La valiente foto de una madre que muestra la pesadilla que puede llegar a ser amamantar a un beb¨¦

Motivos para amamantar, hay muchos. La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) recomienda hacerlo de forma exclusiva con los ni?os hasta los 6 meses de vida, con beneficios para la salud del beb¨¦ y la propia madre. Adem¨¢s, genera estampas id¨ªlicas, que las f¨¦minas comparten en redes sociales, burlando incluso la censura del pez¨®n femenino: mujeres sonrientes que sostienen al ni?o en brazos, con mucha ternura y buena luz de fondo. Millones de likes.

Por eso, en esta ocasi¨®n, la imagen subida a Facebook es tan desconcertante: la brit¨¢nica Jessica Martin-Weber, madre de seis hijos y fundadora del grupo de apoyo para el amamantamiento The Leaky Boob, ha roto el molde al publicar la siguiente fotograf¨ªa en el perfil de su grupo:

¡°Tener hijos no siempre conlleva la felicidad absoluta. Esta foto no representa un momento sagrado y especial, sino mi lucha por sobrevivir¡±, escrib¨ªa Weber, que padece mastitis, una inflamaci¨®n de las gl¨¢ndulas mamarias que afecta al 10% de la poblaci¨®n lactante. Esta condici¨®n m¨¦dica puede producirse por una infecci¨®n bacteriana, la falta de higiene o el estr¨¦s, entre otros motivos detallados por la OMS. Adicionalmente, la presencia de grietas en los pezones, el uso de antibi¨®ticos orales, el padecimiento de la enfermedad en circunstancias previas y las infecciones de garganta son algunos de los factores relacionados con un incremento del riesgo de desarrollarla, seg¨²n un estudio realizado por la Universidad Complutense de Madrid. Las consecuencias: fuertes dolores durante el proceso de amamantamiento. Por ello, las mujeres que sufren este mal ¡°infravalorado¡±, seg¨²n un art¨ªculo publicado en el 2009 por Acta Pedi¨¢trica Espa?ola, ¡°suelen tener que enfrentarse a un dif¨ªcil dilema: seguir alimentando a su hijo aguantando el dolor o abandonar la lactancia¡±.

¡°Dar el pecho puede resultarle f¨¢cil a algunas, pero no siempre es una experiencia positiva - y no pasa nada¡±, escrib¨ªa Weber: ¡°Hay quienes aprender¨¢n a hacerlo aunque no les salga inmediatamente. Pero hay madres que toman la decisi¨®n de no intentarlo, ya sea por motivos m¨¦dicos o por decisi¨®n propia¡±. Con estas palabras, la brit¨¢nica resalta, en este post que se ha hecho viral, que, a pesar de los m¨²ltiples beneficios de la lactancia, no siempre es la decisi¨®n correcta para todas. En su caso, era tal el sufrimiento, que asegur¨® haber querido ¡°arrancarse los senos¡±, estando ¡°segura de que mor¨ªa¡± a causa de las n¨¢useas y la fiebre. Finalmente, encontr¨® una posici¨®n que le ayudaba a mitigar el dolor. Y no dud¨® en compartirla en las redes.

Desafortunadamente, seg¨²n la pediatra Luc¨ªa Gal¨¢n Bertrand, autora del libro Luc¨ªa, mi pediatra. Lo mejor de nuestras vidas (Editorial Planeta), muchas mujeres temen ser tachadas de ¡°malas madres¡± por renunciar al amamantamiento.¡°Cualquier decisi¨®n tomada por una madre desde el conocimiento y la madurez merece mi m¨¢s absoluto respeto¡±, explica la experta en su libro: ¡°Si decides no dar el pecho habr¨¢ quienes te se?alar¨¢n con el dedo. Si, por el contrario, le das el pecho y tu pediatra te aconseja darle una ayuda y no se la das, de nuevo sobrar¨¢n los dedos que te apunten. Si lo intentas, pero finalmente no lo consigues, o no cumple tus expectativas y decides abandonar la lactancia, un vez m¨¢s te sentir¨¢s criticada y 'atacada'. ?En qu¨¦ quedamos? ?A qu¨¦ juzgamos? ?Por qu¨¦ juzgamos? ?Para qu¨¦ juzgamos? La madre es libre de elegir el tipo de alimentaci¨®n que quiere dar a su hijo. Como es libre de decidir la escuela a la que lo inscribir¨¢, o si le quiere contar un cuento por las noches o bailarle una sardana. ?Por qu¨¦ tanto inter¨¦s en criticar, culpabilizar y criminalizar a las madres?¡±, se pregunta la autora. Y concluye, tajante: ¡°Para que las cosas funcionen, la mam¨¢ tiene que estar bien. Y esto pasa por que ella se sienta libre de tomar sus propias decisiones y la gente que la rodee la apoye casi de manera incondicional, sobre todo en las primeras semanas, en que, como ya hemos visto, a veces el camino se hace cuesta arriba. Los profesionales estamos para ayudar, asesorar y dar informaci¨®n cuando las familias nos lo solicitan; nunca para criticar, juzgar, ni culpabilizar¡±.