La Guardia Civil rectifica y descarta ahora que los seis encarcelados fueran los asesinos de los agentes de Barbate
Un informe del instituto armado que analiza el v¨ªdeo grabado por uno de los detenidos concluye que fue otra narcolancha la que embisti¨® a las v¨ªctimas
Vuelco a la investigaci¨®n por el asesinato de los guardias civiles Miguel ?ngel Gonz¨¢lez y David P¨¦rez, arrollados por una narcolancha en el puerto de Barbate (C¨¢diz) el pasado 9 de febrero. Un nuevo informe del instituto armado rectifica las conclusiones iniciales de las pesquisas y concluye ahora que los seis detenidos y encarcelados por el doble crimen no participaron en el suceso. La conclusi¨®n llega despu¨¦s de con...
Vuelco a la investigaci¨®n por el asesinato de los guardias civiles Miguel ?ngel Gonz¨¢lez y David P¨¦rez, arrollados por una narcolancha en el puerto de Barbate (C¨¢diz) el pasado 9 de febrero. Un nuevo informe del instituto armado rectifica las conclusiones iniciales de las pesquisas y concluye ahora que los seis detenidos y encarcelados por el doble crimen no participaron en el suceso. La conclusi¨®n llega despu¨¦s de constatar que la narcolancha en la que viajaban ¨Dy que fue localizada en una playa de la L¨ªnea de la Concepci¨®n¨D no fue la que embisti¨® la z¨®diac en la que iban los dos agentes fallecidos y otros cuatro compa?eros que resultaron heridos, como se pens¨® en un primer momento. El documento policial, remitido este martes al juez que instruye la causa y al que ha tenido acceso EL PA?S, apunta a otra embarcaci¨®n de alta velocidad en la que viajaban tres personas no identificadas como la verdadera responsable del tr¨¢gico abordaje y, por tanto, considera que ¡°es posible descartar la participaci¨®n de los actualmente investigados¡± en el asesinato de los guardias civiles. Los seis permanec¨ªan este mi¨¦rcoles en la c¨¢rcel. Fuentes de la Fiscal¨ªa se?alan a este diario que a todos ellos se les seguir¨¢ imputando delitos graves de contrabando y pertenencia a organizaci¨®n criminal, castigados con penas que pueden alcanzar los siete a?os de c¨¢rcel, por lo que el ministerio p¨²blico pedir¨¢ mantenerlos en prisi¨®n.
El informe llega a esta conclusi¨®n tras analizar al detalle un v¨ªdeo de tres minutos y 33 segundos encontrado en el tel¨¦fono m¨®vil de uno de los arrestados, Jos¨¦ Antonio G. C., que este hab¨ªa grabado desde la lancha a la que en primera instancia se le atribuy¨® la embestida. Estas im¨¢genes recogen la secuencia de los movimientos efectuados por otra narcolancha de casco de color negro ¡°antes, durante y despu¨¦s¡± de que realizara la acometida y despejan ¡°las dudas¡± sobre la autor¨ªa, destacan los investigadores. La Guardia Civil se?ala que tambi¨¦n se ha estudiado otras grabaciones existentes, entre ellas las realizadas por las c¨¢maras del circuito cerrado de televisi¨®n del puerto de Barbate, la registrada por la Go-Pro (peque?a c¨¢mara resistente al agua) que llevaba en el casco uno de los agentes, las filmadas por testigos presenciales y las publicadas en redes sociales aquellos d¨ªas, que han permitido establecer una secuencia casi al segundo.
En sus declaraciones ante la jueza que inici¨® la instrucci¨®n de la causa, los seis detenidos ya negaron su participaci¨®n en los hechos y se?alaron a otra embarcaci¨®n como causante del suceso. Uno de ellos, Mustaf¨¢ C. lleg¨® a afirmar que ¨¦l conoc¨ªa al piloto de la narcolancha que atac¨® a los agentes, al que identifica como un tal ¡°Khaled¡±, y que tanto este como el resto de ocupantes ¨D¨¦l asegura que eran cuatro en total¨D ¡°eran marroqu¨ªes¡±. Sin embargo, la jueza, a instancias de la Fiscal¨ªa, orden¨® su ingreso en prisi¨®n provisional de los seis. Al menos dos informes de criminal¨ªstica de la Guardia Civil sobre el casco de la narcolancha en el que se encontraron restos de pintura reforzaron en primera instancia esta decisi¨®n al considerar que esas marcas eran compatibles con la pintura de la z¨®diac oficial. Pese a todo, sus defensas hab¨ªan pedido en varias ocasiones su puesta en libertad sin ¨¦xito. El nuevo juez encargado de la instrucci¨®n, ?ngel Rojas Navarro, ha ordenado recientemente recabar informaci¨®n sobre otras dos narcolanchas que aparecieron abandonadas al d¨ªa siguiente del suceso, una en la localidad de Chiclana (C¨¢diz) y otra se encuentra en el muelle de la Compa?¨ªa R¨ªo Tinto, en Huelva.
El informe ¨Dde 143 p¨¢ginas y elaborado por un equipo conjunto de la Comandancia de C¨¢diz y la Unidad Central Operativa (UCO)¨D detalla que la narcolancha que embisti¨® a la z¨®diac ten¨ªa cuatro motores fueraborda, pero solo una antena de radar recubierta parcialmente de cinta de color negro, mientras que la que ocupaban los detenidos, aunque ten¨ªa el mismo n¨²mero de motores, constaba de dos antenas, una de radar y otra de wifi. Seg¨²n las pesquisas, la embarcaci¨®n causante del suceso iba ocupada por menos tripulantes. En concreto, tres. Los investigadores se?alan que las im¨¢genes confirman que fue esta, y no la de los seis detenidos, fue la que realiz¨® un total de ¡°seis ofensivas contra los agentes, siendo la ¨²ltima de ellas mortal para dos de los seis tripulantes de la embarcaci¨®n oficial de la Guardia Civil¡±.
El informe recalca en varias ocasiones la actitud premeditada de los ocupantes de esta embarcaci¨®n de causar la muerte de los agentes. ¡°Todos los integrantes de la narcolancha actuaron con la intenci¨®n clara e inequ¨ªvoca de acabar con la vida de los guardias civiles que tripulaban la embarcaci¨®n oficial, con un claro desprecio por sus vidas¡±. En este sentido, los investigadores recalcan que sus tripulantes sab¨ªan que la z¨®diac era una lancha oficial del instituto armado tanto por la luz azul que llevaba encendida como porque sus ocupantes llevaban sus uniformes.
Pese a ello, los ocupantes de la narcolancha hicieron ¡°varias aproximaciones violentas¡± contra la embarcaci¨®n de los agentes antes de alejarse a ¡°una distancia suficiente que les permiti¨® alcanzar una elevada velocidad regresando de nuevo en direcci¨®n a la embarcaci¨®n oficial para finalmente, sin desviar la trayectoria para evitar la colisi¨®n, atacarla entrando con su proa desde babor a estribor de la embarcaci¨®n afectada¡±. El documento policial destaca que con esta maniobra pasaron ¡°por encima con la quilla, con toda la superficie del casco y con los cuatro motores de 300 caballos de potencia y unos 300 kilogramos de peso cada uno, dotados de elementos cortantes¡±, como las h¨¦lices, que giraban ¡°a gran velocidad¡±. Los informes forenses han determinado que los dos agentes murieron como consecuencia de los traumatismos sufridos, entre ellos profundos cortes.
Los investigadores tambi¨¦n recalcan que la narcolancha ¡°no portaba droga ni petacas de gasolina ni migrantes¡± y que, por tanto, ¡°nada ten¨ªan que defender¡± para intentar evitar ser detenidos. Por tanto, contin¨²a el informe, ¡°la ¨²nica explicaci¨®n hallada para dar sentido al brutal ataque gratuito acometido contra la embarcaci¨®n de la Guardia Civil es la intenci¨®n de causarle un grave da?o o quitarles la vida¡±. En este sentido, recalca que los agentes estaban en ¡°una situaci¨®n de indefensi¨®n¡± entre otros motivos porque su embarcaci¨®n eran ¡°mucho m¨¢s lenta y liviana que la narcolancha que les arroll¨®¡±. El documento policial a?ade que ¡°a pesar de realizar varios disparos al aire en instantes previos a la mortal agresi¨®n, [los agentes] no pudieron evitar el atentado¡± que caus¨® la muerte de dos de ellos y heridas a los otros cuatro.