Oposici¨®n y socios usan el decreto anticrisis para castigar al Gobierno
El PSOE busca a la desesperada en el Congreso la abstenci¨®n de ERC, Bildu o el PP
El Gobierno de Pedro S¨¢nchez se enfrenta este jueves en el Congreso a otra prueba de fuego para la estabilidad de la legislatura con la convalidaci¨®n del decreto anticrisis para amortiguar los efectos de la guerra en Ucrania. Y lo hace casi en solitario y soportando el castigo, las cuentas pendientes y una bater¨ªa de cr¨ªticas desde casi todos los frentes. El socio menor de la coalici¨®n, Unidas Podemos, y...
El Gobierno de Pedro S¨¢nchez se enfrenta este jueves en el Congreso a otra prueba de fuego para la estabilidad de la legislatura con la convalidaci¨®n del decreto anticrisis para amortiguar los efectos de la guerra en Ucrania. Y lo hace casi en solitario y soportando el castigo, las cuentas pendientes y una bater¨ªa de cr¨ªticas desde casi todos los frentes. El socio menor de la coalici¨®n, Unidas Podemos, y aliados parlamentarios habituales han ido acrecentando su distanciamiento y ¡°desconfianza¡± con el sector socialista del Ejecutivo por el llamado caso Pegasus, el presunto espionaje a l¨ªderes independentistas, y por la actitud desafiante mostrada por la ministra de Defensa, Margarita Robles. Exigen dimisiones. La oposici¨®n de derechas, en particular PP y Ciudadanos, aprovecha esa crisis en el bloque progresista de investidura para cobrarse aunque sea una victoria parlamentaria simb¨®lica.
El Ejecutivo busca a la desesperada y en todos los recovecos ideol¨®gicos del hemiciclo apoyos ¡ªen forma de voto afirmativo o abstenci¨®n¡ª para este decreto, m¨¢s que simb¨®lico, que contiene medidas como el descuento de 20 c¨¦ntimos por litro de gasolina o di¨¦sel hasta el 30 de junio o el l¨ªmite a las subidas de los alquileres. El objetivo de m¨ªnimos, cuya negociaci¨®n podr¨ªa prolongarse este jueves hasta el final de la ma?ana, es que partidos tan heterog¨¦neos como PP, ERC o EH Bildu pasen de su posici¨®n contraria a revalidar ese decreto a la abstenci¨®n. A PP, Bildu e incluso a Coalici¨®n Canaria, el Gobierno les ofreci¨® el gesto de tramitar el decreto como proyecto de ley, como hab¨ªan reclamado, para discutir sus ideas, pero m¨¢s para retratarles si optaban por el no y dejarles sin argumentos.
Esa fue la estrategia que se concentr¨® sobre el PP. Los populares hab¨ªan insistido, en una negociaci¨®n bilateral que protagoniz¨® el vicesecretario de Econom¨ªa, Juan Bravo, con la ministra de Hacienda, Mar¨ªa Jes¨²s Montero, en que se atendiera alguno de los planteamientos sobre bajada o deflactaci¨®n de impuestos para los tramos medios y bajos del IRPF que el l¨ªder popular, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, envi¨® por carta al presidente con su plan alternativo. El PP cont¨® que Montero le pidi¨® el voto a Bravo sin mucho debate y le dijo que no hab¨ªa tenido tiempo de leer esos 41 folios. El equipo de Feij¨®o se tom¨® esa salida como un desaire y no descart¨® votar en contra del decreto, incluso pese a que algunos dirigentes y barones populares ve¨ªan la abstenci¨®n como una oportunidad para profundizar en la idea de que con el l¨ªder gallego hab¨ªa llegado otro modelo de hacer pol¨ªtica, m¨¢s dialogante e institucional, alejado del obstruccionismo del pasado o del no a todo de Vox.
La ministra Montero replic¨® la noche de este mi¨¦rcoles a esa postura esc¨¦ptica con una carta, que se hizo p¨²blica, para remachar al popular Bravo ¡°toda la disposici¨®n¡± del Gobierno para tratar esos asuntos adelantados por Feij¨®o a S¨¢nchez, pero tambi¨¦n los 11 pactos de Estado que el presidente le demand¨®, como renovar el atascado Consejo General del Poder Judicial.
En cualquier caso, si el Gobierno suma al final este jueves m¨¢s s¨ªes que noes a su decreto, salvar¨ªa in extremis uno de sus proyectos m¨¢s relevantes en el actual contexto pol¨ªtico nacional e internacional, en plena incertidumbre sobre la duraci¨®n de la guerra en Ucrania y con la inflaci¨®n casi en el 10%.
Distintos ministros y dirigentes del PSOE se afanaban este mi¨¦rcoles con enorme presi¨®n a negociar a varias bandas la votaci¨®n de ese decreto. El marcador est¨¢ tan apretado que se podr¨ªan repetir las escenas de tensi¨®n que se vivieron en el Congreso para sacar adelante la reforma laboral el pasado 3 de febrero. Aquella votaci¨®n se solvent¨® con 175 votos a favor frente a 174 en contra y gracias al error inform¨¢tico del diputado del PP Alberto Casero. Este mi¨¦rcoles, en plena sesi¨®n de control al Gobierno, el portavoz de ERC, Gabriel Rufi¨¢n, se permiti¨® bromear con el presidente, Pedro S¨¢nchez, al recomendarle: ¡°P¨ªdale el tel¨¦fono al se?or Casero¡±. La gracia no enamor¨® a los negociadores socialistas, que desplegaron durante toda la jornada sus contactos con todo tipo de portavoces para intentar atraer alg¨²n voto desde el no al menos a la abstenci¨®n. Hasta el portavoz del PSOE, H¨¦ctor G¨®mez, llam¨® por tel¨¦fono al portavoz de Vox, Iv¨¢n Espinosa de los Monteros, con el que mantiene buena relaci¨®n, para interesarse por su voto.
Reserva ultra
Vox est¨¢ en el no al decreto, como dej¨® claro este mi¨¦rcoles su l¨ªder, Santiago Abascal, en su pregunta al presidente, pero formalmente el partido ultra se reserva su posici¨®n hasta escuchar c¨®mo transcurre este jueves el debate. Varios partidos avisaron este mi¨¦rcoles de que esa sesi¨®n volver¨¢ a ser de infarto. La votaci¨®n est¨¢ prevista para el final de la ma?ana. El Gobierno, por el momento, solo tiene bastante asegurados 169 votos afirmativos, que podr¨ªan no resultar suficientes si al final confluyen en el no todas las revanchas y asuntos pendientes que ha ido acumulando este Ejecutivo de coalici¨®n entre el PSOE y Unidas Podemos, que suman 154 esca?os. Algunos socios habituales e importantes del Gobierno, como PNV (cinco actas), PDeCAT (cuatro) M¨¢s Pa¨ªs (dos) y Comprom¨ªs, Nueva Canaria y Partido Regionalista de Cantabria (una cada uno), han expresado estos d¨ªas sus dudas y cr¨ªticas, sobre todo por lo tarde que entienden que se ponen en contacto con ellos los negociadores de La Moncloa. Es un problema end¨¦mico de casi toda la legislatura. Pero tambi¨¦n matizan que esa queja no les llevar¨¢ a votar este jueves contra el decreto antiguerra, porque desligan esos dos escenarios.
Formaciones como ERC (13 diputados), Junts (cuatro) y EH Bildu (cinco) se aferran a la ¡°ruptura de confianza¡± y ¡°falta de lealtad¡± que achacan al Ejecutivo por el caso Pegasus para desmarcarse de esta votaci¨®n, aunque con matices. Los partidos independentistas catalanes se ubicaron de entrada en el no al decreto. El grupo de ERC eludi¨® avanzar su voto hasta conocer cu¨¢l es el mandato que reciben de su direcci¨®n este jueves desde Barcelona y para dejar alg¨²n resquicio a la rectificaci¨®n del Gobierno. El presidente de la Generalitat, Pere Aragon¨¨s, exigi¨® este mi¨¦rcoles la dimisi¨®n de Robles, y el Parlament catal¨¢n aprob¨® llevar el caso Pegasus a los tribunales con el voto del PSC. El PSOE se volc¨® mucho anoche en presionar a Bildu para se moviera del no al menos a la abstenci¨®n. Fuentes abertzales admitieron que aunque a¨²n no hab¨ªan tomado la decisi¨®n, su intenci¨®n era que se pueda tramitar ¡°el plan de choque porque, aunque sea insuficiente, contiene avances sociales y algunas medidas positivas¡±. Esos cinco esca?os de Bildu podr¨ªan resultar determinantes para inclinar el panel del empate t¨¦cnico que se registraba anoche en los despachos del Congreso.
En el otro lado del hemiciclo est¨¢n PP y Ciudadanos, con posturas similares. El ministro de Presidencia, F¨¦lix Bola?os, intercambi¨® criterios con su interlocutor en Cs. Edmundo Bal le pidi¨® apoyo a ideas de un documento que Bola?os no se hab¨ªa le¨ªdo. Cs ped¨ªa que el Gobierno se abriera a alargar la vida de las centrales nucleares. Bola?os lo descart¨® y Bal avis¨® de que Cs votar¨¢ no. En esa tesitura de exigir reivindicaciones territoriales para pasar del no a la abstenci¨®n se fijaron Teruel Existe y BNG, ambos con un voto. La diputada de Coalici¨®n Canaria dijo que se abstendr¨¢.
Del precio de la gasolina al del alquiler
El decreto de medidas económicas para dar respuesta a la crisis derivada de la guerra fue aprobado por el Gobierno el 29 de marzo y está en vigor, a la espera de ser convalidado por el Congreso. Estas son las principales medidas que recoge, y que decaerían si la convalidación no se produce:
Descuento a la gasolina. Hasta el 30 de junio habrá una bonificación mínima de 20 céntimos por cada litro de combustible, tanto para particulares como para profesionales.
Límite a la subida del alquiler. Los alquileres cuya revisión se produzca entre el 1 de abril y el 30 de junio (un plazo que podría extenderse) no podrán subir más de un 2%.
Restricciones al despido. Las empresas que reciban algún tipo de ayuda no podrán justificar un despido por el aumento de la factura de la luz.
El precio de la luz. El bono social eléctrico se extiende a 600.000 familias más, y se prórroga la rebaja del IVA en la factura de la luz hasta el 30 de junio.
Ingreso mínimo. La cuantía del ingreso mínimo vital aumenta un 15% en abril, mayo y junio.
Ayudas a sectores. La agricultura, la ganadería, el sector pesquero y el de los transportistas reciben ayudas directas.