Las puertas del derroche en los grandes ejes comerciales de Madrid, Barcelona y Valencia: un 71% de las tiendas tiene la entrada abierta

El decreto de ahorro energ¨¦tico convalidado el pasado jueves en el Congreso contempla la obligaci¨®n de que las tiendas a pie de calle ¡°dispongan de un sistema de cierre de puertas adecuado¡±, que puede ser autom¨¢tico, para evitar el despilfarro de aire acondicionado en verano o calefacci¨®n en invierno. ...

El decreto de ahorro energ¨¦tico convalidado el pasado jueves en el Congreso contempla la obligaci¨®n de que las tiendas a pie de calle ¡°dispongan de un sistema de cierre de puertas adecuado¡±, que puede ser autom¨¢tico, para evitar el despilfarro de aire acondicionado en verano o calefacci¨®n en invierno. El texto inicial fija el pr¨®ximo 30 de septiembre como l¨ªmite para instalar estos sistemas. Est¨¢ por ver si durante la tramitaci¨®n la fecha sufre alguna variaci¨®n. En cualquier caso, un recorrido esta semana por tres de las principales calles comerciales de Madrid, Barcelona y Valencia, las tres peatonales, muestra que un 71% de las 109 tiendas observadas tiene las puertas abiertas.

La arteria comercial donde m¨¢s derroche se produce es en la calle de Don Juan de Austria de Valencia, donde el 84% de las tiendas tiene la entrada abierta. En Madrid, son un 74% los comercios de la calle de Preciados los que tienen las puertas abiertas. En Barcelona, en el Portal de l¡¯?ngel, el porcentaje de incumplimiento es menor, pero tambi¨¦n mayoritario: el 58%.

En las tres ciudades las puertas que predominan son las correderas (43%), pero solo un tercio de las tiendas las activa, el resto las bloquea para que permanezcan abiertas. En este caso, para cumplir el decreto bastar¨¢ con activarlas o reparar las que, cuentan las dependientas, est¨¢n estropeadas. Hay un 28% de las tiendas cuyas puertas son de bisagra, y pr¨¢cticamente todas (98%) est¨¢n abiertas de par en par. Y existe un 29% de comercios que ni si quiera tiene puerta, solo persiana.

Los motivos por los que los comerciantes mantienen abiertas las puertas de los establecimientos son varios. Pero esencialmente indican que cerrarlas supone perder clientela, porque entra menos gente. Algunos apuntan que las dejaron abiertas durante la desescalada de la pandemia y la ciudadan¨ªa se ha acostumbrado: conf¨ªa en que lo est¨¦n para que los locales se ventilen. Las asociaciones de comerciantes piden ayudas para instalar las nuevas puertas y m¨¢s tiempo para hacer las obras o una moratoria en las sanciones. El texto del real decreto remite a otras dos leyes para concretarlas: el Reglamento de Instalaciones T¨¦rmicas en los Edificios (RITE) y la Ley 21/1992 de Industria, que contempla multas que de entre 1.000 euros y hasta 60.000.

Ayudas para la instalaci¨®n

El coste de instalar puertas autom¨¢ticas oscila entre 2.500 y 4.000 euros, apuntan varias empresas del sector consultadas. Depende del tama?o del acceso a cada establecimiento. En Barcelona, el Ayuntamiento ha abierto una l¨ªnea de subvenciones para los comerciantes que necesiten instalarlas. Costear¨¢n hasta 2.000 euros, pero los comerciantes alertan de que, m¨¢s all¨¢ del centro de la ciudad, los negocios medianos o familiares no podr¨¢n afrontar el gasto cuando todav¨ªa no se han recuperado del desplome de ventas que supuso la pandemia.

Rafael Torres, presidente de la valenciana Confecomer? y de la Confederaci¨®n Espa?ola de Comercio, recuerda que el comercio ya tuvo que adecuarse con la pandemia a que las puertas de sus establecimientos permanecieran abiertas. Torres estima ¡°que en Espa?a pueden llegar a necesitar de esta instalaci¨®n entre 100.000 y 150.000 comercios, por ello vemos insuficiente el plazo dado hasta el 30 de septiembre para la ejecuci¨®n de estas inversiones ante tanta demanda¡±. Los comerciantes de la Comunidad Valenciana est¨¢n pendientes de c¨®mo se materializar¨¢n las ayudas anunciadas por la Generalitat en respuesta a la petici¨®n de las patronales. ¡°Trataremos de ampliar plazos, tal y como estamos pidiendo desde el principio, pues ser¨ªa lo l¨®gico despu¨¦s de que se tramite como proyecto de ley¡±, dice Torres.

Las grandes cadenas cumplen

La mayor¨ªa de grandes establecimientos como el Corte Ingl¨¦s, Fnac, Mango o las tiendas del grupo Inditex (Zara, Bershka, Massimo Dutti) tienen puertas correderas desde hace tiempo, aunque seg¨²n reconocen algunos encargados hasta la entrada en vigor del real decreto no las han activado. El uso de las correderas autom¨¢ticas se ha extendido en la ¨²ltima d¨¦cada, sobre todo para facilitar el acceso de las personas con discapacidad y para dar un aspecto moderno, seg¨²n Rafael Fern¨¢ndez, director de Domya, uno de los grandes grupos del sector. Bares y restaurantes han sido sus clientes principales, porque a los camareros que cargaban bandejas del interior a la terraza les facilita la vida. Fern¨¢ndez asegura que instalar puertas autom¨¢ticas, correderas o batientes, es una inversi¨®n sensata que beneficia a largo plazo. ¡°En cuatro o seis a?os es posible recuperar el dinero invertido¡±, asegura.

Puertas correderas abiertas

Algunos segu¨ªan esta semana sin activar el mecanismo de apertura autom¨¢tica. Elena Enrique, encargada de Calzedonia en la calle de Preciados, teme que entrar en su negocio sea un deporte de alto riesgo: ¡°Va a ser un problema porque hemos tenido clientes que se han golpeado en la cara porque no hab¨ªan distinguido la puerta transparente¡±. En Portal de l¡¯?ngel, otra encargada de una gran cadena explica que cerrar la puerta tiene un efecto inmediato en la entrada de clientes: ¡°Se nota un mont¨®n e impacta en los datos que tenemos que facilitar a diario a la empresa, no nos conviene activarla¡±. Otros negocios aseguran que la puerta autom¨¢tica permanece abierta porque est¨¢ estropeada: ¡°El decreto ha sido la excusa para arreglarla, vienen el d¨ªa 5¡å, indica Isabel, de la tienda Jimmy Lion.

Las de bisagra abren de par en par

El 98% de las tiendas que tienen puertas de bisagra las mantiene abiertas. Las ¨²nicas que las tienen cerradas son joyer¨ªas, por razones de seguridad. ¡°Nosotros mantenemos el aire acondicionado a los grados aconsejados por el Gobierno, pero las puertas est¨¢n abiertas [un modo de invitar a los compradores a entrar al local, sobre todo cuando aprieta el sol], as¨ª que estamos pasando calor aqu¨ª dentro¡±, comenta la empleada de una conocida cadena de perfumer¨ªas valenciana ubicada en Don Juan de Austria. En Portal de l¡¯?ngel Benetton tiene un acceso generoso, con grandes puertas de cristal abiertas en invierno y verano, reconocen las empleadas. Desconocen los planes de la firma.

La persiana como ¨²nico cierre

Las grandes empresas de instalaci¨®n de puertas est¨¢n experimentando un agosto inusual, con un bum de consultas de presupuestos, aunque las contrataciones por ahora son menores. El Grupo Icara, con sede en Madrid, ha tenido en agosto el doble de consultas de lo habitual. Est¨¢n negociando un acuerdo con la Asociaci¨®n de Hosteler¨ªa de Madrid para que los socios tengan descuentos. ¡°Hemos hecho acopio de motores porque prevemos que va a venir en septiembre una cantidad de trabajo impresionante¡±, dice Jacqueline Vera, portavoz de la compa?¨ªa. Algunos comercios esperan pronto la reforma. Primor en Preciados, que solo tiene un cierre met¨¢lico, ha encargado una puerta corredera autom¨¢tica, seg¨²n Rafa P¨¦rez, responsable de ese local. ¡°Ya est¨¢ pedida pero como es agosto y va todo m¨¢s lento, tardar¨¢ un poco¡±.

En Barcelona, en el Portal de l¡¯?ngel las dependientas de varias tiendas explican que sus jefes han encargado puertas correderas. ¡°El otro d¨ªa vinieron a tomar medidas¡±, indican desde dos negocios tan variados como una tienda de fundes de m¨®vil o la joyer¨ªa Tous. La helader¨ªa y turroner¨ªa Planelles tampoco tiene puertas: de la calle se pasa pr¨¢cticamente al mostrador. ¡°A finales de septiembre cerramos hasta la temporada de turrones que comienza en noviembre¡±, tenemos dos meses para pensar c¨®mo lo hacemos, explica Sergi Alsina. En Valencia, comercios peque?os de Don Juan de Austria donde venden fundas de m¨®viles, chucher¨ªas o gafas de sol, todos sin puertas, advierten de que la adaptaci¨®n de sus locales depende de las franquicias a las que representan. ¡°No s¨¦ nada todav¨ªa¡±, responde con extra?eza otra dependienta.