Espadas reivindica ¡°la cultura del acuerdo¡± ante Moreno Bonilla para evitar la ¡°contaminaci¨®n¡± de la pol¨ªtica nacional a la andaluza

El presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, Juan Manuel Moreno, se propuso desde la misma noche electoral del 19 de junio, cuando gan¨® las elecciones auton¨®micas con mayor¨ªa absoluta, gobernar como si no la tuviera, pactando a su derecha y a su izquierda. En ese empe?o te¨®rico sigue, aunque falta comprobarlo. Moreno se ha comprometido este jueves, tras reunirse por separado con los portavoces de los cinco grupos parlamentarios, a celebrar reuniones mens...

El presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, Juan Manuel Moreno, se propuso desde la misma noche electoral del 19 de junio, cuando gan¨® las elecciones auton¨®micas con mayor¨ªa absoluta, gobernar como si no la tuviera, pactando a su derecha y a su izquierda. En ese empe?o te¨®rico sigue, aunque falta comprobarlo. Moreno se ha comprometido este jueves, tras reunirse por separado con los portavoces de los cinco grupos parlamentarios, a celebrar reuniones mensuales con esos partidos para ¡°buscar el consenso y el di¨¢logo¡±.

El anuncio lo ha hecho el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, al t¨¦rmino de la ronda de entrevistas, aunque previamente ninguno de los portavoces inform¨® de esa oferta. Fuentes socialistas indicaron que el secretario general del PSOE, Juan Espadas, no la oy¨® en boca de Moreno durante la hora larga en la que han estado reunidos. Ser¨¢ Sanz el que lleve el peso de estos contactos que, en su opini¨®n, persigue ¡°gestionar de otra manera en la historia de la autonom¨ªa¡± la mayor¨ªa absoluta que anta?o tuvo el PSOE.

Por ahora, las buenas palabras, las ofertas de acuerdo, la preocupaci¨®n compartida por el alza de los precios y la sequ¨ªa presiden las relaciones pol¨ªticas en Andaluc¨ªa entre el Gobierno y los grupos, cuando tan solo se han celebrado dos plenos del Parlamento: el de su constituci¨®n y el de la elecci¨®n de senadores por la comunidad. La semana pr¨®xima comienzan las sesiones plenarias del nuevo periodo de sesiones en las que habr¨¢ que votar iniciativas de los grupos. Ser¨¢ el momento de empezar a confirmar hasta donde llega la mano tendida de Moreno, que pretende alcanzar acuerdos con todos, aunque no los necesita, salvo en la renovaci¨®n de ¨®rganos de extracci¨®n parlamentaria que requieren mayor¨ªa reforzada.

Moreno se ha encontrado a unos portavoces nada beligerantes, agradecidos por la convocatoria del presidente en el palacio de San Telmo y llenos de buenas intenciones, prop¨®sitos y propuestas. Eso se trasluce, salvando las diferencias ideol¨®gicas, de lo dicho por Juan Espadas (PSOE), Manuel Gavira (Vox), Teresa Rodr¨ªguez (Adelante Andaluc¨ªa) y en menor medida de Inma Nieto (Por Andaluc¨ªa), quien percibe ¡°m¨¢s rodillo y menos mano tendida¡±. Adem¨¢s, a la vuelta de la esquina hay unas elecciones municipales ¡ªel pr¨®ximo mes de mayo¡ª, y sobre final de a?o, las elecciones generales. Son dos convocatorias que pondr¨¢n a prueba la voluntad de di¨¢logo.

Espadas, que cosech¨® el peor resultado en la historia del PSOE, tambi¨¦n sigue empe?ado en comprobar ¡°si el talante por el di¨¢logo¡± del Gobierno andaluz ¡°es real o no lo es¡±, y ha ofrecido dos paquetes de propuestas al Ejecutivo para combatir la inflaci¨®n y la sequ¨ªa, que ha cuantificado en 862 millones de euros. El socialista se ha comprometido a reclamar con la misma intensidad al Gobierno central que preside Pedro S¨¢nchez y al que pilota Moreno las obras hidr¨¢ulicas programadas a¨²n pendientes. En su opini¨®n, hay que ¡°huir al m¨¢ximo de la confrontaci¨®n¡± en el tema de la sequ¨ªa, convencido de que si no llueve tendr¨¢ que haber restricciones ¡°y esa situaci¨®n es mejor hacerla con acuerdos porque la situaci¨®n afectada a todos¡±.

El socialista ha reivindicado su derecho a ¡°plantear un escenario de oposici¨®n propio¡± que evite ¡°la contaminaci¨®n de la pol¨ªtica nacional¡± con propuestas concretas en lugar ¡°vivir del cuento y dormitar¡± durante los cuatro a?os de mayor¨ªa absoluta del PP. ¡°La cultura del acuerdo es buena¡±, ha defendido Espadas. La posici¨®n del secretario general socialista choca con los que le aconsejan en su partido una oposici¨®n de mano dura y constante y ce?ir el consenso a unos pocos asuntos.