La pasi¨®n automovil¨ªstica de Manolo acab¨® con el sue?o ferroviario de Alexander
El anciano conductor de un veh¨ªculo y el maquinista en pr¨¢cticas murieron en el accidente del Alvia en Zamora
El viento mece un oc¨¦ano de espigas, una estampa habitual en un junio zamorano si no fuera porque a unos metros hay un tren descarrilado. Los guardarra¨ªles del viejo puente elevado sobre la v¨ªa han sido golpeados en su lado izquierdo, seg¨²n se viene de Zamora hacia Palacios del Pan (270 habitantes). Desde la capital de la provincia parti¨® Manolo, pero no lleg¨® al pueblo. Su viejo Land Rover, una de sus pasiones, cay¨® sobre los ra¨ªles, ...
El viento mece un oc¨¦ano de espigas, una estampa habitual en un junio zamorano si no fuera porque a unos metros hay un tren descarrilado. Los guardarra¨ªles del viejo puente elevado sobre la v¨ªa han sido golpeados en su lado izquierdo, seg¨²n se viene de Zamora hacia Palacios del Pan (270 habitantes). Desde la capital de la provincia parti¨® Manolo, pero no lleg¨® al pueblo. Su viejo Land Rover, una de sus pasiones, cay¨® sobre los ra¨ªles, la locomotora de un tren Alvia impact¨® con ¨¦l y tambi¨¦n falleci¨® Alexander de 32 a?os, que hac¨ªa pr¨¢cticas como maquinista.
Las vidas y las muertes de Manolo Prieto, de 88 a?os y vecino de Palacios del Pan, y Alexander Pedreita, coru?¨¦s que aprend¨ªa el oficio en la locomotora que parti¨® de Ferrol rumbo a Madrid, colisionaron en este punto a 20 minutos de Zamora. Otro maquinista y algunos pasajeros resultaron heridos, pero se recuperan favorablemente. Este tramo de v¨ªa, a la altura de La Hiniesta, se encuentra en obras para adecuarlo a un futuro AVE. El puente que lo sobrevuela, seg¨²n la alcaldesa de Palacios, Lidia Pechero, acumula accidentes. No les ha sorprendido especialmente la desgracia, pero s¨ª que la protagonizara ese anciano que conduc¨ªa muy despacio ese Land Rover de casi 50 a?os, un coche hist¨®rico que Manolo rechaz¨® vender pese a tener ofertas.
Manolo viv¨ªa con una de sus dos hijas, que padece una discapacidad intelectual, en una casa a la entrada de la localidad. Florentino Fern¨¢ndez, que pasea con un transistor en el bolsillo de la camisa, asegura que el anciano ¡°estaba perfectamente¡± e ¡°iba y ven¨ªa¡± con su amado coche. Fern¨¢ndez a?ade que le hab¨ªan recomendado que dejara de conducir, que ya ten¨ªa una edad.
La alcaldesa explica que ¡°era una bell¨ªsima persona¡± que ejerc¨ªa de monaguillo en la iglesia ante la ausencia de j¨®venes. Este viudo, destaca Pechero, ¡°era prudente y se val¨ªa por s¨ª solo¡±. Los motivos del accidente, que se est¨¢n investigando, le resultan una inc¨®gnita. La regidora recuerda que en el punto del siniestro ya se cay¨® un tractor hace a?os.
Las costumbres fijas de Manolo, apunta Nerea Bueno, oriunda del pueblo, les hace pensar que el veh¨ªculo estuvo m¨¢s de una hora sobre los ra¨ªles antes del impacto. Varios vecinos aseguran que vieron las protecciones de la calzada abolladas, pero no imaginaron que alguien se hubiese precipitado sobre las v¨ªas. Bueno destaca que el anciano sol¨ªa ir a Zamora los martes temprano y que vio el coche aparcado en el barrio zamorano donde ella reside y adonde Prieto sol¨ªa acudir; a las dos de la tarde ya no estaba all¨ª. Lo normal. El hombre, seg¨²n sus rutinas, regresar¨ªa a Palacios del Pan. Nadie supo de ¨¦l ¡ªdeber¨ªa haber llegado a casa antes de las tres de la tarde¡ª hasta que a las 16.11 un Alvia se estrell¨® contra su Land Rover y seg¨® el sue?o de Alexander Pedreira, que aspiraba a trabajar en Renfe. Como su padre.