?Crisis de deuda mundial a la vista?
Nunca antes en la historia econ¨®mica hab¨ªa estado el planeta tan endeudado. Los ¨²ltimos datos disponibles muestran que la deuda emitida global puede haber superado los 296 billones de d¨®lares, casi el 350% del PIB mundial. ?Qu¨¦ consecuencias puede tener semejante ¡®tsunami¡¯ de deuda? ?Lograr¨¢ parapetar esta situaci¨®n la reacci¨®n de los bancos centrales?
Los a?os 20 llevan camino de competir en sobresaltos con los del siglo pasado: la d¨¦cada acab¨® entonces con un hist¨®rico terremoto econ¨®mico. Seg¨²n un informe del Banco Mundial, solo en?2020, la actividad econ¨®mica se redujo en el 90% de los pa¨ªses, la econom¨ªa global se contrajo en torno a un 3% y la pobreza aument¨® en todo el planeta por primera vez en una generaci¨®n. La pandemia de dos largos a?os ha disparado la deuda p¨²blica algo m¨¢s del 25%.
Con la econom¨ªa arrodillada en la lona, noqueada, la invasi¨®n de Ucrania ha incrementado esa partida. Los gobiernos occidentales se han visto obligados a pedir m¨¢s fondos prestados con el fin de financiar el previsible gasto en defensa. El escenario econ¨®mico global en poco recuerda al de finales de 2019. Las graves consecuencias en sectores como la energ¨ªa, los suministros log¨ªsticos y el cereal son solo puntas del iceberg.
Nunca antes en la historia hab¨ªa estado tan endeudada la econom¨ªa mundial, tanto en t¨¦rminos absolutos como en porcentaje sobre el PIB. Durante las ¨²ltimas d¨¦cadas los habitantes del planeta se han acostumbrado a un mundo dominado por los cr¨¦ditos, la deuda y todo tipo de productos financieros.
De esta forma, seg¨²n los ¨²ltimos datos publicados por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Instituto de Finanzas Internacionales, el volumen de deuda emitido en todo el mundo asciende aproximadamente a 296 billones de d¨®lares estadounidenses. El equivalente a unas 227 veces el tama?o de la econom¨ªa espa?ola. Una mareante cifra que supone cerca del 350% del PIB mundial.
En la ¨²ltima d¨¦cada esta enorme acumulaci¨®n de deuda ha tenido dos protagonistas destacados: el sector p¨²blico y China.
Por un lado, durante los ¨²ltimos a?os los gobiernos han desplazado a las empresas como los mayores demandantes de deuda. De hecho, hoy el volumen de deuda p¨²blica emitida equivale ya a casi el 100% del PIB mundial, casi tanto como la deuda que las empresas, las familias y los propios gobiernos sumaban en la d¨¦cada de los a?os 70 del siglo XX. Esta es una evoluci¨®n que la sacudida por el coronavirus ha acelerado, pero cuya tendencia estructural viene de largo.
Por otro lado, sigue palpitando el volc¨¢n de China. Desde la crisis del 2008 la econom¨ªa del gigante asi¨¢tico ha duplicado su volumen de deuda frente al crecimiento del 20% que se registr¨® a nivel global. En este caso, las grandes protagonistas han sido las empresas p¨²blicas, que han incrementado considerablemente su volumen de inversi¨®n y gasto para intentar alimentar con ello el crecimiento de la econom¨ªa del pa¨ªs.
Al otro lado del mapamundi nadie es ajeno al efecto rebote constante. Entre las grandes econom¨ªas desarrolladas, una tradicional locomotora como Alemania ha registrado el mayor incremento porcentual, con una subida del endeudamiento del 14,7%, casi el doble que la media mundial.
La lectura positiva
A pesar de esta enorme escalada en los niveles de deuda mundial, la buena noticia es que los tipos de inter¨¦s reales pagados por los prestatarios no han dejado de caer. Esto, seg¨²n muchos expertos, podr¨ªa deberse a un cambio estructural en la econom¨ªa. El envejecimiento demogr¨¢fico, la globalizaci¨®n y los mayores niveles de desigualdad en los pa¨ªses desarrollados podr¨ªan explicar esta paradoja: que cada vez haya m¨¢s deuda en el mundo al tiempo que la financiaci¨®n cada vez resulta m¨¢s barata.
Pero, ?qu¨¦ implicaciones tiene este enorme tsunami de bonos, pr¨¦stamos y deudas de todo tipo y qu¨¦ supone la nueva pol¨ªtica anunciada por los principales bancos centrales? Se analizan en el ¨²ltimo v¨ªdeo de Si lo Hubiera Sabido, el canal de informaci¨®n financiera de Mutuactivos.