Descubierta una sexta ¡®letra gen¨¦tica¡¯ en c¨¦lulas de animales y plantas
En bacterias la metil-adenina marca el ADN propio para defenderlo en caso de infecciones
El alfabeto clave de la vida, los nucle¨®tidos adenina (A), citosina (C), guanina (G) y timina (T) no son las ¨²nicas letras en la naturaleza. De sobra es conocido la existencia del uracilo (U) en las cadenas de ARN (la copia que sale del n¨²cleo celular del ADN). Pero un reciente descubrimiento, seg¨²n explican Holger Heyn y Manel Esteller, del Institut d¡¯Investigaci¨® Biom¨¨dica de Bellvitge (Idibell), ha a?adido otro car¨¢cter a este abecedario. Sumado a otra letra minoritaria descubierta en los ochenta, eso eleva a seis las bases en c¨¦lulas eucariotas (las que forman los animales y plantas superiores, humanos incluidos).
Las dos nuevas letras son la metil-citosina y la ¨²ltima encontrada, la metil-adenina. Su hallazgo en algas, moscas (la famosa del vinagre, Drosophila melanogaster) y gusanos (el no menos conocido en el mundo de la gen¨¦tica Caenorhabditis elegans) es el primero en estos seres ya superiores -aunque a¨²n no se haya encontrado en mam¨ªferos, explica Esteller-. El comentario del investigador y los hallazgos se publican en cuatro art¨ªculos en Cell.
La metilaci¨®n de las bases es un proceso vital en la biolog¨ªa molecular. Ese paso, la uni¨®n de un grupo metilo CH3- a las bases, act¨²a como una se?al para activar y desactivar genes (lo que se denomina epigen¨¦tica), pero Esteller explica que en este caso no se tata de una marca temporal. "La metil-ciste¨ªna es muy estable, se transmite a la descendencia y est¨¢ relacionada con la diferenciaci¨®n sexual y la configuraci¨®n del cerebro", dice el investigador. Tambi¨¦n intervienen en la diferenciaci¨®n celular, que hace que una se convierta en coraz¨®n o en ves¨ªcula, por ejemplo".Este car¨¢cter de estabilidad y transmisibilidad es fundamental para considerarlo una letra gen¨¦tica aparte, y no solo una variedad de las ya conocidas.
La nueva base no ha sido encontrada -a¨²n- en mam¨ªferos
La nueva descubierta, la metil-adenina, "ya existe en bacterias, donde las defiende contra los virus. De alguna manera diferencia el ADN propio del ajeno", dice Esteller. Con ello se sabe d¨®nde dirigir las defensas. En las especies donde se ha descubierto, "actuar¨ªa para regular la expresi¨®n de determinados genes, constituyendo por tanto una nueva marca epigen¨¦tica", explica.
El hallazgo se ha debido al uso de t¨¦cnicas "de gran sensibilidad debido a que los niveles de mA en los genomas descritos son bajos". Adem¨¢s,? parece ser que la metil-adenina "tendr¨ªa un papel espec¨ªfico en las c¨¦lulas madre y en etapas tempranas del desarrollo", afirma.
El reto ahora es intentar encontrarla en mam¨ªferos, y ver qu¨¦ papel desempe?ar¨ªa.
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