La Europa fragmentada

Invito a comparar dos mapas de Europa, con 100 a?os de diferencia. La Europa de 1914 era un continente de grandes naciones que gobernaban el mundo. Con apenas 20 Estados, Europa reg¨ªa pol¨ªticamente, expand¨ªa su econom¨ªa y propagaba su cultura por todas las geograf¨ªas. Sobresal¨ªan el Imperio Austro-h¨²ngaro, el Imperio Ruso, las recientes naciones unificadas de Alemania e Italia, y los consolidados Estados de Francia, Espa?a y Reino Unido. Entonces comenz¨® la deriva de desuni¨®n entre los europeos.

Hasta la primera mitad del siglo XX el desencuentro (b¨¦lico) comenz¨® por agrietar el centro de Europa, detonando en diversos Estados (Checoslovaquia, Hungr¨ªa, Yugoslavia¡­) la uni¨®n austro-h¨²ngara, en cuyo seno durante siglos convivieron pac¨ªficamente hasta 13 nacionalidades distintas. En la segunda mitad del siglo XX ese movimiento fracturador se focaliz¨® en el Este, despedazando la URSS (en 15 exrep¨²blicas sovi¨¦ticas) y deshaciendo incluso los nuevos Estados surgidos del desmembramiento del Imperio Austro-h¨²ngaro (Chequia, Eslovenia, Bosnia¡­).

A comienzos de 2014 existen ya m¨¢s de 50 Estados reconocidos en Europa; y parece que esa acci¨®n quebradiza contin¨²a pendularmente hacia el occidente europeo. Por tanto, podr¨ªamos situarnos en un escenario con una Europa con el triple de Estados que hace 100 a?os. Llegados a este punto, pregunto: ?es Europa ahora m¨¢s fuerte? ?Es irremediable el proceso de descomposici¨®n neofeudal de Europa? ?Existen alternativas a los procesos separatistas? ?Se puede converger o convivir unidos en democracias estatales amplias?

Quiz¨¢s la clave la encontremos en Suiza, que posee una gran descentralizaci¨®n local, ha permanecido inamovible a estos procesos desintegradores, garantizando la convivencia de sus distintas culturas, como hace 100 a?os ocurr¨ªa bajo el paraguas de las grandes naciones europeas.¡ª Xos¨¦ Areses.