?Crean los pobres empresas?

Esta entrada ha sido escrita por Jaime Bravo, miembro de Economistas Frente a la Crisis y estudiante de bachillerato.

?frica Subsahariana concentra la mayor¨ªa de los rangos de pobreza del mundo. Los ni?os siguen muriendo de inanici¨®n y hay una gran cantidad de personas que viven por debajo de 1 y 2 d¨®lares diarios. Aunque es cierto que la cantidad absoluta de poblaci¨®n que vive bajo estos par¨¢metros est¨¢ descendiendo, es evidente que todav¨ªa compone un problema serio que ha de ser atajado cuanto antes. Entonces, siendo una de las zonas de la Tierra que concentra mayor ¨ªndice de pobreza, ?se crean empresas all¨ª? ?Existe esa capacidad y esa posibilidad de ser emprendedor en los pa¨ªses m¨¢s pobres del planeta o es solo una ilusi¨®n? Responder a estas preguntas es complicado.

Njorkues la start-up preferida por todos los africanos que buscan trabajo porque agrega ofertas de portales de empleo, permitiendo hacer b¨²squedas en un solo sitio. Lo curioso de esta start-up es que naci¨® en Camer¨²n, en pleno coraz¨®n de ?frica. No es la ¨²nica. Waytag hace m¨¢s f¨¢cil la tarea de decirle a alguien d¨®nde est¨¢s. Esta start-up naci¨® en Sud¨¢frica. Apesar de que estas historias son realmente apasionantes y componen una historia diferente, no es la teor¨ªa general.

La mayor¨ªa de empresas en los pa¨ªses m¨¢s pobres del planeta son peque?as y no reportan grandes beneficios. Muchas de ellas dependen, en ¨²ltima instancia, de otras. El sector privado est¨¢ muy debilitado y el p¨²blico poco o nada en la creaci¨®n de empleo. No podemos olvidar que toda creaci¨®n de nuevas empresas a?ade estabilidad a la econom¨ªa y las hace crecer sumado a que hace que la innovaci¨®n florezca. Se necesitan estas empresas, pero es complicado su desarrollo en un ambiente como ese. Es un duro dilema.

La educaci¨®n tiene mucho que ver en ello. Pensemos en la educaci¨®n no como un t¨ªtulo universitario o como un grado, sino como una habilidad que te permita realizar alg¨²n tipo de trabajo. Por ejemplo, recolectar bayas no requiere de formaci¨®n ¨Cestrictamente, todos podr¨ªamos recolectar bayas o recoger cacao o patatas- pero los fundadores de las start-ups que hemos mencionado s¨ª la necesitaban. Por eso, la educaci¨®n y el entorno educativo son tan relevantes. Es m¨¢s complicado crear en Nigeria una empresa que revolucione el mercado tecnol¨®gico que hacerlo en Estados Unidos o en Alemania, por ejemplo. Por eso, la falta de educaci¨®n es un problema al que los economistas en desarrollo se enfrentan d¨ªa tras d¨ªa.

Njorku y Waytag son el reflejo de que en ?frica se est¨¢ produciendo un cambio. Pero un cambio lento. Las familias m¨¢s pobres del mundo son extensas y el tener hijos se concibe en algunas ocasiones como un modo de garantizar sus medios de vida. Muchos padres env¨ªan a sus hijos a las escuelas para que aprendan, pero esta no suele ser su actividad principal, porque tienen que ayudar ¨Cpor ejemplo- a su padre a recolectar cacao para que la familia, de 6 miembros, pueda sobrevivir. Y no es f¨¢cil que un padre con una carga familiar grande ¨Cdigamos que tiene 4 hijos y su mujer- quiera arriesgarse a emprender y a dejar su trabajo en la industria textil con un sueldo m¨¢s o menos constante. Emprender tambi¨¦n implica poder fracasar. El coste del fracaso es enormemente alto para una familia pobre.

Los ciudadanos pobres son como todos los dem¨¢s. No son personas irracionales o vagas que debido a lo que hacen est¨¢n obligadas a morir de inanici¨®n o a vivir en condiciones infrahumanas. Una educaci¨®n deficiente, un territorio pobre, pol¨ªticas econ¨®micas desacertadas, una sanidad en la que se invierte muy poco y unos mercados deficientes, muy deficientes, nos separan.