"Si le tienes que explicar un chiste a tu pareja, busca un abogado"
El amor no es suficiente. Claves para ser felices (y comer perdices) durante 50 a?os con la misma persona
Aunque siempre se ha dicho que ¡°nada es para siempre¡±, hasta el 22 de junio de 1981, el matrimonio en Espa?a era para toda la vida. Despu¨¦s de un intenso enfrentamiento entre el entonces presidente del Gobierno, Adolfo Su¨¢rez, y la Iglesia Cat¨®lica, el Congreso aprob¨® la primera Ley del Divorcio, que entr¨® en vigor con la actual Constituci¨®n. La?ley fue posible gracias a la labor del ministro de Justicia, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, quien la defendi¨® con estas palabras: ¡°No podemos impedir que los matrimonios se rompan, pero s¨ª podemos impedir el sufrimiento de los matrimonios rotos¡±. Es dif¨ªcil saber cu¨¢ntas parejas han dejado de serlo desde entonces, y mucho menos si las que permanecen unidas son felices, dato que, seg¨²n el psic¨®logo y escritor Walter Riso, ser¨ªa el m¨¢s relevante. Lo?importante no es que un matrimonio celebre las bodas de oro o de plata, ¡°sino que el tiempo que est¨¦n juntos sean a?os de felicidad¡±, puntualiza el psic¨®logo. Como los que dicen haber vivido Asunci¨®n Jim¨¦nez y Gaudencio Salcedo desde 1954, cuando contrajeron matrimonio y se prometieron amor eterno. Tan seguros est¨¢n de lo que hicieron, que ambos coinciden al afirmar que volver¨ªan a pasar por la vicar¨ªa. ¡°No lo dudar¨ªa ni un instante ¡ªasegura Asunci¨®n¡ª. Ahora, me siento m¨¢s enamorada y convencida que entonces¡±. Aunque ha habido ¨¦pocas duras, ¡°con di¨¢logo y?comprensi¨®n se sale adelante¡±, asevera Gaudencio.
¡°Amar es hacer el amor con tu mejor amigo¡±
Riso, autor de libros como Enam¨®rate de m¨ª, ?Amar o depender? o Enamorados o esclavizados, defiende que para que una pareja sea feliz y s¨®lida hay tres conceptos que han de estar siempre presentes. As¨ª, Eros, Filia y ?gape, es decir, el deseo, la amistad y la ternura, se convierten para Riso en la base sobre la que se asienta una relaci¨®n de pareja con posibilidades de ser duradera. O, como ¨¦l mismo sintetiza: ¡°Amar es hacer el amor con tu mejor amigo¡±. Lo cierto es que uno puede desear estar junto a la persona amada durante toda la vida, ¡°pero no se puede prometer lo que no est¨¢ en nuestras manos¡±, advierte Riso. Es f¨¢cil asegurar amor eterno cuando estamos inmersos en pleno proceso de enamoramiento. ?Pero qu¨¦ ocurre cuando la vor¨¢gine de las primeras semanas se templa? Gaudencio reconoce que ahora se siente m¨¢s enamorado que al principio: ¡°Creo que el paso del tiempo ha hecho que me sienta m¨¢s seguro de estar con la persona adecuada¡±. "Durante el primer a?o de relaci¨®n, vemos en la otra persona solo aquellas cosas que nos ayudan a justificar el hecho de volvernos locos por ella¡±, explica la psic¨®loga y coach Eva Hidalgo.
Y despu¨¦s de la pasi¨®n, ?qu¨¦?
Lo habitual es que tras unos meses de ¡°locura transitoria¡±, bajemos las pulsaciones, el enamoramiento se relaje y d¨¦ paso a ¡°unos a?os de crecimiento como pareja y de sentimiento de pertenencia a un proyecto de vida en com¨²n, nuestro v¨ªnculo afectivo se vuelva m¨¢s fuerte y el deseo sexual nos acompa?e, aunque en algunos casos suele ser de una manera menos impetuosa¡±, explica Hidalgo. Descripci¨®n que comparte ?ngeles Mart¨ªnez, quien hace 35 a?os dio el s¨ª quiero a Francisco Torres en l¡¯Hospitalet de Llobregat (Barcelona). Despu¨¦s de superar algunos baches econ¨®micos y varios de salud, aseguran quererse m¨¢s ahora que cuando ten¨ªan 20 a?os.
Lo?importante no es que un matrimonio celebre las bodas de oro o de plata, sino que el tiempo que est¨¦n juntos sean a?os de felicidad¡± (Walter Riso, psic¨®logo y escritor)
Esta afirmaci¨®n resulta bastante habitual escucharla entre las parejas que han cumplido las bodas de plata. ¡°Llegar a celebrar 25 a?os de matrimonio es todo un ¨¦xito que radica en saber superar los problemas juntos, con tolerancia y cari?o¡±, explica Eva Sell¨¦s, psic¨®loga en la agencia matrimonial ?lter Ego (Madrid). ¡°Una pareja no dura porque no tenga problemas, sino porque sabe c¨®mo resolverlos. Basta con que acepten sus diferencias y que se amen a pesar de ellas¡±, concluye Sell¨¦s. As¨ª lo corrobora Asunci¨®n Jim¨¦nez, quien asegura que, a pesar de las dificultades, ¡°no cambiar¨ªa ni un ¨¢pice¡± lo acontecido a lo largo de su matrimonio.
?Fieles para siempre?
La infidelidad en Espa?a "goza de buena salud". Al menos, as¨ª se desprende de los datos aportados por AshleyMadison.com, web dedicada a ayudar a hombres y mujeres casados a tener una aventura de forma discreta. Seg¨²n la agencia, entre el 60 y el 70% de los espa?oles han sido infieles a su pareja al menos una vez en la vida. ?Y qu¨¦ ocurre cuando se descubre 'el pastel'? ?Lo superamos, rompemos, perdonamos, olvidamos¡?
"Para unos, la infidelidad sexual es un obst¨¢culo que pone en jaque la relaci¨®n. Para otros, es una se?al que los alerta sobre el estado no ¨®ptimo de la misma", afirma la psic¨®loga Eva Hidalgo, quien parte de la premisa de que una infidelidad es una rotura de las reglas preestablecidas por la pareja y produce "una p¨¦rdida de la confianza en el otro". Adem¨¢s, la experta cree importante distinguir entre lo que se conoce como "echar una canita al aire", que responde a un impulso sexual, y el hecho de mantener dos relaciones paralelas. "En este segundo caso, la sensaci¨®n de enga?o aumenta, ya que la pareja lo percibe como un fraude en la construcci¨®n de su proyecto de vida en com¨²n", explica Hidalgo.
En el primer tipo de infidelidad, "el ad¨²ltero no se involucra tanto afectivamente ¡ªapunta el psic¨®logo Walter Riso¡ª, por lo que es m¨¢s f¨¢cil de perdonar que cuando hablamos de una relaci¨®n paralela". En cualquier caso, cuando la infidelidad es descubierta, bien por descuido, confesi¨®n o por el favor de un buen amigo que informa de lo ocurrido, Eva Hidalgo piensa que "es posible aceptar la situaci¨®n y salir airoso. Incluso, en casos muy puntuales, podr¨ªa provocar un cambio en la relaci¨®n que la haga mejorar y fortalecerse". Walter Riso corrobora esa excepcionalidad: "En 30 a?os solo me he encontrado un caso en el que una infidelidad reforzara una relaci¨®n".
Aunque pensemos que no hay obst¨¢culo que no seamos capaces de superar si estamos enamorados, seg¨²n el psic¨®logo Walter Riso, el amor no es suficiente. "Y, adem¨¢s, no siempre significa realizaci¨®n. Hay cosas m¨¢s importantes, como la dignidad personal. Cuando uno de los miembros de la pareja comienza a negociar con sus principios de vida, la relaci¨®n entra en un proceso de deterioro¡±, advierte. ¡°Por eso es imprescindible que ambos desarrollen un individualismo responsable donde cada uno tenga su propio espacio. Las parejas superpuestas no funcionan, pero las extremadamente independientes, tampoco. Muchas parejas se creen as¨ª y, en realidad, son indiferentes¡±, sostiene. ¡°Que el otro te resulte transparente, que no te importe lo que piense, que su dolor no sea el tuyo... Eso es lo que destruye un matrimonio¡±, concluye el psic¨®logo.
Y la indiferencia no es la ¨²nica amenaza que identifica Riso, tambi¨¦n la falta de respeto, la ausencia de ternura o la incapacidad para comunicar nuestros sentimientos pueden minar una relaci¨®n. Por su parte, Enrique Orqu¨ªn, p¨¢rroco en San Isidro de Benag¨¦ber (Valencia) y director de la Escuela de Novios Galilea, no duda en se?alar la inmadurez y el miedo a la soledad como dos de los escollos que una pareja debe salvar. ¡°He visto c¨®mo muchos hombres y mujeres se conforman con las migajas de una relaci¨®n antes que estar solos¡±, asegura el sacerdote. Y ah¨ª no acaba la cosa, ¡°el estr¨¦s diario y, sobre todo, la rutina tambi¨¦n contribuyen a ponernos las cosas dif¨ªciles en esto del amor¡±, a?ade la psic¨®loga Eva Sell¨¦s.
Afortunadamente, frente a este tropel de amenazas, los expertos se?alan otras tantas herramientas que nos ayudan a salir a flote cuando los problemas llegan. Como el mantenimiento de una confianza f¨¦rrea en el otro, el deseo y las ganas de pasar tiempo con tu pareja, o como dir¨ªa Riso, ¡°ver a tu pareja como si fuera tu postre favorito¡±. Tambi¨¦n Orqu¨ªn aporta algunos recursos frente al desamor, como expresar en voz alta nuestros sentimientos o romper la rutina diaria con peque?as ¡°locuras¡± para re¨ªr juntos.
Y es que el sentido del humor es una pieza imprescindible en este engranaje. Re¨ªrse de las mismas cosas es una especie de instrumento de medici¨®n que nos revela el grado de afinidad que tiene una pareja. Con esta claridad lo expresa Riso: ¡°Si tienes que explicarle el chiste a tu pareja, ser¨¢ mejor que vayas buscando un abogado¡±.
Parece, por tanto, que el amor es solo un ingrediente m¨¢s en la misteriosa f¨®rmula que mantiene unidas a las parejas, y que el erotismo, la amistad, la ternura y el sentido del humor son claves para que esa uni¨®n, adem¨¢s de larga, sea feliz.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.