El fugitivo por un asesinato que Espa?a dej¨® libre porque cometi¨® el crimen la v¨ªspera de cumplir 18 a?os
Los juzgados espa?oles rechazan entregar a un huido que Luxemburgo conden¨® a 11 a?os por matar a una mujer durante un robo
El 5 de enero de 1999, Jean-Marc Sirichai, nacido en Tailandia, entr¨® a robar en una casa de Eppeldorf, al noroeste de Luxemburgo. La mujer que all¨ª resid¨ªa, de 70 a?os, lo descubri¨®. En el forcejeo, ¨¦l la mat¨®. Luego incendi¨® la casa y trat¨® de escapar, pero fue detenido y m¨¢s tarde condenado a 4.200 d¨ªas (11 a?os y medio) de prisi¨®n. En octubre de 2004, Sirichai se esfum¨® durante un permiso y desde entonces su vida ha dado mil vueltas. Vivi¨® en la calle en Bruselas, en Metz (Francia) y en Par¨ªs, donde fue arrestado por estancia ilegal. Sirichai dio a las autoridades francesas su identidad ta...
El 5 de enero de 1999, Jean-Marc Sirichai, nacido en Tailandia, entr¨® a robar en una casa de Eppeldorf, al noroeste de Luxemburgo. La mujer que all¨ª resid¨ªa, de 70 a?os, lo descubri¨®. En el forcejeo, ¨¦l la mat¨®. Luego incendi¨® la casa y trat¨® de escapar, pero fue detenido y m¨¢s tarde condenado a 4.200 d¨ªas (11 a?os y medio) de prisi¨®n. En octubre de 2004, Sirichai se esfum¨® durante un permiso y desde entonces su vida ha dado mil vueltas. Vivi¨® en la calle en Bruselas, en Metz (Francia) y en Par¨ªs, donde fue arrestado por estancia ilegal. Sirichai dio a las autoridades francesas su identidad tailandesa y no fue identificado como fugitivo de Luxemburgo.
El hombre qued¨® libre en Francia y viaj¨® a Barcelona, Valencia y, finalmente, recal¨® en Punta Umbr¨ªa (Huelva, 15.242 habitantes). Ah¨ª reh¨ªzo su vida, encontr¨® pareja y tiene una hija. En agosto de 2020, tras 16 a?os de huida, el fugitivo m¨¢s buscado de Luxemburgo fue detenido por la Polic¨ªa Nacional. Todo parec¨ªa indicar que ser¨ªa entregado para terminar de cumplir los casi nueve a?os de condena que le quedan. Sin embargo, un a?o despu¨¦s qued¨® libre en Espa?a y as¨ª permanece.
?Qu¨¦ ha pasado para este inesperado giro de guion? La clave est¨¢ en la edad que Sirichai ten¨ªa al cometer los delitos. Naci¨® el 6 de enero de 1981, as¨ª que aquel 5 de enero de 1999 le faltaba un d¨ªa para cumplir 18 a?os. Luxemburgo le impuso la pena de prisi¨®n como mayor de edad, porque as¨ª consideran en ese pa¨ªs a quienes tienen m¨¢s de 16 a?os.
Tras su fuga, se convirti¨® en el fugitivo m¨¢s buscado de Luxemburgo y, desde 2016, fue tambi¨¦n prioridad europea. Alguien lo vio en la web Europe most wanted fugitives y avis¨® de su presencia en Punta Umbr¨ªa.
En octubre de 2020, el Juzgado Central de lo Penal de la Audiencia Nacional reconoci¨® la sentencia luxemburguesa de 4.200 d¨ªas de c¨¢rcel y, a petici¨®n de Sirichai, decid¨ªa que siguieran cumpli¨¦ndola en Espa?a. No obstante, el abogado del fugitivo, ?scar V¨¢zquez, recurri¨® esta decisi¨®n e hizo ver al juez central que, a ojos de la justicia espa?ola, su cliente era menor cuando cometi¨® el delito. El pasado 10 de septiembre, el propio juez central anul¨® su auto, remiti¨® el caso al juez de menores, y para mayor enfado de la fiscal¨ªa de Luxemburgo, dej¨® a Sirichai en libertad provisional con medidas cautelares.
Un mes despu¨¦s, el 8 de octubre, el juzgado central de menores se declar¨® incompetente para reconocer la sentencia. Explicaba que los tribunales de Luxemburgo impusieron una pena de reclusi¨®n, pero no una medida de internamiento, como habr¨ªa ocurrido en Espa?a con alguien de 17 a?os. Por eso, lo consider¨® competencia del juzgado central de lo penal, al que devolvi¨® el asunto. La decisi¨®n fue recurrida por el abogado, pero la Sala de lo penal de la Secci¨®n Segunda de la Audiencia Nacional lo desestim¨®. Ahora, la pelota sigue el tejado del juzgado central, donde un juez deber¨¢ ahora decidir si Sirichai debe cumplir su condena en los mismos t¨¦rminos fijados por el Tribunal de Luxemburgo ¡ªcomo pide la Fiscal¨ªa espa?ola¡ª o si adapta esa sentencia a la legislaci¨®n de menores y, por tanto, le impone una medida de internamiento.
?scar V¨¢zquez conf¨ªa en que el juez, sabiendo ahora que el luxemburgu¨¦s era menor de edad el d¨ªa de los hechos, se decidir¨¢ por el internamiento, lo que, atendiendo al tiempo que ha pasado privado de libertad en ambos pa¨ªses conllevar¨ªa probablemente que quedara definitivamente en libertad. Su abogado afirma que, adem¨¢s de su arraigo familiar, est¨¢ rehabilitado, ha trabajado como pintor o camarero de chiringuito ¡ªsiempre sin contrato seg¨²n fuentes policiales¡ª y es alguien muy querido y reconocido en Punta Umbr¨ªa. Cuando la Polic¨ªa Nacional ense?¨® su foto a agentes de la Polic¨ªa Local el pasado verano, uno de ellos lo reconoci¨® con facilidad a pesar de que estaba tomada dos d¨¦cadas atr¨¢s. ¡°Todos le conocen¡±, dice V¨¢zquez.
Mientras, la justicia luxemburguesa echa chispas. Su fiscal¨ªa general public¨® en septiembre un comunicado quej¨¢ndose de que Espa?a no hab¨ªa aplicado ¡°el principio de reconocimiento mutuo¡± de penas privativas de libertad. La procuradora general del estado, Martine Solovieff, subray¨® ante los medios de su pa¨ªs su ¡°frustraci¨®n¡± y emiti¨® una nueva orden de arresto internacional para que, en el caso de que Sirichai salga de Espa?a, pueda ser detenido. La Polic¨ªa Nacional, por su parte, considera que su trabajo est¨¢ hecho. ¡°Nosotros ponemos a los pr¨®fugos a disposici¨®n judicial, a partir de ah¨ª, no decidimos¡±, afirman fuentes del grupo de fugitivos que detuvo a Sirichai. Este fue abordado hace unas semanas por un periodista de la cadena RTL de Luxemburgo. No quiso hablar ante la c¨¢mara, pero afirm¨®: ¡°?Mi acto es imperdonable!¡±, seg¨²n relata el comunicador Dan Wiroth, al que Sirichai cont¨® que no hay futuro para ¨¦l ¡°sin haber trazado una l¨ªnea con el pasado¡±. De momento, hace equilibrios entre la libertad y unos 3.000 d¨ªas de prisi¨®n.