Feij¨®o juega en el alambre
Los populares persisten en el acercamiento al PNV pese a los continuos portazos del partido vasco
Cuando Mariano Rajoy declin¨® el encargo del Rey para ir a la investidura, en enero de 2016, tuvo muy presente lo que le hab¨ªa ocurrido al ex primer ministro portugu¨¦s Pedro Passos Coelho. Rajoy, como recuerdan hoy sus colaboradores, temi¨® seguir los pasos del pol¨ªtico conservador luso, que lleg¨® a protagonizar en su reelecci¨®n, en 2015, el Gobierno m¨¢s breve de la historia de Portugal: de apenas 27 d¨ªas. Passos Coelho hab¨ªa ganado las elecciones, pero sin apoyos suficientes, y su reci¨¦n forma...
Cuando Mariano Rajoy declin¨® el encargo del Rey para ir a la investidura, en enero de 2016, tuvo muy presente lo que le hab¨ªa ocurrido al ex primer ministro portugu¨¦s Pedro Passos Coelho. Rajoy, como recuerdan hoy sus colaboradores, temi¨® seguir los pasos del pol¨ªtico conservador luso, que lleg¨® a protagonizar en su reelecci¨®n, en 2015, el Gobierno m¨¢s breve de la historia de Portugal: de apenas 27 d¨ªas. Passos Coelho hab¨ªa ganado las elecciones, pero sin apoyos suficientes, y su reci¨¦n formado Gabinete fue tumbado a toda velocidad por el Parlamento tras un acuerdo de los socialistas con las fuerzas de izquierda. Un a?o despu¨¦s, Rajoy, que tambi¨¦n hab¨ªa ganado las elecciones pero sin apoyos suficientes, mir¨® el ejemplo del vapuleado pol¨ªtico portugu¨¦s y declin¨® el encargo del Rey: ¡°Hoy no tengo los votos y, por tanto, no tiene sentido que vaya all¨ª a los ¨²nicos efectos de que empiece a correr el plazo de dos meses que establece la Constituci¨®n espa?ola¡±, dijo entonces para sorpresa de propios y ajenos.
A diferencia de su amigo Rajoy, Alberto N¨²?ez Feij¨®o ha aceptado el encargo de Felipe VI, consciente de que tampoco tiene los apoyos para resultar investido. El PP sostiene que lo ha hecho para no defraudar a sus votantes, porque ha ganado las elecciones, aunque detr¨¢s se esconde tambi¨¦n un inter¨¦s electoral por si Pedro S¨¢nchez no resulta elegido y hay que volver a las urnas. Una vez puestos a ello, en el PP no dejan de pensar que a Feij¨®o le separan solo cuatro votos de La Moncloa. Y, aunque en el mes que resta hasta su investidura del 26 y 27 de septiembre los populares est¨¢n, sobre todo, fabricando un relato pol¨ªtico, en G¨¦nova tampoco tiran la toalla. La c¨²pula popular, en un movimiento soterrado, trabaja tambi¨¦n para que un sorpresivo giro de guion d¨¦ la presidencia a Feij¨®o, aunque sabe que es pr¨¢cticamente imposible. La arriesgada maniobra, que pasa por hablar con los nacionalistas, est¨¢ tensionando al m¨¢ximo el partido.
La direcci¨®n del PP act¨²a bajo la siguiente m¨¢xima, que explican fuentes al m¨¢s alto nivel: ¡°El PNV tiene la llave de la investidura de Feij¨®o, y Junts tiene la llave de la repetici¨®n electoral¡±. Es decir, que el PP cree que la ¨²nica opci¨®n para que prospere la investidura del l¨ªder pasar¨ªa por convencer al renuente partido vasco de que sus cinco diputados votaran a favor. En cambio, con la formaci¨®n de Carles Puigdemont, con siete esca?os, lo ¨²nico que se puede explorar no es que haga presidente a Feij¨®o, sino que tumbe a S¨¢nchez y se repitan las elecciones. Un escenario que tambi¨¦n interesa al PP.
Feij¨®o ha incluido en la ronda de conversaciones para su investidura a ambos partidos, aunque le est¨¢ costando mucho ruido interno y cr¨ªticas de la derecha medi¨¢tica, sobre todo por Junts. El PP, admiten fuentes de la direcci¨®n, quiere explorar si puede haber agua en la piscina. ¡°Hay que dar todas las batallas, estamos solo a cuatro votos¡±, apuntan estas fuentes, partidarias de llegar hasta el l¨ªmite que se pueda para hacer presidente a Feij¨®o. A pesar de que oficialmente el PP todav¨ªa no se ha sentado con el PNV ni con Junts, las conversaciones ya han comenzado, seg¨²n fuentes al tanto de las mismas. De momento, con escaso ¨¦xito.
El PP se est¨¢ topando con el muro del PNV. Los populares est¨¢n sorprendidos con la rocosidad del partido vasco y con lo arisco que est¨¢ llegando a ser con el PP. A Feij¨®o le cost¨® hasta que el lehendakari, ??igo Urkullu, a quien conoc¨ªa de su etapa como presidente de Galicia, se le pusiera al tel¨¦fono para hablar de la investidura. G¨¦nova hace todo lo que est¨¢ en su mano para tratar de seducir al PNV, a pesar de que el partido de Andoni Ort¨²zar no para de darles portazos. ¡°Es muy dif¨ªcil, pero el PNV no es una roca. Son de derechas, hay que seducirlos¡±, insisten en la c¨²pula.
Tanto est¨¢ intentando la direcci¨®n del PP agrietar el muro del PNV, que ha renunciado a hacer batalla contra la propuesta lanzada por Urkullu esta semana a trav¨¦s de EL PA?S. El lehendakari plantea un pacto entre el Estado y las ¡°nacionalidades hist¨®ricas¡± (Pa¨ªs Vasco, Catalu?a y Galicia) para cambiar el modelo territorial espa?ol, un planteamiento que, de no haber pretendido su apoyo, el PP habr¨ªa censurado frontalmente, como demuestra el discurso que s¨ª han hecho algunos de sus barones y FAES, la fundaci¨®n del expresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. El contraste entre el tono de la c¨²pula frente al de sus dirigentes territoriales y el ala m¨¢s conservadora del PP con el plan de Urkullu es esclarecedor. Mientras el coordinador general del PP, El¨ªas Bendodo, enfatiz¨® que el PP ¡°entiende¡± la propuesta de Urkullu, aunque hay ¡°l¨ªmites¡± en la Constituci¨®n que los populares no van a superar, algunos barones del PP defienden que ¡°es un ataque inaceptable a la Constituci¨®n y a la unidad de la Naci¨®n espa?ola¡±, como lo censur¨® el presidente de Arag¨®n, Jorge Azc¨®n. FAES, por su parte, ha descrito la propuesta del lehendakari como una ¡°voladura de la naci¨®n espa?ola como sujeto constituyente y la liquidaci¨®n del actual Estado auton¨®mico¡±.
El camino es igualmente tortuoso con Junts, que plantea una ley de amnist¨ªa inasumible para el PP que Feij¨®o ha denostado como ¡°inconcebible en un pa¨ªs europeo¡±. En este caso, el PP est¨¢ tratando de convencer a los independentistas catalanes de que no apoyen a Pedro S¨¢nchez, con el mensaje de que ambos comparten el inter¨¦s estrat¨¦gico de que el PSC no siga creciendo en Catalu?a, algo que seguir¨¢ ocurriendo si hacen presidente a S¨¢nchez.
La maniobra del PNV y de Junts es delicad¨ªsima para Feij¨®o, a quien se le ha revuelto internamente el partido en Catalu?a y parte de la derecha medi¨¢tica por estar dispuesto a hablar con los independentistas, a los que hasta hace nada llamaban golpistas. ¡°Las bases est¨¢n alucinando, y en privado todo el mundo lo tiene claro¡±, apunta un dirigente cr¨ªtico con esta estrategia, de la que hasta ahora no se ve ning¨²n fruto.
De momento, ni Junts ni el PNV parecen abrirse m¨ªnimamente a la investidura del l¨ªder del PP. Tampoco el PSOE, como puso de manifiesto la fallida reuni¨®n de Feij¨®o con S¨¢nchez este martes en el Congreso. El problema de Feij¨®o, como le record¨® este viernes el presidente del PNV, Andoni Ort¨²zar, es que lleva adosada a la extrema derecha. ¡°No juguemos con la gente¡±, se quej¨® Ort¨²zar. ¡°Vox no est¨¢ fuera de la ecuaci¨®n. Vox es un elefante que est¨¢ en medio del pasillo, y por mucho que quieran no lo pueden esconder. Si Vox estuviera de verdad fuera de la ecuaci¨®n, el PP, para llegar a la Moncloa, necesitar¨ªa 37 votos m¨¢s que los que tiene asegurados¡±. Este viernes, adem¨¢s, el PP cerr¨® con Vox su quinto Gobierno auton¨®mico conjunto, el de Murcia, despu¨¦s de tres meses de tira y afloja que se han resuelto con la victoria de los ultras.
Algunos dirigentes cr¨ªticos del PP advierten a Feij¨®o de los riesgos de esta estrategia. ¡°Al final puede volver a pasar que no consigamos ni al PNV ni a Vox¡±, alerta uno de ellos, que recuerda el precedente de la votaci¨®n de la Mesa del Congreso, en la que el PP se qued¨® solo con UPN y Coalici¨®n Canaria porque Vox se desmarc¨® a ¨²ltima hora. ¡°Si en la investidura Vox se desmarca y deja otra vez a Feij¨®o con 139 votos... se l¨ªa muy gorda. Abascal tiene el futuro de Feij¨®o en sus manos. Es un poder excesivo¡±. La extrema derecha est¨¢, de momento, manteniendo el apoyo a Feij¨®o a pesar de su acercamiento a los nacionalistas, pero el l¨ªder del PP juega en el alambre, como Passos Coelho, como le advierten algunos de los suyos: ¡°No se puede soplar y sorber a la vez... si lo intentas, te ahogas¡±.