La no tan sorprendente escasez del embalse del Ebro en Cantabria

El f¨¢cil acceso a informaci¨®n actualizada casi al instante genera peque?as obsesiones como revisar compulsivamente el estado de los embalses. El cambio clim¨¢tico, las sequ¨ªas c¨ªclicas o las amenazas de restricciones se enfrentan en el argumentario a las borrascas de diversa nomenclatura, a las danas y a las quejas de la hosteler¨ªa cuando llueve en cualquier fiesta, o no, de guardar. Las abundantes precipitaciones de la ¨²ltima Semana Santa aliviaron pantanos agonizantes como los andaluces, dieron aire a los mediterr¨¢neos y catalanes y llenaron los del noroeste.

El norte mira desahogado las estrecheces del sur y del este, pero hay un asterisco, seg¨²n los portales fiscalizadores de presas. El pantano del r¨ªo Ebro, en Cantabria, choca contra la tendencia septentrional a la abundancia: apenas llena el 46% de su capacidad frente al 70% de media de los ¨²ltimos cinco a?os. La escasez bebe del car¨¢cter interanual del pantano, estrat¨¦gico para garantizar regad¨ªos en la castigada cuenca del Ebro, y las no tan abundantes lluvias c¨¢ntabras.

Una excursi¨®n f¨ªsica para ratificar la informaci¨®n virtual ratifica que ese enorme pantano ha pasado por ¨¦pocas mejores. El reci¨¦n parido Ebro tiene en la zona una extensi¨®n de 6.253 hect¨¢reas, con varios peque?os municipios en las orillas y con una capacidad total de 541 hect¨®metros c¨²bicos, de los cuales actualmente apenas hay cubiertos unos 250, un 46% de su volumen, seg¨²n la medici¨®n de este mi¨¦rcoles.

El aciago 2023, de pobreza h¨ªdrica, se qued¨® en un 40%. Aquel fue el peor en 20 a?os, seguido del actual, en el que el volumen de agua es casi la mitad que el promedio en dos d¨¦cadas: un lustroso 82%, 442,6 hect¨®metros c¨²bicos. La explicaci¨®n radica en un concepto: embalse hiperanual. Fuentes de la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Ebro (CHE) explican que ese t¨¦rmino significa la capacidad de almacenar agua en las temporadas h¨²medas y administrarla en contextos complicados, con el regad¨ªo como principal uso.

Las escasas precipitaciones de los ¨²ltimos meses en Arag¨®n, la gran demandante para sus cosechas, o Catalu?a, ha elevado la presi¨®n sobre este pantano. ¡°En los a?os hidrol¨®gicos secos de 2021-2022 y 2022-2023 ha utilizado sus reservas para garantizar sus usos y ahora le est¨¢ costando recuperarse¡±, afirman estas fuentes, que a?aden a Navarra y La Rioja como usuarios de este caudal y los canales de Lodosa y el Imperial. A ello se unen ¡°minitrasvases¡± para la cuenca del Cant¨¢brico ¡°para garantizar el abastecimiento de la regi¨®n.

El an¨¢lisis sobre el estado de las presas traza finas l¨ªneas entre la sequ¨ªa y la escasez, que no son lo mismo. Dif¨ªcil calibrarlo para el visitante profano en la playa de Arija o en el puente de Horna, lugares desde donde contemplar la capacidad de esta reserva h¨ªdrica. La presencia de caballos o vacas pastando tranquilamente en esas laderas habitualmente tapadas corrobora que el lugar ha tenido momentos mejores, al igual que lo expresa la vegetaci¨®n y esas franjas horizontales naturales que marcan las diversas alturas del nivel del agua, con muchas de ellas actualmente a la vista.

¡°El embalse del Ebro ha estado en situaci¨®n de sequ¨ªa prolongada durante buena parte de este a?o hidrol¨®gico 2023-2024, aunque ahora ya no lo est¨¢¡±, precisan los portavoces de la CHE, en parte gracias a las ¨²ltimas lluvias y nieves, aunque no tan abundantes como en inviernos pasados. La regi¨®n acumula 15 meses consecutivos considerados ¡°c¨¢lidos y secos¡±, misma calificaci¨®n que la vigente primavera, mala se?al para el embalse.

Las ¨²ltimas heladas de finales de abril, con temperaturas bajas, escarchas y copos en cotas altas, no revierten esa situaci¨®n. Bien lo saben a unos kil¨®metros, en la estaci¨®n de esqu¨ª Alto Campoo, sin apenas actividad este invierno, muchos d¨ªas cerrada o con escasas pistas disponibles gracias a la ayuda clave de los ca?ones de nieve artificial. El escenario de calor para la ¨¦poca beneficia asimismo a los pir¨®manos, habitualmente ganaderos seg¨²n las sospechas de los servicios de extinci¨®n, que queman el monte con el fin de ganar superficie para sus vacas.

¡°La cabecera del Ebro, donde se encuentra el embalse del Ebro, ha mejorado, pero no de forma suficiente como para mejorar los niveles que registraba el informe de sequ¨ªa y escasez de marzo, continuando esta unidad territorial en situaci¨®n de alerta por escasez¡±, resumen las fuentes de la confederaci¨®n hidrogr¨¢fica. Arcadio Blasco, delegado territorial c¨¢ntabro de la Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa (Aemet), indica que ¡°hasta el 31 de marzo, ecuador del a?o hidrol¨®gico, est¨¢ siendo seco, con un d¨¦ficit del 12% respecto al promedio¡±.

Las previsiones de Aemet para la primavera completa apuntan a que ser¨¢ ¡°m¨¢s c¨¢lida de lo normal¡±, en la tendencia de los ¨²ltimos a?os, si bien las estimaciones a¨²n no vaticinan con solvencia el patr¨®n de precipitaciones previsible. Blasco rechaza posicionarse firmemente, a falta de ratificaci¨®n exacta, sobre el progresivo aumento de las temperaturas, pero s¨ª admite que este fen¨®meno sucede y que marzo, salvo por los temporales de Semana Santa, iba camino de ser ¡°seco¡±.

Esos calores inusuales, con jornadas con term¨®metros de playa en pleno marzo o abril, acarrean menos nieve en las cordilleras, algo evidente nuevamente al circular por las zonas monta?osas. Los frecuentes d¨ªas consecutivos por encima de las temperaturas medias impiden que se afiance la nieve en los montes y que este manto blanco sirva como recurso veraniego en los meses secos, donde asimismo aumenta la demanda en Santander o las localidades aleda?as a causa del turismo o las segundas viviendas.

Luis Mart¨ªnez, responsable de la empresa de deporte aventura H2UR, percibe un ¡°cambio en el clima¡± que salpica a su actividad econ¨®mica en el entorno de la presa. ¡°No se han dado nunca estas situaciones, estamos a verlas venir, no sabemos qu¨¦ va a pasar¡±, asegura este c¨¢ntabro tras m¨¢s de 30 a?os ofreciendo rutas en canoa o descensos en rafting por el Ebro.

Para Mart¨ªnez y compa?¨ªas similares, la clave radica en el caudal veraniego, ya que si tiene fuerza atrae a miles de visitantes con ganas de adrenalina. ¡°El a?o pasado salvamos los muebles, este tenemos incertidumbre porque vivimos de lo que nieva en invierno y llena el pantano en verano¡±, explica el empresario, consciente de las circunstancias clim¨¢ticas venideras: ¡°O adaptarse o cerrar, las cosas vienen como vienen¡±.