Qatar amenaza el liderazgo espa?ol en el negocio del p¨¢del

Momo Gonz¨¢lez, 26 a?os, n¨²mero 13? de la clasificaci¨®n mundial de p¨¢del, golpea la pelota amarilla con su pala de fibra de carbono roja. La bola describe un efecto al igual que si la hubiera cortado en dos con un cuchillo. Devolverla exige, del otro lado de la red, agacharse y anticipar el rebote en la pared de cristal. Esta jugada sucede sobre 10 metros de ancho por 20 de largo en uno de los deportes que, aseguran, est¨¢ creciendo m¨¢s r¨¢pidamente en el mundo. Los costes son reducidos. Fabricar una pista cuesta entre 18.000 y 25.000 euros, una raqueta alrededor de 120 euros, un paquete de tres ...

Momo Gonz¨¢lez, 26 a?os, n¨²mero 13? de la clasificaci¨®n mundial de p¨¢del, golpea la pelota amarilla con su pala de fibra de carbono roja. La bola describe un efecto al igual que si la hubiera cortado en dos con un cuchillo. Devolverla exige, del otro lado de la red, agacharse y anticipar el rebote en la pared de cristal. Esta jugada sucede sobre 10 metros de ancho por 20 de largo en uno de los deportes que, aseguran, est¨¢ creciendo m¨¢s r¨¢pidamente en el mundo. Los costes son reducidos. Fabricar una pista cuesta entre 18.000 y 25.000 euros, una raqueta alrededor de 120 euros, un paquete de tres bolas, unos cuatro, y toda la ropa 55 euros. Momo empez¨® a restar a los 11 a?os, en Antequera (M¨¢laga), con sus padres, y hoy reconoce que ¡°los 50 o 60 primeros jugadores de la clasificaci¨®n internacional pueden vivir¡± de sortear pelotas por encima de una red de 10 metros de largo y una altura, en su centro, de 0,88 metros.

El sonido del golpeo es seco, no amortiguado, a diferencia del tenis. Todav¨ªa est¨¢ lejos de su hermano mayor. El mundo de Carlos Alcaraz o Paula Badosa envuelve un mercado profesional de 7.000 millones de euros. En el p¨¢del, en cambio, la pelota vibra el cristal por solo 50 millones (ese el dinero que mueve el circuito profesional). Pero el negocio global, seg¨²n la consultora Deloitte y Playtomic (una plataforma espa?ola de reservas), alcanzar¨¢ 6.000 millones de euros durante 2026. De ser ciertas las previsiones: la pujanza resulta incuestionable. Quedan pendientes por abrir mercados de la capacidad de Francia, el Reino Unido, Alemania, los pa¨ªses ¨¢rabes ¡ªincluida Arabia Saud¨ª¡ª o Estados Unidos. Estos d¨ªas, el 70% de las pistas se las reparten ¨²nicamente seis o siete territorios. Y el n¨²mero de clubes llega a 9.783 en todo el mundo. En 2026 ¡ªseg¨²n el optimista trabajo¡ª habr¨¢ 84.250 pistas en el planeta, m¨¢s de las 58.100 con las que se espera cierre 2024. Paso a paso. Hoy es un mercado, con alma amateur, de 2.000 millones (cifra que incluye el negocio del circuito profesional y el de los aficionados).

En el ejercicio 2022, se invirtieron en el mundo unos 200 millones de euros en la construcci¨®n de 8.200 nuevas pistas, un 28% m¨¢s que durante 2021. La estimaci¨®n total es de 37.432. Espa?a lidera este espacio con 15.300 canchas durante 2022. Ese ejercicio, se instalaron 1.300. Las licencias federativas (2023) alcanzan 101.326. Y ¨²nicamente por comparar. Hace solo una d¨¦cada apenas rondaban las 43.000. ¡°Es un deporte joven, din¨¢mico y moderno que desaf¨ªa los convencionalismos, y juegan tanto mujeres como hombres o en modalidad mixta¡±, describe en una nota Ignasi Prieto, director global de marketing de Seat y Cupra. Apoyan el juego. Junto con la Federaci¨®n Internacional de P¨¢del (FIP) promueven la competici¨®n Cupra FIP Tour.

Sin embargo, el futuro comparte d¨²o con el pasado. Exist¨ªa afici¨®n por el juego antes de la pandemia, pero la crisis sanitaria fue una m¨¢quina de devolver pelotas. Era el ¨²nico deporte colectivo que se pod¨ªa practicar al ser en pareja y al aire libre. La bola creci¨®. Tambi¨¦n resulta f¨¢cil de jugar en comparaci¨®n con el tenis. Y los aficionados se familiarizaron pronto con t¨¦rminos como spining (hacer girar la pelota con un fuerte efecto), drive (golpe frontal), liftar (trazar una par¨¢bola). Adem¨¢s, en noviembre de 2022, Espa?a gan¨® el mundial en Qatar contra Argentina, la otra potencia de este deporte. A partir de aqu¨ª, los pa¨ªses ¨¢rabes, que persegu¨ªan, en su momento, el f¨²tbol y el golf ¡ªa trav¨¦s de crear el millonario circuito LIV Golf, desafiando al hist¨®rico PGA Tour¡ª avistaron dinero y una forma tambi¨¦n para blanquear su oscuridad en los derechos humanos.

Movimientos

Desde luego, el capital detect¨® m¨¢s capital. Y sinti¨® que estaba compitiendo en el deporte correcto. Pepe Cano ¡ªpresidente de Sports Business Esade Alumni¡ª resume qu¨¦ ve cuando ve p¨¢del. ¡°Todo este movimiento no ha pasado desapercibido al dinero privado. Algunas de las operaciones m¨¢s importantes han sido la adquisici¨®n de Padel Nuestro por Backspin Capital Investments, la participaci¨®n de GP Bullhound en Playtomic o la reciente compra de World P¨¢del Tour (WPT)¡± [propiedad de la cervecera Estrella Damm] ¡°por el fondo Qatar Sports Investments (QSI), que gestionar¨¢ el nuevo circuito Premier Padel. En principio, deber¨ªa comenzar este mes¡±. Ser¨¢n los tres torneos profesionales junto con Premier Padel y A1 Padel.

¡°De esta forma finaliz¨® la guerra entre el WPT y los jugadores, algunos con contratos de exclusividad, pero que participaban en el Premier Padel debido a que la Bolsa era m¨¢s atractiva¡±, recuerda Diego Mor¨ªn, analista de IG. Y zanja: ¡°La compra de QSI marca el final de una era¡±. Los jugadores descansar¨¢n. Hasta ahora, algunos compet¨ªan todos los d¨ªas de la semana. Pero la operaci¨®n qatar¨ª a¨²n necesita el visto bueno de la Comisi¨®n Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC). Y su presidenta, Cani Fern¨¢ndez, tiene fama de ser una severa jueza de silla. Sobre todo cuando en la mesa est¨¢ la idea de crear Ultimate Padel Tour. Un torneo profesional asentado en Espa?a y que competir¨ªa con Premier Padel o A1 Padel. De aprobarse en la Comisi¨®n, el statu quo, por ahora, estar¨¢ dominado por Premier Padel, que estar¨ªa a cargo de la Federaci¨®n Internacional de P¨¢del (FIP).

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