El Congreso facilitar¨¢ la investigaci¨®n al despacho que ocup¨® Tito Berni y sus terminales m¨®viles si se pide convenientemente

Juan Bernardo Fuentes Curbelo, uno de los presuntos cabecillas de la trama del caso Mediador, ya no es diputado en ejercicio del PSOE por Canarias, pero su despacho en el Congreso se mantiene cerrado y sin uso desde que ...

Juan Bernardo Fuentes Curbelo, uno de los presuntos cabecillas de la trama del caso Mediador, ya no es diputado en ejercicio del PSOE por Canarias, pero su despacho en el Congreso se mantiene cerrado y sin uso desde que fue forzado a firmar su renuncia en la tarde del pasado 14 de febrero, cuando estall¨® el esc¨¢ndalo. Lo que no se sabe de forma tan clara es d¨®nde y qui¨¦n dispone de los soportes m¨®viles, tel¨¦fono y tableta, que el Parlamento le facilit¨® en su d¨ªa, cuando tom¨® posesi¨®n del esca?o, aunque se presume que a¨²n obran en su poder. La Presidencia de las Cortes todav¨ªa no ha recibido ninguna petici¨®n formal, planteada por el Tribunal Supremo, el ¨®rgano competente, para efectuar una inspecci¨®n en ese despacho oficial o en sus soportes m¨®viles, pero tiene la intenci¨®n de autorizarlas, en un hecho sin precedentes constatados.

En la tarde del 14 de febrero, cuando el PSOE tuvo conocimiento a trav¨¦s del partido en Canarias de la Operaci¨®n Mediador y las detenciones practicadas en el archipi¨¦lago y que en el caso podr¨ªa estar implicado el exdiputado por Fuerteventura Fuentes Curbelo, el secretario de Organizaci¨®n nacional lo cit¨®, le forz¨® a presentar su renuncia y la misma fue registrada telem¨¢ticamente sobre las 19.30 horas. El diputado se march¨® a su despacho, recogi¨® algunas pertenencias y dej¨® el Congreso. Unos minutos m¨¢s tarde, personal del grupo socialista se present¨® en ese cub¨ªculo que ten¨ªa asignado el diputado y lo clausur¨®. Desde entonces ese espacio permanece cerrado y no ha sido adjudicado al parlamentario socialista que le sustituy¨®, seg¨²n fuentes de la direcci¨®n del PSOE en la C¨¢mara.

Una unidad de investigaci¨®n de la polic¨ªa, en Canarias, ha requerido a la juez entrar en el despacho que fue de Fuentes Curbelo para inspeccionarlo, pero la Fiscal¨ªa ha puesto reparos. La petici¨®n no ha llegado a¨²n al Congreso, ni a trav¨¦s de la Secretar¨ªa General ni de la Presidencia, que es la autoridad competente para conceder esa actuaci¨®n. Fuentes de la Presidencia del Congreso han avanzado que estar¨¢n a favor de permitir esa inspecci¨®n, del despacho o de los m¨®viles, si se plantea conforme a la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim) y por el ¨®rgano competente para dirimir estas cuestiones, que en el caso de todo lo que afecta a la sede de la soberan¨ªa nacional y sus diputados es el Tribunal Supremo. Ese paso no se ha producido.

Varios art¨ªculos de la citada norma legal especifican que los jueces para entrar y registrar cualquier dependencia de las Cortes necesitan la autorizaci¨®n de la Presidencia de esas C¨¢maras (art¨ªculo 548 de la LECrim) e incluso que para procesar a un parlamentario no pueden dirigir el procedimiento directamente contra el mismo si ese permiso previo. Fuentes Curbelo ya no es diputado ni, por lo tanto, aforado, algo que pareci¨® preocuparle mucho en su charla con la direcci¨®n del PSOE cuando se le exigi¨® la renuncia, pero para acceder a su antiguo despacho o a sus soportes, la juez que lleva el caso en Canarias s¨ª tiene que pedir autorizaci¨®n a la Presidencia del Congreso.

Tampoco est¨¢ muy claro, por ahora, d¨®nde est¨¢n o qui¨¦n dispone de los soportes m¨®viles que el Congreso facilit¨® al exdiputado cuando tom¨® posesi¨®n. La polic¨ªa le requis¨® en un primer momento, cuando fue detenido en Canarias, dos tel¨¦fonos y uno podr¨ªa ser el que ten¨ªa cuando era parlamentario. De la tableta no se sabe nada. El Congreso permite a los diputados que dejan esa funci¨®n quedarse con esos soportes previo pago de un importe que est¨¢ estipulado para ese tipo de dispositivos ya usados. Se desconoce si Curbelo ha hecho uso de esa prerrogativa. Si los diputados que dejan de serlo no quieren quedarse con esos dispositivos, el Congreso los env¨ªa a resetear de manera inmediata para poderlos ofrecer a otros parlamentarios.