Ana Bernal-Trivi?o, en ¡®prime time¡¯ contra la violencia machista
La acad¨¦mica y periodista esclarece los resortes m¨¢s complejos del maltrato a las mujeres en los programas sobre el documental de Roc¨ªo Carrasco.
Ana Bernal-Trivi?o no le hab¨ªa contado a casi nadie que esa noche estar¨ªa ella tambi¨¦n en el plat¨®. Le dio varias vueltas antes de decidirse. Le preocupaban las cr¨ªticas, que no se entendiera su participaci¨®n. Al final pes¨® m¨¢s llegar a las v¨ªctimas. ¡°Nos quejamos siempre de que no van expertas a los programas ?y cuando hay oportunidad nos ponemos exquisitas? Con el negacionismo que est¨¢ sembrando la ultraderecha, no quer¨ªa perder esa ventana¡±, explica. As¨ª que se encendieron las luces y all¨ª estaba ella, con su chaqueta morada y su inseparable cuaderno de notas. El domingo 28 de marzo debut¨® en el segundo cap¨ªtulo del documental de Telecinco Roc¨ªo, contar la verdad para seguir viva, un aut¨¦ntico bombazo televisivo dirigido por Ana Isabel Peces en el que Roc¨ªo Carrasco, famosa desde que naci¨®, narra ante las c¨¢maras el maltrato psicol¨®gico al que asegura que le ha sometido su exmarido durante 20 a?os. Bernal-Trivi?o participa cada semana en el programa para esclarecer los resortes m¨¢s complejos de la violencia machista, un enorme problema estructural que suma 1.087 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en Espa?a desde 2003.
La conductora de la tertulia, Carlota Corredera, da paso a esta especialista para que explique en horario de m¨¢xima audiencia los mecanismos psicol¨®gicos que operan en el sibilino maltrato denominado luz de gas, la violencia vicaria contra los hijos, las razones de que las mujeres tarden a?os en denunciar, la incomprensi¨®n que reciben de la sociedad¡ La tertuliana Bel¨¦n Esteban admiti¨® que se hab¨ªa equivocado al juzgar a Roc¨ªo Carrasco como una mala madre y confes¨® que ahora s¨ª la cree. ¡°?T¨² sabes el impacto de esa declaraci¨®n? Llega mucho m¨¢s que si lo decimos cualquiera de las que llevamos a?os en el movimiento feminista. Las mujeres que sufren maltrato no siempre van a conferencias¡±, reflexiona Bernal-Trivi?o un mi¨¦rcoles a la hora de comer, sentada en la terraza desierta de un hotel de las afueras de Madrid donde come despacito la ensalada de tomate con ventresca del men¨². Esa noche volver¨¢ a repetir en la tertulia del documental y participar¨¢ al d¨ªa siguiente en el programa de variedades S¨¢lvame, siempre como una voz de autoridad.
Es profesora de varias asignaturas de comunicaci¨®n en la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) desde 2013 y colabora desde 2018 en el programa de las ma?anas de TVE. Confiesa que se ha sentido m¨¢s escuchada por los tertulianos de S¨¢lvame que por algunos de los colegas con los que coincide en la primera cadena: ¡°Quieren aprender, es algo que no siempre te encuentras¡±.
Vive sorprendida esta explosi¨®n de fama tras un arranque dif¨ªcil en la profesi¨®n y casi dos d¨¦cadas trabajando. Hace poco, una mujer la reconoci¨® en el Corte Ingl¨¦s. ¡°Bienvenida a M¨¢laga, te va a encantar¡±, le dijo. ¡°?Pero si soy de aqu¨ª!¡±, respondi¨® ella.
Naci¨® en M¨¢laga y all¨ª pasa ahora la mayor¨ªa del tiempo, pendiente de Mari Tere, su madre, que est¨¢ delicada de salud. Se emociona: ¡°?Qu¨¦ quieres que te diga de Mari Tere? Lo ha sido todo. Confi¨® en m¨ª cuando no confiaba ni yo¡±. Su madre renunci¨® a su sue?o de ser telefonista para ejercer de ama de casa y cuidar de Manuel, su marido, y de sus tres hijas: Irene, Eva y Ana.
La periodista habla con pasi¨®n de sus hermanas, a las que est¨¢ muy unida, y de las dos grandes mujeres de su vida que le dejaron un legado feminista sin apenas reparar en ello. A ellas, a su madre y a su t¨ªa Mari, les dedic¨® uno de sus libros, No manipul¨¦is el feminismo, el ensayo en el que desmonta bulos machistas. Mari, ¡°la tita soltera guay¡± era moderna ya en los 80: ten¨ªa coche, sab¨ªa usar el ordenador, disfrutaba de los viajes y el teatro y hac¨ªa yoga. Ella le regal¨® el libro que tiene m¨¢s subrayado, al que siempre vuelve: La casa de Bernarda Alba.
Con apenas d¨ªas de diferencia, en 2014, le detectaron un c¨¢ncer a su madre y una hemorragia interna a su t¨ªa. Las operaron a la vez en dos hospitales malague?os. Su madre se recuper¨® aunque requiere cuidados. Su t¨ªa muri¨®. A Ana le duelen todas las conversaciones que nunca tendr¨¢n y aprendi¨® entonces que la vida es corta y hay que exprimirla.
Recuerda una infancia de clase media y una situaci¨®n econ¨®mica delicada que empez¨® en su adolescencia, en la d¨¦cada de los 90. La familia estuvo a punto varias veces de perder su casa y quedarse en la calle. No hab¨ªa dinero para caprichos: ni cine ni paga semanal. Pudo ver con sus hermanas el estreno de pel¨ªcula Notting Hill, de Julia Roberts y Hugh Grant, porque les regalaron las entradas en un supermercado.
Estudi¨® siempre con becas. Curs¨® periodismo gracias a que en M¨¢laga era una carrera de la Universidad p¨²blica. No pudo ir a Salamanca, tambi¨¦n becada, porque hab¨ªa que echar una mano en casa. Las hermanas siempre han arrimado el hombro. Su primer trabajo le reportaba 440 euros al mes. Era un puesto en una televisi¨®n de M¨¢laga. No ten¨ªan coche para ir a cubrir los temas. Le sali¨® una hernia discal de cargar la c¨¢mara de un sitio a otro. Lo mismo cog¨ªa los bultos que la mandaban a fregar vasos o a poner agua a los invitados en el plat¨®, mientras le dec¨ªan que no val¨ªa para la profesi¨®n: ¡°Fue un mobbing de caballo¡±.
Despu¨¦s investig¨® dos a?os en la Universidad de M¨¢laga y, cuando cerraron el grupo de investigaci¨®n, estuvo varios a?os entrando y saliendo de las listas del paro. Fue un gran aprendizaje aunque hubiera preferido ahorr¨¢rselo: ¡°Mi madre me dice que se me han empeque?ecido los ojos de tanto llorar¡±. Siguieron algunas colaboraciones, art¨ªculos aqu¨ª y all¨¢ hasta que le abrieron la puerta en el diario P¨²blico y la llamaron para una suplencia en la UOC, donde est¨¢ fija desde 2017.
Con 40 a?os ha conseguido lo que nunca esper¨® con 20: ¡°Estoy fuerte y s¨¦ c¨®mo disfrutar de la vida¡±. Ha recibido ocho premios distintos por su trayectoria, entre ellos el reconocimiento a su labor en comunicaci¨®n del Ministerio de Igualdad. Algunos de los mejores momentos est¨¢n ordenados en un libro de fotos a color: Bernal-Trivi?o en la firma de su libro, recogiendo un premio, en un plat¨®, en la universidad, sonriente junto a sus hermanas y su madre¡ Lo encuadern¨® su padre y lo titul¨® como un mensaje para conjurar el pasado: Dec¨ªan que no val¨ªa.
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