La esperanza de encontrar a los 16 desaparecidos de la dana se apaga
Diecisiete d¨ªas despu¨¦s de la cat¨¢strofe, muchas familias siguen buscando a sus seres queridos. Francisco Ruiz, que salv¨® a sus nietos subi¨¦ndolos al techo del coche, es una de la v¨ªctimas no localizadas
Samuel Ruiz pasa cada d¨ªa desde el pasado 29 de octubre pegado al m¨®vil, esperando una llamada. Cada d¨ªa consulta la cuenta de SOS Desaparecidos que en redes sociales va actualizando los casos de v¨ªctimas de la dana que han sido encontradas. Los d¨ªas siguientes a la cat¨¢strofe que arras¨® varios municipios de la provincia de Valencia, muchos de esos desaparecidos eran hallados con vida. Con el paso de los d¨ªas, esa posibilidad se h...
Samuel Ruiz pasa cada d¨ªa desde el pasado 29 de octubre pegado al m¨®vil, esperando una llamada. Cada d¨ªa consulta la cuenta de SOS Desaparecidos que en redes sociales va actualizando los casos de v¨ªctimas de la dana que han sido encontradas. Los d¨ªas siguientes a la cat¨¢strofe que arras¨® varios municipios de la provincia de Valencia, muchos de esos desaparecidos eran hallados con vida. Con el paso de los d¨ªas, esa posibilidad se ha ido evaporando y ahora lo que aparecen, con cuentagotas ya, son cad¨¢veres. Samuel lo sabe. Desde hace 17 d¨ªas ha esperado que alguien le llame y le diga algo de su padre, Francisco Ruiz Mart¨ªnez, que esa tarde fat¨ªdica conduc¨ªa su coche en Monserrat, acompa?ado de sus dos nietos, los sobrinos de Samuel. El torrente de agua les cogi¨® de imprevisto y arrastr¨® el veh¨ªculo contra una palmera. Francisco, de 64 a?os, tuvo que romper los cristales para sacar a los peque?os, de 10 y cinco a?os, y ponerlos a salvo en el techo. Cuando ¨¦l se iba a subir, resbal¨® y se lo llev¨® la corriente. Los ni?os fueron rescatados con vida dos horas m¨¢s tarde. De ¨¦l no volvi¨® a saberse nada. Es una de las 16 personas que siguen en la lista de desaparecidos.
¡°El estado an¨ªmico conforme han ido pasando los d¨ªas ha ido a peor¡±, cuenta por tel¨¦fono Samuel, de 28 a?os. Su hermana Saray ¡ª la madre de los dos ni?os ¡ª estuvo los primeros d¨ªas a pie de calle en Monserrat junto con voluntarios, bomberos y miembros de cuerpos de seguridad, peinando el terreno, buscando en barrancos, en los campos, en el r¨ªo. ¡°Lo que los ciudadanos podemos hacer, que es buscar en las zonas m¨¢s accesibles, sin medios, ya se ha hecho; desde que desapareci¨® mi padre los vecinos y los voluntarios han ido all¨ª a ayudar y a buscar desaparecidos; toda esa gente ya ha hecho su labor¡±, afirma ¨¦l. El espacio para familiares, vecinos y amigos se ha ido cerrando. ¡°Ahora hay que dejar que se encarguen las autoridades, que son las que tienen los medios¡±, asume.
¡°Han sido d¨ªas de incertidumbre¡±, prosigue Samuel. Aunque no lo quiera, cada nueva noticia de una persona desaparecida cuyo cad¨¢ver es identificado la siente como ¡°un jarro de agua fr¨ªa¡±. Y lamenta: ¡°Si no ha aparecido antes, hay m¨¢s probabilidad de que si aparezca ahora est¨¦ ya fallecido¡±.
Saray pas¨® toda la primera semana tras la dana en Monserrat, un municipio de 7.000 habitantes al sur de Valencia. Pero luego el resto de la familia la convenci¨® para salir de all¨ª, porque el pueblo estaba sin luz y sin agua. La familia afirma que de esa triada de municipios de la zona ¡ªMonserrat, Montroy y Real ¡ª no sali¨® informaci¨®n durante d¨ªas. Se pensaba que all¨ª no hab¨ªa habido fallecidos o desaparecidos. Fue por contactos que hac¨ªa ella sobre el terreno como logr¨® que un pu?ado de bomberos buscaran a su padre durante uno o dos d¨ªas. Lo mismo con miembros de la UME otro par de d¨ªas. Despu¨¦s, ellos se iban a otras localidades tambi¨¦n castigadas por la dana y con decenas de desaparecidos. Ha habido incluso miembros de cuerpos de seguridad que han ido de voluntarios, sin uniforme, a echar una mano. El caso ahora, cree la familia, lo tiene en el radar la Guardia Civil, que es la ¨²ltima entidad que se ha puesto en contacto con ellos. ¡°Nos han contactado preguntando si alguna prenda que han encontrado ellos era de mi padre; de momento no tenemos nada m¨¢s de informaci¨®n¡±, resume Samuel.
Francisco Ruiz es una de las 16 personas que hasta este viernes siguen desaparecidas por la dana del 29 de octubre, que mat¨® al menos a otras 216 en la provincia de Valencia (adem¨¢s de a siete personas en dos municipios de Castilla-La Mancha y otra en M¨¢laga). Su familia sigue sin un cuerpo al que velar, enterrar y llevarle flores. Han visto c¨®mo desde la primera semana de noviembre la cifra de desaparecidos, que inicialmente se situ¨® en 93 casos, ha venido disminuyendo, a medida que los cad¨¢veres que permanec¨ªan en la morgue iban siendo identificados. De Francisco, ni una se?al.
En el caso de la familia Vicent Vidal, el duelo est¨¢ a medias. Esa tarde de la tragedia desaparecieron en Pedralba padre e hija, Jos¨¦ Javier y Susana; ella, de 30 a?os y con s¨ªndrome de Down. Susana fue encontrada sin vida hace una semana. De ¨¦l todav¨ªa no hay rastro. Susana Vidal, esposa de ¨¦l y madre de ella, espera todav¨ªa una respuesta.