Las nuevas vidas del patrimonio de los narcos

Iyi Mart¨ªn dirige desde hace 20 a?os la subasta de bienes incautados por el Estado a los narcotraficantes, que se celebra en la Real Casa de la Moneda, en Madrid, y cuyos fondos gestionar¨¢ el Plan Nacional sobre Drogas. En el sal¨®n de actos de esa fortaleza racionalista de granito que hizo c¨¦lebre la serie de Netflix La Casa del Papel, y donde, por motivos de seguridad, no se permite tomar fotograf¨ªas ni grabar, Mart¨ªn, como los subastadores de las casas privadas y las pel¨ªculas, anima, con buena dosis de labia, a los postores a elevar sus pujas y adjudica con la cl¨¢sica cuenta hasta tr...

Iyi Mart¨ªn dirige desde hace 20 a?os la subasta de bienes incautados por el Estado a los narcotraficantes, que se celebra en la Real Casa de la Moneda, en Madrid, y cuyos fondos gestionar¨¢ el Plan Nacional sobre Drogas. En el sal¨®n de actos de esa fortaleza racionalista de granito que hizo c¨¦lebre la serie de Netflix La Casa del Papel, y donde, por motivos de seguridad, no se permite tomar fotograf¨ªas ni grabar, Mart¨ªn, como los subastadores de las casas privadas y las pel¨ªculas, anima, con buena dosis de labia, a los postores a elevar sus pujas y adjudica con la cl¨¢sica cuenta hasta tres los lotes que se van sucediendo. Es 27 de noviembre, y hoy sale a la venta una veintena de propiedades, algunas muy especiales.

Desde que la polic¨ªa pone las esposas a los narcos, y se ven las im¨¢genes de coches de lujo en hilera, viviendas exclusivas o fajos de billetes, hasta que el Estado puede disponer de todo ese patrimonio intervenido judicialmente pueden pasar hasta diez a?os. Antes, tiene que haber una sentencia firme, y el Gobierno pugna con los abogados de los condenados, que tratan de evitar que les arrebaten los bienes. El dinero, las casas y las embarcaciones son lo que m¨¢s le duele perder al crimen organizado. Sin esos recursos, no pueden seguir con la actividad delictiva, ni ir por delante de los investigadores; por eso es tan importante localizarlos, all¨¢ donde est¨¦n, y que se demuestre que provienen de los beneficios del narcotr¨¢fico.

Viviendas en San Sebasti¨¢n, Benalm¨¢dena o Vilagarc¨ªa de Arousa, algunas de lujo, otras m¨¢s corrientes, forman parte de la subasta. Antes de empezar las pujas, el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Joan Ram¨®n Villalb¨ª, explica a los asistentes que las viviendas vienen del fondo de bienes decomisados por tr¨¢fico de drogas, y que, con su venta, se quiere enviar el mensaje de que la sociedad se beneficia de la lucha contra el narcotr¨¢fico.

Cada a?o, el Plan Nacional sobre Drogas, dependiente del Ministerio de Sanidad, gestiona entre 22 y 28 millones de euros que han llegado a las cuentas del Estado despu¨¦s de la condena de los procesados por narcotr¨¢fico y otros delitos relacionados. En 2024 la cantidad baj¨® a 20 millones, creen que por el par¨®n judicial de la pandemia. La imposibilidad de celebrar subastas presenciales tambi¨¦n ha hecho que se acumulen joyas, veh¨ªculos o embarcaciones, algo a lo que est¨¢n intentando poner remedio con la celebraci¨®n de subastas online. La gesti¨®n de ese patrimonio facilita que ese dinero y esos bienes tengan nuevas vidas en beneficio de la sociedad.

Ante la mirada del notario Antonio P¨¦rez-Coca, durante dos horas, los bienes del narcotr¨¢fico se van presentando ante los asistentes, que han tenido la oportunidad de examinarlos previamente a trav¨¦s de la Sociedad Mercantil de Gesti¨®n Inmobiliaria (Segipsa), del Ministerio de Hacienda, encargada de organizar la subasta, y tambi¨¦n de tasar y fijar el precio de salida de las propiedades.

Un piso de Marcial Dorado en Sese?a

La posibilidad de conseguir una vivienda a buen precio es lo que atrae a muchos de los interesados a la subasta. Siham, de 35 a?os y madre de tres hijos de 17, 14 y 6 a?os, se emociona al lograr el lote 17, un piso de 121 metros cuadrados en Sese?a (29.000 habitantes, Toledo). Esta vivienda fue decomisada, como otras muchas de las propiedades por las que se puja hoy, al narcotraficante gallego Marcial Dorado, conocido, adem¨¢s de por su actividad de contrabando, primero de tabaco y luego de droga, por las fotos en su yate en los a?os 90 con el ahora l¨ªder del PP, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, en la r¨ªa de Vigo.

¡°Quer¨ªa una vivienda por Madrid, pero no hab¨ªa ninguna¡±, explica Siham, que trabaja en un supermercado, y a la que le ha resultado ¡°imposible¡± hasta ahora plantearse ser propietaria por los precios del mercado. Al final, por proximidad, opt¨® por el piso de Toledo, y se lo adjudicaron por 195.000 euros, que pagar¨¢ con una hipoteca. Los tr¨¢mites para entrar en la casa no terminar¨¢n hasta abril, con la firma y la entrega de llaves. En caso de que un comprador no formalice los tr¨¢mites, los dos siguientes mejores postores tendr¨¢n la opci¨®n de llevarse el bien por el precio por el que pujaron.

A escasos metros de ellas, tambi¨¦n aguardando para el papeleo, Julio, otro comprador que pide ocultar su verdadero nombre, explica los detalles de su lote, una casa de 163 metros cuadrados en Vilagarc¨ªa de Arousa (37.000 habitantes, Pontevedra) muy cerca de la playa y con una parada de autob¨²s en la puerta. Comprar¨¢ la vivienda, que part¨ªa de 152.000 euros, por 260.000. ¡°Puede necesitar unas obras de 80.000 euros, m¨¢s los impuestos, al final es precio de mercado¡±, afirma.

Germ¨¢n, de 27 a?os, se va con las manos vac¨ªas. Vio en el portal Idealista un anuncio de la subasta y se le ocurri¨® probar, tambi¨¦n ¡°como inversi¨®n¡±, en la puja del lote 18, un apartamento de 45 metros cuadrados en El Rosario (Santa Cruz de Tenerife). Al final se retir¨® porque el precio subi¨® mucho. Con un amigo, espera en la fila para solicitar la devoluci¨®n de los 9.500 euros que present¨® como fianza, el 10% del precio de salida en la subasta. ¡°Antes ven¨ªan m¨¢s empresas, subasteros, ahora se nota que hay m¨¢s particulares¡±, explica una de las personas que vigilan en la sala.

La Segipsa controla que se cumpla la normativa de prevenci¨®n de blanqueo. Uno de los lotes se retir¨® porque el Ayuntamiento de A Illa de Arousa ¡ªdonde naci¨® y sigue viviendo Dorado¡ª estaba interesado en adquirirlo y otros quedaron ¡°hasta la pr¨®xima ocasi¨®n¡± porque nadie se interes¨®. La subasta termina con una recaudaci¨®n de 3,6 millones. Sin embargo, ese dinero no llega al fondo inmediatamente. De momento, queda ingresada la reserva de los compradores que adquirieron alg¨²n alg¨²n lote: 102.988 euros.

¡°Es importante, primero, que [ese bien] no se lo queden los narcotraficantes. Y segundo, que el valor de lo que podamos sacarle revierta a la sociedad, en una buena direcci¨®n¡±, detall¨® Villalb¨ª a EL PA?S, d¨ªas antes de la subasta. La posibilidad de que un lote regrese a un delincuente no es una fantas¨ªa. Dos d¨ªas antes de ser detenido, en febrero de 2018, la polic¨ªa grab¨® a Sito Mi?anco, el hist¨®rico narco de Cambados (Pontevedra), dici¨¦ndole a uno de sus hombres de confianza que deb¨ªan estar preparados para ir a las subastas y comprar unos astilleros, un piso y un chal¨¦, para recuperarlos para la organizaci¨®n. La conversaci¨®n sali¨® a la luz en el juicio que se celebra en la Audiencia Nacional desde el 18 de noviembre y en el que se sientan en el banquillo medio centenar de personas por blanqueo y narcotr¨¢fico.

?Podr¨ªa Marcial Dorado volver a comprar los frutos de su delito? En principio, no. ¡°En el reglamento y en la ley del fondo hay una serie de cautelas por las que [las personas a quienes se les decomisaron] no pueden optar¡±, explica Villalb¨ª. ¡°Otra cosa es que a trav¨¦s de un testaferro nos la cuelen, bueno, pues igual lo hacen. En principio est¨¢n fuera, igual que los funcionarios que intervienen¡±, detalla. ¡°Para m¨ª es muy bonito cuando, despu¨¦s de la subasta, quedamos con el notario y quien se ha quedado una casita o un piso es una pareja reci¨¦n casada. Lo he vivido repetidamente y me emociona¡±, subraya el delegado del Plan Nacional sobre Drogas.

En los casi 30 a?os que la Delegaci¨®n del Gobierno del Plan Nacional sobre Drogas lleva gestionando los bienes decomisados ha administrado propiedades simb¨®licas, como el Pazo de Bai¨®n (Pontevedra), que en los a?os 90 se convirti¨® en referente de la lucha contra el blanqueo de dinero procedente del narcotr¨¢fico y que fue intervenido a Laureano Oubi?a. Las asociaciones de madres contra la droga se movilizaron durante a?os para que se destinara a centro de tratamiento para toxic¨®manos. No lo consiguieron. Finalmente se adjudic¨® por 15 millones en 2008 a la Cooperativa Condes de Albarei junto con un proyecto para integrar a personas en rehabilitaci¨®n y con el compromiso de reinvertir un 5% de sus beneficios en asociaciones de lucha contra la droga. Tras cumplir con su obligaci¨®n, en 2024 se firm¨® la liquidaci¨®n.

Nuevas subastas ¡®online¡¯

El fondo gestiona cantidades en efectivo, que llegan en cuentas o ¡°en maletas¡± llenas de billetes, pero tambi¨¦n inmuebles, veh¨ªculos, aviones, embarcaciones o joyas. El montante de cada ejercicio depende del n¨²mero de sentencias firmes y de la habilidad para convertir los bienes en efectivo. En los ¨²ltimos a?os ha bajado sin que tengan una explicaci¨®n clara. ¡°No sabemos si es por secuelas de la pandemia, por el frenazo judicial¡±, considera Villalb¨ª. En 2023 manejaron 28 millones y en 2024, este a?o 20 millones. Una de las novedades de 2024, con las que buscan dar salida con mayor agilidad a los bienes acumulados, son las subastas online de veh¨ªculos, embarcaciones, joyas o relojes, un modelo que idearon tras el par¨®n que supuso la pandemia. ¡°Estamos muy contentos con estas experiencias¡±, explica el delegado.

Alrededor de un 60% del dinero del fondo se dedica a prevenir el consumo de drogas, financiando programas de comunidades aut¨®nomas, ayuntamientos u ONG. Entre un 30% y 35% se destina a ayudar a la persecuci¨®n del narcotr¨¢fico, con partidas para la mejora de equipamientos de la Polic¨ªa, la Guardia Civil o el Servicio de Vigilancia Aduanera o para la financiaci¨®n del transporte y la destrucci¨®n de la droga. Un 5% va a la gesti¨®n del fondo: para abonar el coste de subastas, pagos a las comunidades de propietarios de los bienes intervenidos, o para los dep¨®sitos de esos veh¨ªculos o maquinarias.

Enajenar esos bienes lleva muchos tr¨¢mites, incluso cuando hay sentencia firme. Hay casos en los que el fondo renuncia a ellos porque no les pueden sacar beneficio, por ejemplo, un veh¨ªculo cuyo dep¨®sito cuesta m¨¢s que el valor del coche, y otros, como los m¨®viles, que son m¨¢s de la mitad de los objetos intervenidos, que terminan destruy¨¦ndose por protecci¨®n de datos. En 2023, abandonaron 46 embarcaciones porque no ten¨ªan valor econ¨®mico y se mandaron destruir. La distribuci¨®n geogr¨¢fica de los decomisos no es uniforme. Andaluc¨ªa es la comunidad con mayor n¨²mero, 18.535 entre 1996 y 2023, seguida de la Comunidad de Madrid (6.935) y Comunidad Valenciana (2.951). Catalu?a y Canarias les siguen con 2.600 aproximadamente.

Para el reparto del fondo se sientan en una mesa de coordinaci¨®n los representantes de los ministerios de Interior, Justicia o Hacienda, adem¨¢s de los del Plan Nacional sobre Drogas. Cada cual expone sus necesidades y acuerdan una distribuci¨®n en la que tambi¨¦n entran en juego las comunidades, que reciben transferencias presupuestarias, y corporaciones locales o entidades privadas sin fines de lucro. En 2023 se destinaron 16,5 millones a reducci¨®n de la demanda y casi 10 millones al control de la oferta, es decir, a la persecuci¨®n del narcotr¨¢fico.

Andaluc¨ªa, por ejemplo, recibi¨® medio mill¨®n de euros para mantener centros de encuentro y acogida para consumidores en riesgo de exclusi¨®n. En Castilla y Le¨®n se dedicaron otros 424.000 a integraci¨®n social y laboral de drogodependientes. Organizaciones como la Fundaci¨®n Salud y Comunidad sufragan con 72.000 euros de esos fondos un programa llamado En plenas facultades, creado hace 25 a?os, con el que forman a universitarios para que asesoren a sus compa?eros sobre drogas y sexualidad. ¡°Tienen dos objetivos posibles: uno, intentar fomentar el m¨ªnimo consumo posible, o el no consumo; y otro, que en caso de consumir, reduzcamos los riesgos y los da?os que puede ocasionar¡±, explica Otger Amatller, coordinador del departamento de prevenci¨®n de esta fundaci¨®n. La actividad se organiza en 11 universidades en seis comunidades (Madrid, Euskadi, Arag¨®n, Catalu?a, Comunidad Valenciana y Murcia). Forman a 20-25 alumnos por cada universidad durante 25 horas, por lo que reciben un cr¨¦dito para sus estudios, y luego les acompa?an en acciones en el campus, en forma de juegos o din¨¢micas. ¡°Trabajan el consumo de alcohol en fiestas, a veces sexualidad y drogas¡±, detalla Amatller.

En la lucha para erradicar la oferta, el Ministerio del Interior se lleva las mayores asignaciones para materiales que necesitan Polic¨ªa y Guardia Civil, como sistemas de inform¨¢tica, telecomunicaciones, o para la financiaci¨®n del transporte y la destrucci¨®n de la droga, de la que se encargan en el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO). El dinero tambi¨¦n sirve para sufragar acuerdos de colaboraci¨®n entre ministerios que permiten, por ejemplo, el abordaje de un pesquero cargado de coca¨ªna con un buque de Defensa o la compra de material que detecte la entrada de droga en centros penitenciarios. En los ¨²ltimos a?os, se ha destinado a financiar parcialmente la compra de un helic¨®ptero y de patrulleras del Servicio de Vigilancia Aduanera, o para sufragar reuniones de los fiscales espa?oles antidroga con sus hom¨®logos iberoamericanos. De esta forma, y de otras muchas, parte del dinero o los bienes que se intervinieron en una operaci¨®n policial contra el narco terminan facilitando que se organice la siguiente.