La toma de tierra del adolescente

Hace veinti¨²n d¨ªas que los medios celebraron como a un h¨¦roe a un chico que se junt¨® con otros adolescentes de Logro?o para limpiar por su cuenta los destrozos que unos v¨¢ndalos hab¨ªan dejado atr¨¢s durante la manifestaci¨®n en la que reclamaban libertad frente a las obligaciones sanitarias impuestas contra el virus. Fue un fogonazo de dignidad civil adolescente.

El chico explic¨® que lo hab¨ªa hecho para ayudar a su madre, ba...

Hace veinti¨²n d¨ªas que los medios celebraron como a un h¨¦roe a un chico que se junt¨® con otros adolescentes de Logro?o para limpiar por su cuenta los destrozos que unos v¨¢ndalos hab¨ªan dejado atr¨¢s durante la manifestaci¨®n en la que reclamaban libertad frente a las obligaciones sanitarias impuestas contra el virus. Fue un fogonazo de dignidad civil adolescente.

El chico explic¨® que lo hab¨ªa hecho para ayudar a su madre, barrendera, a la que hab¨ªa imaginado ese d¨ªa ¡°deslom¨¢ndose¡± ante el enorme trabajo que hab¨ªan dejado atr¨¢s los protagonistas del destrozo. Ese fogonazo se diluy¨® de pronto, como si no hubiera ocurrido. El propio muchacho pareci¨® hartarse de ser objeto de persecuci¨®n o burla, y poco a poco lo que fue un ejemplo de dignidad civil parec¨ªa borrarse como una verg¨¹enza. Las redes lograron que cayera sobre el gesto el silencio del propio protagonista de un hecho que hab¨ªa sido elogiado por altas autoridades del Estado. Termin¨® siendo un h¨¦roe an¨®nimo en Logro?o.

?Qu¨¦ pas¨® para que hubiera ese borrado radical? Responde Bernardo S¨¢nchez, escritor riojano, disc¨ªpulo de Rafael Azcona, guionista, por ejemplo, de Los europeos, la pel¨ªcula de V¨ªctor Garc¨ªa Le¨®n, basada en la novela del genial autor de El verdugo. Dice S¨¢nchez que ya no existe aquella Logro?o sombr¨ªa de Calle Mayor, el drama de Bardem. ¡°La sociedad se ha abierto, no es esa cinta mec¨¢nica que era la Calle Mayor de la pel¨ªcula. Es una ciudad que acoge, esponjada y abierta, una encrucijada de caminos¡­ Lo que ocurri¨® al final de octubre la dej¨® en shock, nunca hay aqu¨ª ese grado de ira o excitaci¨®n¡±.

Pero ahora funcionan los mecanismos de intimidaci¨®n de las redes, dice Bernardo S¨¢nchez. ¡°A la adolescencia se le ha juntado la movilescencia, todos tienen m¨®vil. Unos lo usan para intimidar y otros para revalorizar aquello que no se han tragado las pantallas, porque estos chicos valoran el esfuerzo material de los objetos... Este muchacho que protagoniz¨® aquel gesto es uno de esos adolescentes que tienen toma de tierra. Enfrente est¨¢n los chicos capaces de asaltar una tienda y robar ropa de marca con la que se visten para intimidar a los que s¨ª saben qu¨¦ significa la basura que otros dejan¡±.

??igo Zabala, 25 a?os, gestor de medios digitales, prolonga estudios de ciencia pol¨ªtica y trabaja para el Gobierno de La Rioja. Seg¨²n ¨¦l, ¡°la mayor¨ªa de la sociedad abraz¨® simb¨®licamente aquel gesto. Luego, el chico debi¨® de sentirse intimidado y no quiso seguir exponi¨¦ndose. Que haya ocurrido eso es un fracaso de la sociedad, pero basta con que cuatro usen las redes para intimidar y se logra el objetivo de silenciar un gesto generoso. Fue un motivo de orgullo, porque no es f¨¢cil que la gente se movilice, y que aquellos chicos lo hubieran hecho produjo orgullo y respeto¡±. Ismael Blanco Ruiz, secretario del Consejo de la Juventud de Logro?o, cree que ¡°el anonimato de las redes¡± permite persecuciones que intimidan, ¡°pero estos chicos llevan tiempo junt¨¢ndose para ayudar en la ciudad, y lo seguir¨¢n haciendo, aunque haya un momento en que la presi¨®n hace que se inhiban. Entiendo que se inhiban, s¨ª, y me da pena entenderlo¡±. Una de las chicas que estuvo recogiendo los restos del naufragio nos dijo, an¨®nimamente: ¡°No se puede hacer como lo hicieron el 31 de octubre. La respuesta que dimos fue una experiencia maravillosa que me enriqueci¨® como persona¡±. Es lo que Bernardo S¨¢nchez llama ¡°toma de tierra del adolescente¡±.