La inversi¨®n de 1.100 millones de Repsol que mantiene en vilo a Tarragona y podr¨ªa irse a Portugal
La compa?¨ªa energ¨¦tica alarga la incertidumbre sobre un proyecto pionero para convertir residuos urbanos en combustible
Las trabas parlamentarias, sobre todo de Junts y el PNV, que encuentra el Gobierno para convertir en permanente el impuesto extraordinario sobre la banca y las compa?¨ªas energ¨¦ticas suenan a estribillo conocido, toda vez que Pedro S¨¢nchez se apoya sobre una fr¨¢gil mayor¨ªa que obliga a ...
Las trabas parlamentarias, sobre todo de Junts y el PNV, que encuentra el Gobierno para convertir en permanente el impuesto extraordinario sobre la banca y las compa?¨ªas energ¨¦ticas suenan a estribillo conocido, toda vez que Pedro S¨¢nchez se apoya sobre una fr¨¢gil mayor¨ªa que obliga a hacer malabares constantes para contentar a los socios de la investidura. Esta vez, sin embargo, el Ejecutivo tambi¨¦n tiene que afrontar las quejas p¨²blicas de un opositor en¨¦rgico, m¨¢s acostumbrado a ventilar las diferencias en la discreci¨®n de los despachos. La compa?¨ªa Repsol se erige en la voz cr¨ªtica contra los planes del Gobierno y advierte de que la ¡°demagogia fiscal¡± acarrea consecuencias. En juego est¨¢ una inversi¨®n de 1.100 millones de euros en el complejo industrial de Tarragona, para levantar una planta que transforme los residuos en combustible mediante una tecnolog¨ªa que tiene muy poca competencia en Europa. Tarragona es el principal centro de trabajo, por volumen de personal, que tiene Repsol en Espa?a. Se cuentan 1.400 empleados directos y otros 1.400 que dependen de empresas subcontratadas.
En Tarragona, la compa?¨ªa energ¨¦tica est¨¢ desarrollando desde hace varios a?os el proyecto Ecoplanta Molecular Recycling Solution, la que est¨¢ llamada a ser ¡°la primera planta de Espa?a de valorizaci¨®n de residuos municipales no reciclables a metanol¡±. Se trata de una iniciativa pionera que emplea basuras y sobras vegetales para fabricar nuevos materiales y biocombustibles avanzados. La instalaci¨®n, que deber¨ªa operar dentro del complejo industrial que ya explota Repsol en el municipio de El Morell, al lado de Tarragona, tiene el visto bueno administrativo y cuenta con las autorizaciones urban¨ªsticas municipales y con las licencias ambientales de la Generalitat.
Su entrada en funcionamiento, a la espera de tener la luz verde definitiva de la direcci¨®n de la compa?¨ªa, est¨¢ prevista para 2028. Pero en el centro de decisi¨®n de Repsol se ha pisado el freno, ante el intento del Gobierno de convertir en permanentes los grav¨¢menes extraordinarios sobre banca y energ¨¦ticas. La compa?¨ªa, que se anot¨® un beneficio de 3.168 millones de euros en 2023, sostiene que el endurecimiento impositivo compromete el retorno de la inversi¨®n y obliga a evaluar el traslado de la idea a su centro industrial de Sines (Portugal) o a desecharlo directamente.
De momento, el Ministerio de Hacienda ha pospuesto la controvertida reforma para convertir en fijos los grav¨¢menes extraordinarios sobre banca y energ¨¦ticas. Pero no por mucho: necesitar¨ªa ejecutarlo antes del 31 de diciembre para poder as¨ª hacer tributar a estos grandes grupos por los beneficios cosechados en este ejercicio. En un principio, el Gobierno contemplaba la posibilidad de incluir el nuevo esquema a trav¨¦s de una enmienda en la transposici¨®n de la directiva europea que establece una imposici¨®n m¨ªnima a las multinacionales, despu¨¦s de que el plazo para incluir correcciones a esta normativa se ampliase por en¨¦sima vez, ahora hasta el 30 de octubre. Eso todav¨ªa da al Ejecutivo unos d¨ªas de margen para intentar cerrar una negociaci¨®n que se ha vuelto muy compleja.
Seg¨²n el dise?o aprobado por Repsol, la Ecoplanta podr¨ªa procesar anualmente alrededor de 400.000 toneladas de residuos municipales no reciclables procedentes principalmente de los ecoparques (plantas de recuperaci¨®n y tratamiento de residuos) de las localidades cercanas, lo que equivaldr¨ªa a los residuos generados en un a?o por una poblaci¨®n de 800.000 personas. Los defensores del proyecto aseguran que este metanol est¨¢ llamado a ser un combustible esencial para descarbonizar el transporte y el tr¨¢fico marino, donde el uso de motores el¨¦ctricos es muy poco eficaz por el elevado peso que implican las bater¨ªas.
Como parte del mismo plan, Repsol tambi¨¦n tiene congelado el despliegue de ¡°un electrolizador alcalino de gran capacidad a escala europea¡±. La instalaci¨®n est¨¢ dise?ada para producir 2,7 toneladas de hidr¨®geno renovable por hora, generando hidr¨®geno verde y ox¨ªgeno para las empresas que operan en el polo petroqu¨ªmico de Tarragona, el de mayor envergadura del sur de Europa.
Efecto contagio
En total, se trata de una inversi¨®n de 1.100 millones de euros que impacta directamente en el nervio del pol¨ªgono petroqu¨ªmico de Tarragona, no tanto por la generaci¨®n de empleos que pueda conllevar la nueva instalaci¨®n, que no se prev¨¦ muy considerable por la elevada tecnificaci¨®n del proyecto, como por el efecto contagio que pueda tener en un mapa industrial que est¨¢ muy interrelacionado y donde los v¨ªnculos entre las compa?¨ªas son s¨®lidos.
La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda D¨ªaz, ha criticado la ¡°amenaza¡± de la compa?¨ªa energ¨¦tica de dejar en suspenso su millonaria inversi¨®n en Catalu?a y ha manifestado que ¡°las empresas espa?olas deben implicarse con su pa¨ªs¡±. El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha sido muy cr¨ªtico con la posibilidad de que se perpet¨²e el impuesto: ¡°Me repugna particularmente la demagogia en torno a las cuestiones fiscales¡±, ha manifestado recientemente.
El presidente de la C¨¢mara de Barcelona, Josep Santacreu, afirm¨® este mi¨¦rcoles que le parece ¡°preocupante¡± que se pueda mantener el impuesto a las energ¨¦ticas en un periodo muy largo de tiempo y ha alertado sobre los posibles riesgos, en relaci¨®n con que puede afectar a la capacidad inversora de las empresas en un momento que se encuentran en plena fase de transici¨®n energ¨¦tica. ¡°Tocar un elemento sin tener en cuenta el conjunto puede acarrear consecuencias m¨¢s negativas que positivas¡±, ha se?alado Santacreu. Por su parte, el jefe de Gabinete de Estudios Econ¨®micos de la C¨¢mara, Joan Ramon Rovira, considera que los impuestos tienen que ser los ¡°menos ineficientes posible¡±.