La Fiscal¨ªa ve acreditado ¡°documentalmente¡± que Interior ocult¨® al juez el espionaje a B¨¢rcenas en ¨¦poca del PP
El jefe policial encargado de investigar la caja b asegura que nunca se le ¡°transmitieron¡± esos datos, pese a que los implicados aseguran que era una operaci¨®n legal
La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n ya considera acreditado ¡°documentalmente¡± que el Ministerio del Interior ocult¨® al juez el espionaje a Luis B¨¢rcenas. As¨ª consta en uno de los escritos enviados por el ministerio p¨²blico al magistrado Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n, fechado el pasado 27 de julio e incluido en el sumario de la Operaci¨®n Kitchen, donde se insiste en que los implicados en la trama ocultaron al menos ¡°d...
La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n ya considera acreditado ¡°documentalmente¡± que el Ministerio del Interior ocult¨® al juez el espionaje a Luis B¨¢rcenas. As¨ª consta en uno de los escritos enviados por el ministerio p¨²blico al magistrado Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n, fechado el pasado 27 de julio e incluido en el sumario de la Operaci¨®n Kitchen, donde se insiste en que los implicados en la trama ocultaron al menos ¡°deliberadamente¡± la existencia de un inmueble utilizado por la esposa del extesorero del PP y donde se sospechaba que B¨¢rcenas pod¨ªa esconder documentos comprometedores para altos cargos del partido conservador. Como recuerdan los agentes en sus pesquisas, el objetivo de los imputados era hacerse con ese material para evitar que los hallara el instructor de la Audiencia Nacional que hab¨ªa abierto el caso de la caja b tras estallar el esc¨¢ndalo de los papeles de B¨¢rcenas.
En dicho escrito, al que tuvo acceso EL PA?S, Anticorrupci¨®n detalla c¨®mo los investigadores han encontrado abundante documentaci¨®n desconocida, como actas de vigilancia y seguimientos al entorno de B¨¢rcenas realizados por funcionarios de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO), que estaba bajo el mando del comisario Enrique Garc¨ªa Casta?o, alias El Gordo, uno de los imputados en este caso. ¡°Estos [seguimientos] tuvieron como objetivo, entre otros, la vinculaci¨®n de Rosal¨ªa Iglesias, mujer del extesorero, con un local de la calle de General D¨ªaz Porlier de Madrid, que los comisarios responsables de la operaci¨®n policial hab¨ªan identificado como un posible zulo donde B¨¢rcenas y su esposa podr¨ªan ocultar los documentos cuya incautaci¨®n constitu¨ªa el motor de la puesta en marcha de la operaci¨®n¡±, explica la Fiscal¨ªa.
El ministerio p¨²blico insiste entonces que todo ello fue ¡°deliberadamente ocultado¡± a los agentes que investigaban los papeles de B¨¢rcenas por orden del Juzgado de Instrucci¨®n 5 de la Audiencia Nacional, entonces encabezado por el magistrado Pablo Ruz. Seg¨²n la Fiscal¨ªa, nunca les facilitaron estos informes ni comunicaron la existencia de este local a ¡°los funcionarios directamente responsables del grupo operativo de la Unidad de Delincuencia Econ¨®mica y Fiscal (UDEF) que hab¨ªan sido designados como auxilio judicial¡±. Nunca se lo dijeron, pese a que los investigadores consideran que durante este ¡°operativo policial¡± al margen de la ley se logr¨® sustraer al extesorero ¡°al menos una parte de la documentaci¨®n que se buscaba¡±. De hecho, en una de las grabaciones incorporados al sumario, se escucha c¨®mo el comisario jubilado Jos¨¦ Manuel Villarejo le pide a Garc¨ªa Casta?o que le facilite una copia de ese material.
Para llagar a estas conclusiones, la Fiscal¨ªa recuerda tambi¨¦n el testimonio de un inspector jefe destinado en la UDEF, que declar¨® como testigo en esta causa. Este agente dijo que en enero de 2013, cuando su unidad comienza a analizar la documentaci¨®n recabada a trav¨¦s de Suiza tras publicar EL PA?S los conocidos como papeles de B¨¢rcenas, que nunca se le ¡°transmiti¨®¡± esa informaci¨®n obtenida a trav¨¦s del espionaje a B¨¢rcenas. Pero, adem¨¢s, a?adi¨® que ¡°no hab¨ªa ning¨²n inter¨¦s objetivo en contar con un apoyo de inteligencia policial para potenciar la investigaci¨®n del delito de blanqueo de capitales¡±. Estas palabras desmontan la tesis de los principales investigados en la causa, como el comisario Eugenio Pino, antiguo director adjunto de la Polic¨ªa Nacional y considerado el mu?idor de la polic¨ªa patri¨®tica, que reconoci¨® la existencia de la Operaci¨®n Kitchen pero defendi¨® su legalidad alegando que el objetivo era recuperar el dinero evadido por B¨¢rcenas en para¨ªsos fiscales.
El caso Kitchen es una de las cerca de 25 piezas en que el juez ha dividido el macrosumario sobre los negocios del comisario jubilado Jos¨¦ Villarejo. En ella se investigan las actividades del grupo agentes que, seg¨²n la investigaci¨®n, se cre¨® en la Polic¨ªa Nacional durante la etapa de Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz al frente del Ministerio del Interior para seguir los movimientos de Luis B¨¢rcenas y su entorno durante la investigaci¨®n judicial iniciada despu¨¦s de que EL PA?S publicara, el 31 de enero de 2013, los papeles de la contabilidad b del partido que el extesorero gestionaba.
La investigaci¨®n se inici¨® en octubre de 2018, casi un a?o despu¨¦s de que fuera detenido Villarejo, tras localidad la Unidad de Asuntos Internos grabaciones que revelaban el espionaje sin control judicial a B¨¢rcenas. Las pesquisas han revelado que esta red policial clandestina estuvo al servicio del PP y coordinado presuntamente, en la parte pol¨ªtica, por el ex secretario de Estado de Seguridad y n¨²mero dos de Interior, Francisco Mart¨ªnez, y en la parte policial, por el antiguo director adjunto operativo, m¨¢ximo mando uniformado de la Polic¨ªa Nacional, el comisario Eugenio Pino, ambos imputados junto a Villarejo y otros miembros destacados de la llamada polic¨ªa patri¨®tica. El entramado cont¨® con decenas de agentes dedicados a seguir los pasos de B¨¢rcenas pensando que colaboraban con la investigaci¨®n de la caja b, que entonces llevaba juez Pablo Ruz. Sus responsables dispusieron de miles de euros para pagar a confidentes, entre ellos, Sergio R¨ªos, exempleado de seguridad del PP y ch¨®fer de B¨¢rcenas.
Seg¨²n diversos escritos del juez, las investigaciones practicadas hasta el momento permiten situar el ¡°centro nuclear¡± de la Operaci¨®n Kitchen en los despachos de Interior, ¡°desde donde se habr¨ªa dirigido y coordinado toda la operativa, presuntamente con la participaci¨®n directa del ministro y actuando por delegaci¨®n de este, al parecer, el secretario de Estado de Seguridad¡±.