El oscuro giro al final feliz de una desaparici¨®n de 20 a?os
El hombre de Bilbao que hab¨ªa permanecido alejado de su familia durante dos d¨¦cadas hab¨ªa sido retenido contra su voluntad por una familia de feriantes
En pasado marzo, la Guardia Civil comunic¨® que hab¨ªa localizado en Caparroso (Navarra) a un hombre de 69 a?os que llevaba desaparecido desde 2003. El var¨®n, originario de Bilbao, cont¨® que resid¨ªa con una familia de feriantes y que llevaba 17 a?os recorriendo el norte de Espa?a. El cuerpo policial le buscaba desde 2009 ¨Dla familia denunci¨® su desaparici¨®n seis a?os despu¨¦s de haber tenido el ¨²ltimo contacto directo con ¨¦l¨D. La prime...
En pasado marzo, la Guardia Civil comunic¨® que hab¨ªa localizado en Caparroso (Navarra) a un hombre de 69 a?os que llevaba desaparecido desde 2003. El var¨®n, originario de Bilbao, cont¨® que resid¨ªa con una familia de feriantes y que llevaba 17 a?os recorriendo el norte de Espa?a. El cuerpo policial le buscaba desde 2009 ¨Dla familia denunci¨® su desaparici¨®n seis a?os despu¨¦s de haber tenido el ¨²ltimo contacto directo con ¨¦l¨D. La primera prueba de vida lleg¨® en 2013, cuando un equipo del Centro Nacional de Desaparecidos (CNDES) detect¨® que el hombre hab¨ªa renovado su DNI, cobraba una pensi¨®n y sol¨ªa realizar dos retiradas de efectivo al inicio de cada mes en una sucursal bancaria ubicada en Caparroso, donde dispon¨ªa de una cuenta corriente. En todo este tiempo, el hombre no se hab¨ªa puesto en contacto con su familia biol¨®gica. Los agentes de la Guardia Civil lo encontraron y accedi¨® a reencontrarse con su hija. Lo que parec¨ªa una historia con un final feliz, se ha descubierto como una trama mucho m¨¢s oscura. El cuerpo policial ha detenido a cuatro personas de la familia con la que convivi¨® por los delitos de trata de seres humanos con fines de explotaci¨®n laboral, pertenencia a organizaci¨®n criminal y defraudaci¨®n de fluido el¨¦ctrico. La investigaci¨®n contin¨²a abiertas y no se descartan m¨¢s detenciones.
Cuando a principios de a?o los investigadores descubrieron que el var¨®n cobr¨® una serie de ayudas p¨²blicas ¨Dla prestaci¨®n por desempleo, la pensi¨®n¨D, tambi¨¦n se dieron cuenta de que era otra persona y no ¨¦l quien se desplazaba al cajero del municipio para retirar el dinero. Fue la primera sospecha. La segunda lleg¨® tras el reencuentro entre el desaparecido y su hija. Seg¨²n narran desde el cuerpo policial, el hombre ¡°expres¨® su deseo de irse a vivir con ella y abandonar la familia con la que conviv¨ªa, ya que le ten¨ªan como un esclavo¡± e imped¨ªan las visitas de su hija a la vivienda donde resid¨ªa. Todo ello llevo a los investigadores a lanzar una nueva operaci¨®n, bautizada Lucendi, al sospechar que podr¨ªa tratarse de una v¨ªctima de trata de seres humanos.
En el transcurso de la investigaci¨®n han descubierto que el hombre no ten¨ªa acceso a su tarjeta sanitaria ni a su DNI y desconoc¨ªa que hab¨ªa estado percibiendo una prestaci¨®n econ¨®mica a su nombre durante a?os. En total, los detenidos se habr¨ªan beneficiado de m¨¢s de 100.000 euros pertenecientes a la v¨ªctima. Adem¨¢s, el hombre cont¨® que se sent¨ªa ¡°amedrentado por el trato agresivo de algunos miembros del clan familiar¡±. Seg¨²n su relato, le obligaban a ¡°despertarse media hora antes que el resto para encender la lumbre, poner lavadoras, doblar ropa y realizar tareas de limpieza¡±. Tambi¨¦n se encargaba de la limpieza, mantenimiento y supervisi¨®n de las atracciones infantiles durante los desplazamientos a las diferentes ferias, y todo ello sin percibir remuneraci¨®n alguna. Por otro lado, ¡°no ten¨ªa acceso libre a la comida o a la bebida y le obligaban a comer separado del resto¡±, con una alimentaci¨®n basada, fundamentalmente, en bocadillos.
Sus condiciones de vida eran p¨¦simas, describen desde el cuerpo policial. ¡°Dorm¨ªa en la cabeza tractora del cami¨®n vivienda durante el periodo ferial, ten¨ªa prohibido el acceso a las habitaciones del remolque de la familia, excepto para realizar su limpieza¡±, relatan. En este remolque exist¨ªa un ba?o para el uso exclusivamente del clan familiar, por lo que la v¨ªctima ten¨ªa que ducharse en la v¨ªa p¨²blica con una manguera del cami¨®n y tambi¨¦n hac¨ªa sus necesidades en un lugar apartado de la calle. Dado que los detenidos tienen una vivienda en Portugal, sol¨ªan pasar algunas temporadas all¨ª. En esos periodos, ¡°la v¨ªctima dorm¨ªa en el garaje sobre un colch¨®n, no ten¨ªa acceso a la televisi¨®n ni al tel¨¦fono ni permiso para salir sin ser acompa?ado, salvo para realizar recados puntuales o comprar con el dinero justo, justificando el gasto con un ticket de compra¡±.
Un ¨¢lbum de fotos, un despertador y un portafolios
La Guardia Civil registr¨® este mi¨¦rcoles dos domicilios y un cami¨®n vivienda estacionado en Caparroso. En los registros han intervenido m¨¢s de 120.000 euros en efectivo, la cartilla bancaria de la v¨ªctima, resguardos de solicitud de distintas prestaciones a su nombre y otros efectos personales como fotos familiares, pulsera sanitaria o ropa. Los investigadores han detallado, como indicadores de que se encontraba en una situaci¨®n de trata, que la documentaci¨®n de la v¨ªctima estaba bajo llave y en poder de uno de los detenidos y que dorm¨ªa en una habitaci¨®n con unas condiciones ¡°insalubres y deplorables¡±. Esta habitaci¨®n, explican, no ten¨ªa nada que ver con el resto de las estancias donde habitaba la familia y sus pertenencias se limitaban a un antiguo ¨¢lbum de fotos de sus hijos, un despertador y un portafolios. ¡°La v¨ªctima ten¨ªa una dependencia total de la organizaci¨®n criminal¡±, detallan. Eran ¡°quienes le daban de comer o le donaban en ocasiones ropa¡±. Tampoco ten¨ªa contacto con el exterior porque la residencia se hallaba en una zona apartada y ten¨ªa que usar un veh¨ªculo para estar en contacto con otros habitantes de la localidad.
La investigaci¨®n ha sido llevaba a cabo por la Unidad Org¨¢nica de Polic¨ªa Judicial (UOPJ) de Bizkaia, y est¨¢ siendo dirigida por el Juzgado de 1? Instancia e Instrucci¨®n n?1 de Tafalla (Navarra) y la Fiscal¨ªa de la Comunidad Foral de Navarra.