercado mayorista, frente a los m¨¢s de 225 actuales. Una rebaja que est¨¢, hoy por hoy, en manos de Bruselas pero que los mercados de futuros ya han empezado a descontar, con un notable desacople entre el precio de la luz en Espa?a y Portugal respecto a Alemania. La entente ib¨¦rica parece mucho m¨¢s cerca de su meta.