Seducir a la patronal sin tocar la coalici¨®n

La crisis del coronavirus es tan inabordable que el Gobierno necesita sumar aliados. Est¨¢ casi descartado que el PP est¨¦ entre ellos, pero el Ejecutivo cree que a¨²n hay una oportunidad con los empresarios, claves para la reconstrucci¨®n. El Gobierno, que ha hecho bandera de su idea de los nuevos Pactos de la Moncloa, conf¨ªa en poder hacer grandes acuerdos con patronal y sindicatos, en la l¨ªnea del aumento del salario m¨ªnimo pactado en enero.

Con matices, empresarios y centrales parecen dispuestos. Sin embargo, ante el rece...

La crisis del coronavirus es tan inabordable que el Gobierno necesita sumar aliados. Est¨¢ casi descartado que el PP est¨¦ entre ellos, pero el Ejecutivo cree que a¨²n hay una oportunidad con los empresarios, claves para la reconstrucci¨®n. El Gobierno, que ha hecho bandera de su idea de los nuevos Pactos de la Moncloa, conf¨ªa en poder hacer grandes acuerdos con patronal y sindicatos, en la l¨ªnea del aumento del salario m¨ªnimo pactado en enero.

Con matices, empresarios y centrales parecen dispuestos. Sin embargo, ante el recelo que trasladan algunos sectores econ¨®micos hacia Unidas Podemos, el Ejecutivo ha lanzado en p¨²blico, pero sobre todo en privado, un mensaje claro: la coalici¨®n va a seguir y cualquier acuerdo deber¨¢ partir del respeto al Gobierno formado tras la investidura de Pedro S¨¢nchez en enero. El Ejecutivo trata de abortar as¨ª los movimientos que buscan que un gran acuerdo PSOE-PP sustituya a la actual coalici¨®n con Pablo Iglesias, algo que en La Moncloa ven inviable.¡°A los empresarios les molesta la presencia de Podemos en [el ministerio de] Trabajo. Pero est¨¢n buscando la interlocuci¨®n con el Gobierno. Su actitud no tiene nada que ver con la del PP. Pero s¨ª, algunos presionan para que Podemos salga del Gobierno. No va a pasar. No hay alternativa. Cualquier acuerdo tiene que partir del reconocimiento del Gobierno. En los Pactos de la Moncloa nadie cuestion¨® al Ejecutivo, y de hecho no se cambi¨®¡±, recuerda un ministro.

El Ejecutivo busca seducir a los empresarios, porque cree que es clave que ellos, con los sindicatos, entren a un gran acuerdo. Eso podr¨ªa empujar al PP, aunque ahora parece imposible. Los ministros evitan cualquier cr¨ªtica al empresariado y los contactos son constantes y fluidos para preparar el ambiente para ese intento de acuerdo. El propio Iglesias tambi¨¦n ha hecho esta semana una ronda con varios dirigentes de las principales empresas del pa¨ªs. Aunque lo que empez¨® bien, acab¨® en un choque entre el l¨ªder de Unidas Podemos y la patronal. El vicepresidente segundo apunt¨® en un comunicado a un posible respaldo de la CEOE a la renta m¨ªnima. La respuesta fue virulenta: la patronal no asisti¨® a una cita al d¨ªa siguiente en el Ministerio de Trabajo.

La patronal transmite mucho des¨¢nimo con la batalla pol¨ªtica y la incapacidad de PSOE y PP de llegar a acuerdos. Los l¨ªderes de la CEOE y de los sindicatos hablan pr¨¢cticamente a diario en esta crisis, y no entienden por qu¨¦ no lo hacen tambi¨¦n el presidente y el jefe de la oposici¨®n.

Pese al ¨²ltimo choque con Iglesias, la CEOE s¨ª acudir¨¢ a la cita para unos nuevos Pactos de la Moncloa cuando la convoque S¨¢nchez, y estar¨ªa encantada si cuajara este gran acuerdo, se?alan fuentes de la patronal.

Mientras, los sindicatos ya se preparan para meses de intensa negociaci¨®n a fin de reconstruir la econom¨ªa del pa¨ªs. En ese tiempo, los empresarios querr¨¢n que el Gobierno se olvide de promesas centrales, como el retoque a la reforma laboral o la nueva fiscalidad, que precisamente estaba pensada para recaudar m¨¢s de las grandes compa?¨ªas. ¡°La posici¨®n de los empresarios en asuntos de fiscalidad es insostenible en Espa?a. No pueden seguir pidiendo bajadas de impuestos con el aumento de gasto brutal que viene. ?C¨®mo se va a financiar?¡±, se?ala un sindicalista.

En el Gobierno, enfrascado en la emergencia de cada d¨ªa, a¨²n no tienen claro qu¨¦ pasar¨¢ con todos estos debates, incluido el de los impuestos, pero s¨ª insisten en que har¨¢ falta mucho consenso, de ah¨ª que empresarios y sindicatos vayan a ser fundamentales. Por eso, fuentes del Ejecutivo descartan que el debate arranque con una subida de impuestos. Antes habr¨¢ que replantearse el modelo econ¨®mico para reconstruir el pa¨ªs.

Una ministra socialista se sorprende de la virulencia de los ataques contra Iglesias en algunos sectores. ¡°Han cogido el tuit de Iglesias con el art¨ªculo de la Constituci¨®n que dice que toda la riqueza estar¨¢ subordinada al inter¨¦s general y ahora dicen que vamos a nacionalizar la industria. No s¨¦ por qu¨¦ pone ese tuit, la verdad, pero es absurdo, nadie est¨¢ en nacionalizaciones, eso lo sabe el PP y todo el que est¨¢ en esto. Patronal y sindicatos quieren un acuerdo, pero hay mucho ruido pol¨ªtico¡±, se molesta.

Lo que tienen claro todos los consultados es que la situaci¨®n es muy diferente a la de 1977. No solo la pol¨ªtica, con una democracia consolidada sin ruido de sables. Tambi¨¦n la econ¨®mica. ¡°Los Pactos de la Moncloa de 1977 supusieron un ajuste muy fuerte. Es exactamente lo contrario de lo que hay que hacer ahora, que es una gran inyecci¨®n de dinero p¨²blico, pol¨ªticas expansivas¡±, se?ala un veterano pol¨ªtico que particip¨® en aquel proceso.

Mientras el Gobierno busca seducir al empresariado, con el PP no parece haber acercamiento posible. Las ¨²ltimas encuestas se?alan que el Ejecutivo est¨¢ sufriendo un gran desgaste, pero los populares no se benefician de ese deterioro. Aunque Casado aparenta jugar a m¨¢s largo plazo, como Mariano Rajoy en 2010. Dirigentes del PP se?alan que su l¨ªder asume que la crisis econ¨®mica ser¨¢ devastadora para Pedro S¨¢nchez como lo fue para Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero.

Las relaciones son muy malas ¡ªsolo ha habido una conversaci¨®n de menos de 10 minutos entre S¨¢nchez y Casado en tres semanas¡ª, pero varios ministros creen que el l¨ªder del PP deber¨ªa entender que su estrategia favorece al partido de Santiago Abascal. ¡°Vox se erige como la alternativa, en este caldo de cultivo hay que tener mucho cuidado. El PP deber¨ªa buscar un acuerdo para dejarles aislados¡±, se?ala uno de ellos. ¡°Si pol¨ªticamente esto se perturba mucho, la batalla va a ser con el populismo fascista, no con el PP. Basta ver lo que est¨¢ pasando estos d¨ªas en las redes. Pero el PP sabe que no va a conseguir gobernar sin Vox. Ese es el problema que tiene¡±, a?ade otro ministro.

Los populares sostienen, por su parte, que S¨¢nchez en realidad no quiere ning¨²n acuerdo, y como prueba ofrecen el discurso de la portavoz parlamentaria socialista, Adriana Lastra, el pasado jueves en el Congreso. La pol¨ªtica sigue donde siempre, pero el Gobierno busca otras opciones para el gran pacto.

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