Mi encierro contado con sonidos e im¨¢genes
El instituto Cartima dise?¨® un nuevo plan de centro en torno al coronavirus para que ning¨²n alumno se descolgara. Lo llamaron Proyecto Confinamiento, uno de sus retos era crear un mapa sonoro.
En el espacio Desde mi clase te invitamos a contarnos la educaci¨®n desde el punto de vista de sus protagonistas, sus alumnos y profesores. Cu¨¦ntanos tu proyecto aqu¨ª.
Para Yasin, Pablo y Marcos la cuarentena suena a aplauso, a despertador, a microondas y a ruidito de la videoconferencia. As¨ª lo cuentan en uno de los retratos sonoros que han realizado los alumnos de 1? y 2? de ESO en el instituto Cartima, en Cartama, M¨¢laga. Cuando lleg¨® el confinamiento sus profesoras de Pl¨¢stica y de M¨²sic...
En el espacio Desde mi clase te invitamos a contarnos la educaci¨®n desde el punto de vista de sus protagonistas, sus alumnos y profesores. Cu¨¦ntanos tu proyecto aqu¨ª.
Para Yasin, Pablo y Marcos la cuarentena suena a aplauso, a despertador, a microondas y a ruidito de la videoconferencia. As¨ª lo cuentan en uno de los retratos sonoros que han realizado los alumnos de 1? y 2? de ESO en el instituto Cartima, en Cartama, M¨¢laga. Cuando lleg¨® el confinamiento sus profesoras de Pl¨¢stica y de M¨²sica les platearon un reto: contar un d¨ªa de su cuarentena sin usar la voz, s¨®lo con los sonidos y las im¨¢genes de su encierro. Por el camino, Yasin y sus compa?eros han aprendido con un proyecto cooperativo a escuchar el silencio, o m¨¢s bien los sonidos de su intimidad, y sobre todo, a pensar. ¡°Deber¨ªa ser obligatorio este proyecto en la ESO. Aprendes a mirar y a escuchar, que normalmente no nos paramos a hacerlo, me ha parecido genial que los profesores nos animen a ello, porque ves el mundo de otra manera¡±, cuenta Yasin El Azizi, de 13 a?os.
Los mapas sonoros ha sido el trabajo de las asignaturas de Pl¨¢stica y de M¨²sica, pero a su vez parte de un engranaje mucho mayor. Lo puso en marcha el director del centro, Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz, el d¨ªa que anunciaron que se cerraban las aulas. Este instituto, que trabaja por proyectos, hizo lo que mejor sab¨ªan hacer, pero adapt¨¢ndolo a una nueva realidad. ¡°Convocamos un claustro digital y propusimos a los profesores algo que pod¨ªa parecer una locura pero que se ha revelado como lo que realmente necesitaban los alumnos, nos olvidamos del plan de curso que hab¨ªamos previsto y creamos un nuevo proyecto para estos meses. Quer¨ªamos que esta crisis fuera tambi¨¦n una oportunidad de aprendizaje, aunque para nosotros supon¨ªa empezar de cero, y mucho trabajo sab¨ªamos que era la manera de conectar con los alumnos en un contexto muy duro para ellos¡±, explica Ruiz. As¨ª iniciaron para estos tres meses tres nuevas l¨ªneas de trabajo en torno al coronavirus. Lo llamaron Proyecto Confinamiento, y los mapas sonoros son una pata m¨¢s.
¡°Tuvimos que trabajar en grupo, investigar otros relatos, ponernos de acuerdo para decidir cu¨¢les eran los sonidos y las im¨¢genes de nuestro d¨ªa a d¨ªa, grabarlos, y contar una historia con ellos. Y nos hemos dado cuenta de todos los sonidos que tenemos alrededor y que nos pueden ayudar a expresarnos pero sin usar palabras¡±, explica Vanessa Wisniewska, de 13 a?os.
La profesora de M¨²sica, Rosario Ruiz Oca?a, cuenta que optaron por el relato sonoro porque ¡°a los alumnos les resultaba m¨¢s atractivo, no planteaba demasiadas dificultades t¨¦cnicas y les ayudaba a vivir de forma m¨¢s consciente cada momento del confinamiento. Han aprendido a prestar atenci¨®n y han descubierto multitud de sonidos de su vida en los que nunca hab¨ªan reparado...¡±. Rosario, que al igual que la profesora de Pl¨¢stica es nueva en el centro, recuerda que en el curriculum de Secundaria est¨¢ contemplado el silencio, el ruido y la contaminaci¨®n ac¨²stica, como contenidos a tratar. Carmen Garc¨ªa, profesora de Pl¨¢stica, aport¨® el aspecto m¨¢s gr¨¢fico a la propuesta: ¡°Tras investigar otros relatos sonoros ten¨ªan que pensar visualmente c¨®mo ilustrar los sonidos con sus propias fotograf¨ªas. Y han disfrutado tanto haci¨¦ndolo, que me han dado envidia y he hecho el m¨ªo propio y Rosario tambi¨¦n har¨¢ el suyo¡±, cuenta Carmen Garc¨ªa.
¡°Ha merecido la pena¡±
Para el director este trabajo que se enmarca en el Proyecto Confinamiento es una muestra m¨¢s de que si se pone el foco en los alumnos, el aprendizaje funciona. Aunque parec¨ªa una locura crear en pocos d¨ªas un proyecto completo de centro para un solo trimestre, cree que el esfuerzo ha merecido la pena: ¡°Lo normal en esta situaci¨®n extrema hubiera sido que desconectaran y nos preocupaba. Pero hemos logrado que el alumnado se interese por la propuesta pedag¨®gica que para ellos ha sido estimulante y motivadora¡±, explica el director Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz. ¡°Gracias a que les hemos enganchado los hemos mantenido activos trabajando e investigando, y sinti¨¦ndose ¨²tiles, mientras el mundo parec¨ªa desmoronarse¡±.
Esta es la clave del ¨¦xito de este centro que es una referencia en innovaci¨®n educativa. ¡°Si pones el centro en ellos, en su realidad e intereses, ellos responden y aprenden. El mundo demanda habilidades y destrezas y no solo acumulaci¨®n de conocimientos, por eso un proyecto cooperativo como este del mapa sonoro, en el que se tiene en cuenta lo que les est¨¢ ocurriendo y donde pueden desarrollar destrezas con las que se sienten c¨®modos, es clave en una situaci¨®n as¨ª¡±, cuenta el director.
El resultado, del que hay varias muestras en este reportaje, ser¨¢ un recuerdo para siempre de lo que aprendieron en estos d¨ªas tristes. ¡°Les he sugerido que lo guarden bien, porque dentro de muchos a?os, cuando los vuelvan a ver, se dar¨¢n cuenta de que han construido un diario de lo que vivieron en un momento de su vida en la que a¨²n no eran conscientes de lo que estaban viviendo¡±, concluye la profesora. Mar¨ªa V¨¢zquez, 12 a?os, estudiante de 1? de ESO lo confirma: "Desde que hice este proyecto escucho m¨¢s y aprecio m¨¢s los sonidos o el silencio. En este estr¨¦s de cuarentena ha sido una gozada pararme y escucha todos los sonidos bonitos que tenemos a diario alrededor. Me ha ayudado a distraerme en estos d¨ªas de tanto estr¨¦s pero tambi¨¦n me he dado cuenta de que estaban all¨ª y he aprendido a valorarlos y desear que nunca desaparezcan¡±.