El pa¨ªs demediado

El enconamiento del clima pol¨ªtico nacional ha tenido un cierto efecto movilizador en las elecciones europeas. Casi la mitad del censo ¨D49,21%¡ª acudi¨® a las urnas, el mejor dato en unos comicios continentales que no coincidiesen con municipales ni auton¨®micas desde 1989, cuando Espa?a todav¨ªa estaba bajo la euforia de su reciente ingreso en el club. Aun as¨ª, lejos de la participaci¨®n habitual en cualquier otro tipo de elecciones.

Puestos a medirlo en t¨¦rminos plebiscitarios, la derecha ha obtenido una ...

El enconamiento del clima pol¨ªtico nacional ha tenido un cierto efecto movilizador en las elecciones europeas. Casi la mitad del censo ¨D49,21%¡ª acudi¨® a las urnas, el mejor dato en unos comicios continentales que no coincidiesen con municipales ni auton¨®micas desde 1989, cuando Espa?a todav¨ªa estaba bajo la euforia de su reciente ingreso en el club. Aun as¨ª, lejos de la participaci¨®n habitual en cualquier otro tipo de elecciones.

Puestos a medirlo en t¨¦rminos plebiscitarios, la derecha ha obtenido una leve victoria. Los cuatro partidos de ese espacio ¨DPP, Vox, Se Acab¨® la Fiesta y Ciudadanos¨D suman 8,5 millones de votos, el 49,08% del total, casi dos puntos y 330.000 m¨¢s que los reunidos por el bloque de formaciones que apoy¨® la investidura de Pedro S¨¢nchez. La oposici¨®n podr¨¢ decir que ha logrado imponerse al Gobierno, pero los datos dif¨ªcilmente sostendr¨¢n su tesis de que hay una clamorosa demanda popular para que S¨¢nchez deje La Moncloa.

En el campo progresista todo apunta a un cierto reagrupamiento de fuerzas en el PSOE y la agudizaci¨®n de la crisis en el espacio a su izquierda. Sumar ha coleccionado un nuevo batacazo, al quedar por debajo del 5%, con menos votos que la candidatura conjunta de las izquierdas nacionalistas perif¨¦ricas y casi empatado con el ultra conspiranoico Alvise P¨¦rez. Podemos podr¨¢ presumir de haber conseguido representaci¨®n en Estrasburgo, pero su 3,28% les conducir¨ªa muy probablemente al extraparlamentarismo en caso de unas elecciones generales. Por el contrario, en la derecha se abre un tercer espacio, aunque est¨¢ por ver si se consolida cuando lleguen convocatorias en las que los electores se han mostrado menos dispuestos a aventurarse con opciones ex¨®ticas.

En la eterna disputa que vive la pol¨ªtica espa?ola ¨DS¨¢nchez s¨ª, S¨¢nchez no¨D pocas novedades cabe esperar. Ni el Gobierno ha quedado noqueado ni la alternativa de Alberto N¨²?ez Feij¨®o se ha demostrado inviable. Lo que s¨ª parece claro es que el pa¨ªs est¨¢ fuertemente dividido en dos mitades, no necesariamente derecha-izquierda ¡ªel factor territorial es decisivo¡ª y que cualquier peque?o movimiento lo puede hacer inclinar de un lado o de otro. En julio, hacia S¨¢nchez. Este domingo, hacia quienes lo combaten.