La c¨²pula del PP de Rajoy se indigna ante el desmarque de Casado sobre el 1-O

La c¨²pula del PP de Mariano Rajoy no era uniforme en 2017, pero este mi¨¦rcoles se uni¨® en una reacci¨®n de sorpresa, estupor e indignaci¨®n ante lo que calificaron de sorprendente ¡°giro catalanista¡± del actual l¨ªder del partido, Pablo Casado. El presidente popular confes¨® el martes en una entrevista en la emisora catalana RAC1 su desacuerdo con la estrategia seguida por Rajoy y la vicepresidenta Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa con ...

La c¨²pula del PP de Mariano Rajoy no era uniforme en 2017, pero este mi¨¦rcoles se uni¨® en una reacci¨®n de sorpresa, estupor e indignaci¨®n ante lo que calificaron de sorprendente ¡°giro catalanista¡± del actual l¨ªder del partido, Pablo Casado. El presidente popular confes¨® el martes en una entrevista en la emisora catalana RAC1 su desacuerdo con la estrategia seguida por Rajoy y la vicepresidenta Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa con respecto al refer¨¦ndum ilegal del 1-O. Casado sostuvo que ese d¨ªa se neg¨® a comparecer pese a que ejerc¨ªa de portavoz del partido. Media docena de dirigentes del PP y ministros de aquella etapa, consultados por EL PA?S, desmienten esta versi¨®n de los hechos.

¡°En campa?a pasan cosas ex¨®ticas y sorprendentes¡±, comenta uno de los ministros m¨¢s relevantes de aquel gabinete sobre las palabras ahora de Pablo Casado. Este ministro fue de los que m¨¢s se moj¨® en el apoyo al presidente Mariano Rajoy en aquellos conflictivos meses previos a la consulta soberanista y despu¨¦s apoy¨® a Casado en el congreso del partido en el que venci¨® a Santamar¨ªa.

¡°A¨²n estoy con la boca abierta y flipada¡±, indica una miembro de aquel equipo de direcci¨®n en el PP sobre la intervenci¨®n de Casado, que interpreta como ¡°un error¡± propio de la ¡°inseguridad¡± generada por los malos datos que se pronostican para los populares en las elecciones auton¨®micas catalanas de este domingo.

Algunas encuestas sit¨²an al PP al borde de no tener representaci¨®n parlamentaria. ¡°El nuevo equipo que rodea a Casado quiere construir un relato de que ellos no est¨¢n ensuciados con nada, ni con la corrupci¨®n de Luis B¨¢rcenas ni con lo que sucedi¨® en Catalu?a en el 1-O, pero no es verdad¡±, remacha otro alto cargo que s¨ª estuvo aquellos d¨ªas y muchas madrugadas en La Moncloa.

Casado se ha tomado estas elecciones del 14-F en Catalu?a como algo m¨¢s que un examen pol¨ªtico personal. En octubre decidi¨® romper lazos con la ultraderecha de Vox y Santiago Abascal y desde entonces padece la sombra de esa formaci¨®n en la nuca, con el riesgo del sorpasso.

El martes acudi¨® a lo que en el PP entienden como territorio medi¨¢tico hostil, para ser entrevistado en RAC1 por Jordi Bast¨¦, que le pregunt¨® en catal¨¢n si hab¨ªa hablado con Rajoy y la vicepresidenta Santamar¨ªa de las consecuencias de aquel 1-O. Casado contest¨® que aquel 1 de octubre era el portavoz del partido y decidi¨® no comparecer en rueda de prensa.

El periodista le pregunt¨® entonces por qu¨¦. Y Casado se explay¨®: ¡°Porque mi posici¨®n respecto a lo que estaba pasando y a lo que tiene que pasar en Catalu?a es p¨²blica y conocida y es lo que me llev¨® a presentarme a presidir el PP. Yo decid¨ª no salir a explicar lo que estaba pasando, porque no estaba de acuerdo con los que estaban diciendo que se estaba votando en unas elecciones homologables, porque eso no eran unas elecciones homologables, ni estaba de acuerdo con los que dec¨ªan que all¨ª no se estaba votando, porque lo que se estaba viendo en la televisi¨®n era algo que en mi opini¨®n se ten¨ªa que haber evitado¡±.

¡ª?Por tanto no le gustaron esas im¨¢genes de cargas policiales? ¡ªle pregunt¨® el entrevistador.

¡ªBueno, yo lo que tengo que decir es que eso se ten¨ªa que haber evitado...

Ninguno de los ministros o dirigentes del PP consultados por EL PA?S recuerdan ninguna intervenci¨®n de Casado, ni p¨²blica ni interna, en la que cuestionase la estrategia seguida entonces por Rajoy y que comand¨® Santamar¨ªa. Todos ellos desmienten que aquella jornada Casado tuviera previsto comparecer como portavoz del PP, porque lo hizo el propio presidente del Gobierno desde La Moncloa.

Fue all¨ª cuando Rajoy, acompa?ado solo por Santamar¨ªa y los ministros Alfonso Dastis e ??igo M¨¦ndez de Vigo, reafirm¨® varias veces: ¡°No ha habido refer¨¦ndum, hemos asistido a una mera escenificaci¨®n. Ha sido un ataque premeditado y consciente, al que el Estado ha reaccionado con firmeza y serenidad. Hemos hecho lo que ten¨ªamos que hacer, actuando solo con la ley¡±.

Aquella jornada solo estuvo en la retaguardia de la sede del PP su coordinador general, Fernando Mart¨ªnez Ma¨ªllo, que tampoco compareci¨® en rueda de prensa. S¨ª lo hizo Mart¨ªnez Ma¨ªllo como n¨²mero tres del PP, al d¨ªa siguiente, el 2 de octubre, tras un comit¨¦ de direcci¨®n que presidi¨® Rajoy, y al que acudi¨® Casado como los dem¨¢s vicesecretarios. Varias fuentes presentes aquel d¨ªa confirman que no hubo debate alguno y el mensaje de Ma¨ªllo se dirigi¨® a ¡°reforzar la unidad¡± con el PSOE y Ciudadanos porque Rajoy se reun¨ªa esa tarde en La Moncloa con Pedro S¨¢nchez y Albert Rivera.

Este martes, en la entrevista radiof¨®nica, Casado reiter¨® que aquel 1-O hab¨ªa que haber evitado lo que pas¨® y ofreci¨® como su alternativa, ¡°desde el punto de vista judicial, que el juez actuara antes de esa ma?ana¡± y, desde el pol¨ªtico, volver a 2003 para evitar el ¡°mal pacto del Tinell¡±, entre el PSC de Pasqual Maragall y ERC, y la posterior deriva soberanista de la CiU de Artur Mas.

El PP de Rajoy era un partido heterog¨¦neo en el que el l¨ªder presum¨ªa de mirar para otro lado cuando le asaltaban, incluso en citas reservadas, los problemas, rencillas y enfrentamientos entre responsables de distintos sectores, como suced¨ªa a menudo entre Santamar¨ªa y Dolores de Cospedal, la secretaria general del partido.

El desmarque catalanista de Casado sent¨® mal a todos este mi¨¦rcoles, incluso a los ministros que s¨ª discutieron ¡°con tensi¨®n¡± en aquel Gabinete que el mantra defendido por la vicepresidenta de que el 1-O no iba a haber ni urnas ni votaci¨®n al final se fuese a cumplir. En alguno de aquellos Consejos de Ministros con Rajoy s¨ª ¡°se puso en cuesti¨®n que todo estuviese bajo control¡± como manten¨ªa Santamar¨ªa, pero en aquellas sesiones no estaba Casado. Y luego todo se aprobaba por unanimidad. Dos exministros de Rajoy coinciden: ¡°Aquello fue una decisi¨®n de Gobierno y la asumimos todos, incluso los que tem¨ªamos que todo saliera tan mal, como pas¨®¡±.

Cuando s¨ª era portavoz

En junio de 2015, Mariano Rajoy, aconsejado y presionado por varios frentes, afront¨® una importante renovaci¨®n en la c¨²pula del PP con el nombramiento de cinco j¨®venes vicesecretarios nacionales. En aquella remodelaci¨®n design¨® a Pablo Casado como portavoz y responsable de Comunicaci¨®n. Aquel Casado de 34 a?os se hab¨ªa significado por acudir a los plat¨®s de televisi¨®n desacomplejado a defender a su partido ante sus numerosos casos de corrupci¨®n. Dos a?os m¨¢s tarde se desat¨® el desaf¨ªo separatista en Catalu?a. En aquellas semanas previas al refer¨¦ndum ilegal, La Moncloa y la c¨²pula del PP coordinaron sus estrategias para que todos los fines de semana Casado y la catalana Andrea Levy, como nueva vicesecretaria de Estudios y Programas, se turnaran para repetir las tesis del Ejecutivo de Rajoy y atacar al independentismo. Es lo que hizo Casado, de forma especialmente violenta, en las dos ruedas de prensa oficiales en el PP antes de la consulta, el 11 y el 18 de septiembre, incluso en tono de mofa: ¡°Los ¨²nicos apoyos de los independentistas son el etarra Otegi, el pr¨®fugo por violaci¨®n Assange y el dictador Maduro¡±.