Arrimadas se revuelve ante la presi¨®n de PP y PSOE
La l¨ªder de Cs ultima un pacto presupuestario con el Gobierno para consolidar un proyecto aut¨®nomo
Todo empez¨® en agosto. Cuando a Espa?a todav¨ªa no le azotaba la segunda ola de la pandemia y los peri¨®dicos contaban la salida del pa¨ªs de Juan Carlos I, el Gobierno y Ciudadanos empezaron a hablar. En secreto, discutieron el marco para un acuerdo de Presupuestos y llegaron a un pacto que permitir¨ªa a Cs sentarse en la mesa. El intento de Pablo Iglesias de cortocircuitar la operaci¨®n en septiembre fracas¨®, y ...
Todo empez¨® en agosto. Cuando a Espa?a todav¨ªa no le azotaba la segunda ola de la pandemia y los peri¨®dicos contaban la salida del pa¨ªs de Juan Carlos I, el Gobierno y Ciudadanos empezaron a hablar. En secreto, discutieron el marco para un acuerdo de Presupuestos y llegaron a un pacto que permitir¨ªa a Cs sentarse en la mesa. El intento de Pablo Iglesias de cortocircuitar la operaci¨®n en septiembre fracas¨®, y el mi¨¦rcoles Cs desvel¨® que apoyar¨¢ la tramitaci¨®n de las cuentas. En la misma semana, In¨¦s Arrimadas ha votado a favor de la pr¨®rroga del estado de alarma por seis meses. La l¨ªder de Cs trata de salvar su codiciado electorado, por el que pelean Pedro S¨¢nchez y Pablo Casado. Paso a paso, consolida su giro centrista y defiende un proyecto aut¨®nomo. No le est¨¢ resultando sencillo.
Arrimadas apenas ha cumplido ocho meses al frente de Ciudadanos. El 8 de marzo, la consultora de 38 a?os hered¨® un partido herido con una disyuntiva fundamental: avanzar hacia la convergencia con el PP en un centro derecha refundado o consolidar un proyecto aut¨®nomo, aunque fr¨¢gil, de centro. De momento, sus pasos siguen el segundo camino. ¡°Est¨¢ buscando el modelo de Duran i Lleida con CiU. Tener un espacio garantizado, peque?o pero decisivo¡±, interpreta un dirigente de la etapa de Albert Rivera.
La traves¨ªa es complicad¨ªsima. A un lado, S¨¢nchez, ¡ª"que no para de subir el umbral del dolor", seg¨²n una dirigente de Cs¡ª, pone muy dif¨ªcil los acuerdos, al priorizar las negociaciones con ERC y lanzar gui?os a los independentistas. Al otro, Casado, que ha emprendido un giro centrista para robarle su espacio electoral.
El r¨¢pido cambio de rumbo ha desatado adem¨¢s las tensiones internas. En febrero de 2019, Cs vetaba a cualquier pacto con el PSOE; ahora se aproxima a su primer acuerdo de Presupuestos con un Gobierno del PSOE y Unidas Podemos. La unidad de los 10 diputados se tambalea. El grupo ha estado a punto de romperse en la votaci¨®n del estado de alarma por una diputada, Marta Mart¨ªn, que no quer¨ªa apoyarlo. El s¨¢bado, Xavier Pericay, uno de los fundadores del partido, comunic¨® su baja como militante.
En la direcci¨®n de Arrimadas est¨¢n convencidos de forjar un acuerdo presupuestario con S¨¢nchez. ¡°Vamos en serio. Hemos optado por la discreci¨®n para hacerlo bien¡±, cuenta un dirigente de la m¨¢xima confianza de Arrimadas sobre la negociaci¨®n con el Gobierno. El pacto solo podr¨ªa descarrilar si los independentistas arrancaran importantes concesiones pol¨ªticas, como los indultos a los presos del proc¨¦s. En la c¨²pula de Cs ya no descartan de forma tajante que la mayor¨ªa parlamentaria de las cuentas les incluya a ellos y a ERC, siempre que los republicanos no metan en el paquete medidas pol¨ªticas.
Las pr¨®ximas semanas ser¨¢n de mucha tensi¨®n. Podemos forcejea para tratar de expulsar a Cs de la ecuaci¨®n presupuestaria. Iglesias ha lanzado a Pablo Echenique, portavoz parlamentario, a burlarse esta semana de Cs: ¡°Les hemos servido un plato de Presupuestos escrito por PSOE y Unidas Podemos y dicen, ?qu¨¦ ricos! que se los van a comer con patatas. Est¨¢n desesperados por soltarse del mordisco de Vox".¡±. Edmundo Bal, portavoz de Cs, le devolvi¨® el dardo: ¡°En Podemos est¨¢n rabiosillos porque estos Presupuestos los podr¨ªa firmar [Crist¨®bal] Montoro. La primera partida la ha ganado Ciudadanos, porque nuestras l¨ªneas naranjas est¨¢n en los Presupuestos".
La b¨²squeda de un papel de utilidad es clave para Arrimadas. El problema es que no siempre depende de ella. Los dem¨¢s tambi¨¦n juegan. En la ¨²ltima pr¨®rroga del estado de alarma, Cs vot¨® a favor pero no fue decisivo porque el Gobierno ya hab¨ªa amarrado a ERC y porque el PP se abstuvo. En el debate parlamentario, Arrimadas hizo un discurso con personalidad propia, desmarc¨¢ndose de los populares, a quienes les reproch¨® la ¡°criminalizaci¨®n¡± del estado de alarma. ¡°Yo prefiero que no me limiten derechos fundamentales con legislaci¨®n ordinaria. Se?ores del PP, si lo hicieran con legislaci¨®n ordinaria, S¨¢nchez no tendr¨ªa que comparecer ninguna vez en el Parlamento¡±, dijo mirando a la bancada popular, con la que comparte cinco gobiernos. Tambi¨¦n lanz¨® duras cr¨ªticas a S¨¢nchez: ¡°Ustedes no son una oficina de atenci¨®n a las comunidades aut¨®nomas¡±.
Mientras tanto, en el PP observan con codicia el mill¨®n y medio de votantes de Ciudadanos. ¡°Cs est¨¢ actuando con inteligencia, est¨¢ sabiendo sacar la cabeza¡±, analiza un bar¨®n del PP, que cree que Casado ¡°tiene que hacer que Cs sea irrelevante en el Parlamento. En el estado de alarma lo ha sido porque el PP se ha abstenido¡±.
La direcci¨®n de Arrimadas pone las luces largas para sortear la traves¨ªa del desierto. ¡°En enero, seg¨²n las encuestas est¨¢bamos en el 3,75% de intenci¨®n de voto¡±, recuerda uno de los principales dirigentes, que apuesta por mantener la calma: ¡°Las explosiones demosc¨®picas no consolidan un espacio, es mejor un crecimiento sostenido. En noviembre no llegamos al 7%. Si acabar¨¢ siendo del 11%, del 12%... Ya lo veremos¡±.