12 de octubre: las dos Espa?as de una Espa?a
Los gritos desaforados contra Pedro S¨¢nchez se mezclan con la alegr¨ªa sencilla de quienes vienen al desfile de la Fiesta Nacional a disfrutar, igual que celebran la Eurocopa o la cabalgata de Reyes
Podr¨ªamos caer en la tentaci¨®n y abrazarnos a la an¨¦cdota. Quedarnos en el pu?ado de ruidosos que destacan en cualquier concentraci¨®n numerosa. Por ejemplo, el joven vestido de skin head, de apenas 20 a?os, emulando a Edward Norton en El club de la lucha y situado en una de las esquinas de la plaza de Neptuno. ¡°?Putos sociatas! ?Rojos de mieeeerrrrdaaaaa!¡±, gritaba ¨¦l y gritaba su gestualidad corporal. Sonre¨ªan el resto de las personas de su alrededor, algunos de ellos ejerciendo de nietos de la se?ora que aullaba y que se convirti¨® en viral durante una concentraci¨®n ...
Podr¨ªamos caer en la tentaci¨®n y abrazarnos a la an¨¦cdota. Quedarnos en el pu?ado de ruidosos que destacan en cualquier concentraci¨®n numerosa. Por ejemplo, el joven vestido de skin head, de apenas 20 a?os, emulando a Edward Norton en El club de la lucha y situado en una de las esquinas de la plaza de Neptuno. ¡°?Putos sociatas! ?Rojos de mieeeerrrrdaaaaa!¡±, gritaba ¨¦l y gritaba su gestualidad corporal. Sonre¨ªan el resto de las personas de su alrededor, algunos de ellos ejerciendo de nietos de la se?ora que aullaba y que se convirti¨® en viral durante una concentraci¨®n promovida por el PP contra la ley de amnist¨ªa y contra el Gobierno.
Tambi¨¦n podr¨ªamos pensar que todos los que han acudido esta ma?ana al desfile por el d¨ªa de la Fiesta Nacional son como el se?or con cabellera canosa y rostro entra?able que se acerc¨® a un grupo de cuatro quincea?eras que llevaban la bandera pintada en el rostro, les hizo entrega de un folleto y les dijo: ¡°Queremos crear una secci¨®n femenina, pero es que nos hacen falta chicas, solo vienen chicos. Venga, a divertirse¡±.
Podr¨ªamos quedarnos en los gritos de ¡°Felipe, reacciona, te quitan la corona¡±, ¡°que te vote Txapote¡±, ¡°Puigdemont a prisi¨®n¡± o el cl¨¢sico de ayer, hoy y siempre ¡°Pedro S¨¢nchez, hijo de puta¡±. ¡°Se lo digo cuando estoy en mi casa, ?no se lo voy a decir aqu¨ª!¡±, gritaba un se?or mientras su esposa, sujetando un paraguas rojigualdo de El Toro televisi¨®n, le miraba con arrobo.
Este s¨¢bado hab¨ªa decenas, centenares de j¨®venes poblando la concentraci¨®n, todos con las ojeras de haber dormido poco. ¡°Menos mal que tengo una barbaridad de katiuskas¡±, dec¨ªa una de ellas. ¡°Eres la primera persona a la que escucho decir katiuskas en mucho tiempo¡±, respond¨ªa otro. ¡°Es que mi familia es del norte¡±, respondi¨® la primera. Han quedado con una amiga que ¡°nunca falla a este tipo de cosas¡±, dijo una tercera.
Hab¨ªa ¨¢nimo de grito, de desahogo. Parec¨ªa haber ¨¢nimo de revancha, de furia: ¡°S¨¢nchez, la hora¡±, ¡°Robles, la hora¡±, ¡°Marlaska, la hora¡±, ¡°?esa puntualidad, cabrones!¡±. La capacidad pulmonar de algunos, en este caso un se?or en manga corta encaramado a una de las estatuas cercanas a Neptuno, es prodigiosa.
Pero no todo el mundo estaba enfadado. Tambi¨¦n hab¨ªa fiesta, alegr¨ªa. Mucha. Otra Espa?a dentro de esta. Estaban esas familias a las que crees haber visto celebrando la Eurocopa de hace unos meses, la cabalgata de Reyes, Halloween y la romer¨ªa del pueblo, esos que destilan felicidad tras haber arrasado en las tiendas de Gran V¨ªa por muy pocos euros, ciudadanos tan dem¨®cratas como el resto a los que les hace ilusi¨®n ver un tanque, un cami¨®n de bomberos y un pastor belga m¨¢s erguido que cualquier capit¨¢n general de los ej¨¦rcitos, que gritan ¡°viva Espa?a, viva la Guardia Civil y la Virgen del Pilar¡± y que luego acaban tomando el aperitivo.
Estaban todos ellos, y m¨¢s. Turistas grabando v¨ªdeos, haciendo frente a la lluvia. Vendedores de banderas y de paraguas. Despistados, curiosos con la sonrisa en la cara. Periodistas poni¨¦ndose la mascarilla porque no quieren salir en seg¨²n qu¨¦ videos. El aplauso atronador de todo el mundo cuando a las 11.40 de la ma?ana el cielo de Madrid se ha abierto para dar paso a toda el agua del mundo.
Hoy es un gran d¨ªa para mucha gente, pero sobre todo para las tiendas a pie de calle que desde bien temprano han hecho caja con los chubasqueros, capas, ponchos, lo que sea que amortig¨¹e la lluvia. No ha sido tan buen d¨ªa para las alcantarillas de Madrid, sometidas a un test de estr¨¦s cuando jarrea. Spoiler: otro suspenso rotundo.
¡°Bueno, esto ya est¨¢, ?no? No se ve nada, v¨¢monos al Sephora¡±, ordenaba una adolescente a su grupo. Hoy es 12 de octubre. Dos Espa?as unidas por una. Cada uno canalizando la alegr¨ªa como quiere.