Un juez investiga a nueve exjefes de ETA por ordenar el secuestro de Miguel ?ngel Blanco y no impedir su asesinato

El juez de la Audiencia Nacional Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n ha dictado este jueves un auto por el que admite la querella presentada por la asociaci¨®n Dignidad y Justicia contra nueve antiguos dirigentes de ETA por el secuestro y asesinato, en julio de 1997, del entonces concejal del PP en Ermua (Bizkaia) Miguel ?ngel Blanco y ordena la reapertura del sumario. El magistrado, que fue hace 25 a?os el primer instructor de la causa, ha pedido a la Guardia Civil ¡°un informe pericial de inteligencia¡± en el que se recojan todos los indicios que permitan determinar qu¨¦ etarras formaban parte del llamado ¡°comit¨¦ ejecutivo¡± de la organizaci¨®n terrorista cuando se produjeron los hechos as¨ª c¨®mo el funcionamiento de este ¨®rgano interno para tomar decisiones.

Garc¨ªa Castell¨®n destaca que con ello quiere saber, no solo qu¨¦ dirigentes etarras participaron en la decisi¨®n de perpetrar aquel atentado, sino tambi¨¦n qui¨¦nes pudieron impedirlo y no lo hicieron, ya que Blanco estuvo durante 48 horas retenido antes de ser asesinado. Es la figura de ¡°la comisi¨®n por omisi¨®n¡±, recogida en el art¨ªculo 11 del C¨®digo Penal. En el auto, el magistrado aplaza a la conclusi¨®n de este informe policial sobre la composici¨®n entonces de la c¨²pula etarra y su funcionamiento interno su futura decisi¨®n de citar a declarar a los nueve querellados.

La reapertura del caso se produce despu¨¦s de que el pasado 6 de febrero la asociaci¨®n Dignidad y Justicia presentara en la Audiencia Nacional un escrito en el que ped¨ªa al juez que admitiese a tr¨¢mite su querella contra nueve exdirigentes de ETA por el asesinato del concejal de Ermua. En concreto, contra Miguel Gracia Arregui, alias I?aki de Renter¨ªa; Mikel Albisu, Mikel Antza; Jos¨¦ Javier Arizcuren, Kantauri; Mar¨ªa Soledad Iparraguirre, Anboto; Juan Carlos Iglesias, Gadafi; Asier Oyarzabal, Baltza; Vicente Goicoetxea, Willy; Jokin Echevarria Lagisquet; y Carlos Ibarguren, Nervios. La querella, firmada por el abogado Miguel ?ngel Rodr¨ªguez, sosten¨ªa que los ¡°ejecutores materiales del secuestro y asesinato actuaron siguiendo las instrucciones recibidas de la direcci¨®n¡± de ETA. La Audiencia Nacional ya conden¨® en su d¨ªa a tres personas por aquel asesinato: a Francisco Javier Garc¨ªa Gaztelu, Txapote, que apret¨® el gatillo; a su pareja, Irantzu Gallastegi, Amaia, que tambi¨¦n particip¨® en la ejecuci¨®n del atentado; y a Ib¨®n Mu?oa, ex concejal de Herri Batasuna en Eibar, que trabajaba cerca de donde lo hac¨ªa el concejal del PP y que facilit¨® la informaci¨®n a los anteriores.

En el auto de este jueves, el juez recuerda que uno de los querellados, Kantauri, ya se encuentra procesado desde 2016 por este crimen como posible inductor al haberse hallado dos documentos manuscritos presuntamente por ¨¦l en el que daba ¡°precisas instrucciones¡± a los miembros del comando Bizkaia ¡°para que secuestraran a un concejal del PP para dar un ultim¨¢tum al Gobierno [entonces presidido por Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar] respecto a las pretensiones de ETA relacionadas con el reagrupamiento de presos. Estas instrucciones eran coincidentes con el modus operandi que fue utilizado en el asesinato de Miguel ?ngel Blanco¡±, a?ade el magistrado. Por ello, el juez considera la querella ¡°coherente¡± con lo actuado hasta ahora para ¡°esclarecer el c¨ªrculo de part¨ªcipes e intervinientes¡± en aquellos hechos.

En este sentido, el juez recuerda que en este caso se produce una ¡°singular circunstancia¡±: que la reapertura del caso ha reca¨ªdo en el mismo magistrado que en su d¨ªa inici¨® la investigaci¨®n, lo que considera una ¡°ventaja¡± al contar ¨¦l ¡°con un conocimiento directo de lo acontecido¡±. Garc¨ªa-Castell¨®n estuvo en la Audiencia Nacional hasta el a?o 2000, cuando abandon¨® el Juzgado Central de Instrucci¨®n 6 para ocupar cargos judiciales en Par¨ªs y Roma, hasta que se reincorpor¨® en 2017. ¡°Este conocimiento, en primera persona, de cuanto sucedi¨® los aciagos d¨ªas anteriores y posteriores a los hechos [...] permiten inferir que la acci¨®n terrorista que culmin¨® el disparo de varios proyectiles sobre el cuerpo maniatado de la v¨ªctima privada de libertad durante las 48 horas anteriores, presente rasgos que permiten la delimitaci¨®n de responsabilidades m¨¢s all¨¢ de las instrucciones dadas¡± adjudicadas ¨²nicamente a Kantauri, se?ala en el auto.

Por ello, que Garc¨ªa-Castell¨®n concluye que ¡°en pocos casos, como en este atentado, puede perfilarse con m¨¢s nitidez la figura de la comisi¨®n por omisi¨®n, pues quienes ejerc¨ªan el liderazgo de la organizaci¨®n terrorista, el llamado Comit¨¦ Ejecutivo, dispusieron de, al menos, cuarenta y ocho horas para detener la acci¨®n, pudiendo disponer en todo este tiempo, presuntamente, un dominio directo del hecho, en el marco de la organizaci¨®n, que permite, desde este momento procesal, iniciar una investigaci¨®n para delimitar el alcance de sus responsabilidades¡±. Por todo ello, el magistrado dirige las nuevas pesquisas no solo en encontrar indicios sobre las personas que hubieran dado las instrucciones para secuestrar y asesinar a Blanco, sino tambi¨¦n ¡°determinar si, quienes pudiendo haberlo detenido en cualquier momento, teniendo conocimiento de la acci¨®n, no lo hicieron¡±.

Con ese objetivo, el juez pide a la Guardia Civil un informe en el que recoja ¡°todos aquellos elementos documentales¡± que permitan determinar ¡°el grado y forma de participaci¨®n¡± en el Comit¨¦ Ejecutivo de ETA o Zuba de sus integrantes cuando se cometi¨® el atentado, julio de 1997. Tambi¨¦n pide a los expertos antiterroristas del instituto armado que reflejen ¡°si se considera factible¡± que los entonces miembros de este ¨®rgano interno de la banda ¡°hubiesen participado en la toma de decisi¨®n de llevar a cabo la citada acci¨®n terrorista o bien si la participaci¨®n activa de los miembros de la Zuba hubieran podido impedir de alg¨²n modo el asesinado de Miguel ?ngel Blanco¡±. Finalmente, el magistrado solicita a los agentes que recopilen otros documentos internos de la organizaci¨®n terrorista que, si bien no tienen relaci¨®n directa con aquel atentado, ¡°s¨ª podr¨ªan poner de manifiesto, por su car¨¢cter contempor¨¢neo o pr¨®ximo al referido atentado, el modus operandi¡± que entonces utilizaba la c¨²pula etarra para tomar ¡°la decisi¨®n, planificaci¨®n y ejecuci¨®n de una acci¨®n terrorista similar¡±.

Con el sumario del asesinato de Miguel ?ngel Blanco, ya son cuatro las causas instruidas en la Audiencia Nacional en los que se investigan a exjefes de la banda. Se trata de los casos por el atentado cometido en la T-4 del aeropuerto de Barajas en 2006, que dej¨® dos v¨ªctimas mortales y cuyos autores materiales ya fueron condenados; por el asesinato del concejal popular Gregorio Ord¨®?ez en enero de 1995; y por el ataque con un coche bomba contra el juez Francisco Querol en 2000, que mat¨® al magistrado y a otras tres personas. En esas tres causas, los jueces Santiago Abascal y Santiago Pedraz han dado luz verde a investigar a las antiguas c¨²pulas de la organizaci¨®n. En total, ya son 20 los exdirigentes etarras investigados como ¡°autores mediatos por dominio¡± (algo similar a lo que se conoce popularmente como autores intelectuales) por tener el control de la banda cuando se cometieron estos atentados.