Gonzalo Caballero, el sobrino d¨ªscolo que encontr¨® la led al final del t¨²nel
El candidato socialista a la Xunta hered¨® el gen pol¨ªtico de su t¨ªo, el alcalde de Vigo. Pasaron a?os enfrentados pero han sellado la paz en la carrera por tratar de descabalgar a N¨²?ez Feij¨®o
Era un ni?o aplicado y en el colegio solo lo castigaron una vez, pero fue por mascar chicle en clase, a pesar de que ni entonces ni despu¨¦s lleg¨® a dominar el arte de hacer globos. Su madre quer¨ªa que aprendiera m¨²sica y lo apunt¨® en el conservatorio que se acababa de abrir en su pueblo. Sin embargo, el cr¨ªo pronto demostr¨® que la oratoria se le daba mejor que el piano. En su ADN pesaba el gen pol¨ªtico de su padre, Gonzalo Caballero ?lvarez, que hab¨ªa sido concejal en Ponteareas, la localidad cercana a Vigo de la que procede la familia; del hermano menor de este, el exministro socialista, alca...
Era un ni?o aplicado y en el colegio solo lo castigaron una vez, pero fue por mascar chicle en clase, a pesar de que ni entonces ni despu¨¦s lleg¨® a dominar el arte de hacer globos. Su madre quer¨ªa que aprendiera m¨²sica y lo apunt¨® en el conservatorio que se acababa de abrir en su pueblo. Sin embargo, el cr¨ªo pronto demostr¨® que la oratoria se le daba mejor que el piano. En su ADN pesaba el gen pol¨ªtico de su padre, Gonzalo Caballero ?lvarez, que hab¨ªa sido concejal en Ponteareas, la localidad cercana a Vigo de la que procede la familia; del hermano menor de este, el exministro socialista, alcalde vigu¨¦s y presidente de la FEMP Abel Caballero; y de un tatarabuelo de principios del XIX que lleg¨® a regidor de la ciudad. Gonzalo Caballero M¨ªguez (Ponteareas, 1975), candidato a la Xunta por el PSdeG, es el sobrino d¨ªscolo que un d¨ªa salt¨® del regazo de ese t¨ªo que hab¨ªa sido su referente y trat¨® de buscar su propio rumbo por rutas alternativas en las que nunca parec¨ªa llegar a buen puerto.
Durante 20 a?os atraves¨® las enrevesadas tuber¨ªas del partido sin el apoyo de su poderoso pariente hasta que a finales de 2017, despu¨¦s de encadenar derrotas, fue elegido secretario general del PSdeG con la misi¨®n de cerrar una etapa turbulenta. Ah¨ª, a la salida del t¨²nel, apareci¨® al fin el alcalde viral de Vigo, brillando con los nueve millones de luces led de su eterna Navidad y d¨¢ndole en p¨²blico la bendici¨®n que hasta entonces le hab¨ªa negado.
Se dice que el enfrentamiento pol¨ªtico entre ambos empez¨® a fraguarse ya en 1998, cuando el joven se signific¨® a favor de Josep Borrell en las primarias en las que se impuso a Joaqu¨ªn Almunia, apoyado por el t¨ªo. En 2017, la historia se repiti¨®, con un alcalde de Vigo que arropaba a Susana D¨ªaz como ¡°AVE de Andaluc¨ªa¡±, frente a un Gonzalo Caballero que se alineaba con Pedro S¨¢nchez, ese aspirante que para el regidor era un ¡°tren de vapor¡±.
En 2004, con 29 a?os, el sobrino retiraba su candidatura a la secretar¨ªa de la agrupaci¨®n socialista en Vigo y propiciaba la victoria de la lista del exalcalde Carlos Pr¨ªncipe, cr¨ªtico y ac¨¦rrimo enemigo de Abel Caballero que a?os despu¨¦s acab¨® expulsado del partido. Corr¨ªan a?os convulsos en el PSOE vigu¨¦s, que en 2003 hab¨ªa perdido la alcald¨ªa en una moci¨®n impulsada por el PP, despu¨¦s de que el BNG dejase de respaldar al regidor m¨¢s ef¨ªmero que tuvo la ciudad, el exjuez Ventura P¨¦rez Mari?o, impuesto por la c¨²pula socialista. P¨¦rez Mari?o aguant¨® como edil en la oposici¨®n hasta 2005, y al marchar ocupaba su plaza de concejal Gonzalo Caballero, en el ¨²nico cargo institucional que ha tenido hasta ahora. Despu¨¦s de 20 meses en el cargo, en 2007, con su t¨ªo como candidato en las municipales, el d¨ªscolo no fue llamado para revalidar ese puesto.
Ya entonces, el m¨¢s joven de la estirpe ten¨ªa su propia forma de ver las cosas y se labr¨® fama de rebelde, al margen del aparato del partido. En el PSOE local y gallego perdi¨® la jugada sucesivas veces, y al toparse con las fichas que mov¨ªa el hermano de su padre volv¨ªa a la casilla de salida y tiraba de nuevo el dado sin desmoralizarse. En todos los procesos org¨¢nicos se evidenci¨® su choque con Abel Caballero, erigido en bar¨®n socialista, como cuando quiso pugnar por el liderazgo del PSdeG frente al ourensano Pachi V¨¢zquez en 2009 y cuando prob¨® suerte en las primarias de 2016 para elegir el candidato a la Xunta, tambi¨¦n en una orilla opuesta a la del alcalde.
La espina auton¨®mica de Abel
Gonzalo Caballero era una piedra en el zapato de su t¨ªo. Todo el mundo lo sab¨ªa, y todo el mundo pudo asistir a la escenificaci¨®n de su paz despu¨¦s de que aquel muchacho alcanzase el primer puesto del socialismo gallego y se sacudiese por fin la sombra de ¡°sobrino de¡±. El objetivo, sobre todo para el m¨¢s veterano, que en su momento no logr¨® derribar al t¨®tem Fraga cuando fue candidato a la Xunta, es derrocar alg¨²n d¨ªa al heredero popular Alberto N¨²?ez Feij¨®o y trazar un poderoso eje entre Santiago, la capital auton¨®mica, y Vigo, la mayor ciudad de Galicia. Aunque las encuestas para esta nueva convocatoria tras el estado de alarma apuntalan la mayor¨ªa de Feij¨®o y sit¨²an al BNG a la altura del PSOE, Gonzalo Caballero se aferra a ese casi 30% de indecisos, asegura que no se pone ¡°l¨ªmites¡± y en las entrevistas mantiene el reto de ser ¡°primera fuerza¡±.
¡°Gonzalo es muy familiar¡±, comenta una persona muy pr¨®xima en el partido: ¡°Con Abel... estuvieron muy distanciados, pero creo que ahora el t¨ªo se ve reflejado en el sobrino, en lo que puede conseguir, e internamente debe de estar orgulloso y emocionado¡±. ¡°De cualquier forma, Gonzalo tiene su propio criterio y su manera de entender la pol¨ªtica, y eso no va a cambiar¡±, avisa el amigo.
El menor de los Caballero ten¨ªa cinco a?os cuando su pariente, procedente del PC, se integr¨® en las filas del PSOE. Ten¨ªa 10 cuando Abel Caballero se convirti¨® en ministro de Transportes y Turismo con Felipe Gonz¨¢lez. Diecinueve cuando se hizo militante y 23 cuando su mentor se present¨® a las elecciones auton¨®micas y acab¨® estrepitosamente derrotado por el Le¨®n de Vilalba. ¡°Aprend¨ª mucha pol¨ªtica de ¨¦l, en la proximidad y en la discrepancia¡±, admiti¨® el pariente m¨¢s joven cuando ambos enterraron el hacha de guerra ante las c¨¢maras en enero de 2018.
Eso ocurr¨ªa poco despu¨¦s de que el sobrino lograse al fin su primera victoria y fuese elegido secretario general de un PSdeG todav¨ªa descalabrado y sin l¨ªderes a la vista. En esas primarias conquist¨® la mayor¨ªa de los apoyos en todas las ciudades gallegas salvo en Vigo, la suya, donde la agrupaci¨®n local, en manos de Abel Caballero, respaldaba al otro aspirante, Juan D¨ªaz Villoslada, hoy concejal de Urbanismo en A Coru?a.
Un ¡°outsider¡± de la pol¨ªtica
Igual que pasa con Feij¨®o, en las semblanzas biogr¨¢ficas de Gonzalo Caballero nunca se deja de decir que de chico pasaba muchas horas entre libros, a la luz del flexo m¨¢s que bajo los rayos del sol. Abstemio, casado, padre de dos ni?os y mucho m¨¢s amigo de devorar ce?udos ensayos socioecon¨®micos que de practicar deportes, el actual candidato a la Xunta por el PSdeG fue el primero de su promoci¨®n en la carrera de Econ¨®micas y Empresariales y se doctor¨® en Econom¨ªa por la Universidad de Vigo y en Ciencia Pol¨ªtica por la de Santiago. Adem¨¢s de haber ejercido en varias universidades estadounidenses y europeas y de trabajar con premios Nobel como Douglass North, es profesor titular de Econom¨ªa Aplicada en la de Vigo y ha publicado una quincena de libros.
¡°No creo que haya muchos pol¨ªticos de los que la Wikipedia diga, como de Gonzalo, que son autores de referencia de algo. ?l lo es del nuevo institucionalismo en Espa?a. Est¨¢ claro que no es un pol¨ªtico al uso, sino un outsider¡± en ese mundo, describe el diputado Pablo Arang¨¹ena, vicesecretario general y portavoz del PSdeG. ¡°Durante a?os fue un militante destacado, pero sin cargos y con posiciones discrepantes, y contra todo pron¨®stico, sin ning¨²n apoyo oficial, lleg¨® a la secretar¨ªa¡±, resume.
¡°Es muy resistente, y est¨¢ entregado a este trabajo. No tiene vacaciones, ni fines de semana. Se marcha de la sede [en Santiago] a las 12 de la noche para irse a casa [en Vigo]... Lo vimos emocionarse dos veces por lo poco que ve a sus hijos peque?os¡±. Cuando llora, bromea: ¡°Me estoy pareciendo a Fraga¡±. Y en contra de lo que pueda aparentar su imagen de hombre estudioso, disciplinado y formal, el candidato socialista a la Xunta ¡°es muy fiestero¡±. ¡°Desde hace dos a?os ya no... pero era el t¨ªpico que cerraba los bares; algo portentoso en alguien que no bebe¡±, asegura Arang¨¹ena: ¡°Aunque es casi imposible que lo haga en p¨²blico, Gonzalo baila mejor que Iceta¡±.