¡°Este mes he cobrado la mitad¡±

¡°Este mes he cobrado la mitad. Por suerte tenemos para vivir y podr¨¦ aguantar pero seguro que hay gente en una situaci¨®n delicada¡±. David Torres, de 41 a?os, soldador de una f¨¢brica de acero en Vilanova del Cam¨ª, uno de los cuatro municipios de la Conca de ?dena confinados hasta ayer, cuenta como su n¨®mina se ha desplomado de 1.500 a 750 euros mientras aguardaba a aclarar su situaci¨®n laboral. Cerca de 10.000 trabajadores ha visto sus derechos laborales alterados al no poder salir de la zona ni tampoco entrar por ...

¡°Este mes he cobrado la mitad. Por suerte tenemos para vivir y podr¨¦ aguantar pero seguro que hay gente en una situaci¨®n delicada¡±. David Torres, de 41 a?os, soldador de una f¨¢brica de acero en Vilanova del Cam¨ª, uno de los cuatro municipios de la Conca de ?dena confinados hasta ayer, cuenta como su n¨®mina se ha desplomado de 1.500 a 750 euros mientras aguardaba a aclarar su situaci¨®n laboral. Cerca de 10.000 trabajadores ha visto sus derechos laborales alterados al no poder salir de la zona ni tampoco entrar por la pandemia del coronavirus durante m¨¢s de 20 d¨ªas. ¡°Toda la situaci¨®n ha sido un desprop¨®sito. Han demostrado muy poca preocupaci¨®n por la gente¡±, dice Torres, que lamenta tanto la actuaci¨®n del Govern, que tom¨® el d¨ªa 13 una decisi¨®n sin prever el conflicto, como la del Gobierno, que la ha ratificado sin asumir las bajas por confinamiento.

Amparado en la evoluci¨®n de la pandemia, el Ejecutivo catal¨¢n anunci¨® ayer su deseo de levantar el confinamiento. El Ministerio de Sanidad tiene la competencia y nadie duda de que lo suscribir¨¢: hasta el Viernes Santo solo pueden prestar su servicio los trabajadores esenciales y despu¨¦s se ver¨¢. Pero los tiempos de las administraciones son m¨¢s lentos que los de las empresas. Radicada en La Torre de Claramunt, fuera de la zona cercada, la empresa de David Torres, como tantas otras, solicit¨® el mi¨¦rcoles un expediente de regulaci¨®n temporal de empleo (ERTE) por un mes para sus trabajadores confinados. La empresa tom¨® la decisi¨®n cuando vio que el decreto de alarma no tramitaba las bajas por confinamiento. David solo cobr¨® 13 d¨ªas de marzo y su n¨®mina sufri¨® un zarpazo.

Con unos de los ¨ªndices de mortalidad por coronavirus m¨¢s altos del mundo, la Conca de ?dena ha sufrido por partida doble la emergencia: el Govern la cerc¨® como si fuera un Berl¨ªn Occidental en plena Guerra Fr¨ªa en la que los trabajadores, salvo los esenciales, no pudieron cruzar los check points controlados por los Mossos. Y sin calcular que los ambulatorios, como le pas¨® a David y a cientos de empleados, no firmar¨ªan la baja. Los alcaldes de Igualada, Santa Margarita de Montbui, Vilanova del Cam¨ª y ?dena claman unidos por una soluci¨®n.

¡°La situaci¨®n es desesperante¡±, dice Noemi Trucharte, alcaldesa de Vilanova del Cam¨ª, del PSC, que admite que el ¨²ltimo decreto lleg¨® ¡°tarde y mal¡±. ¡°He hablado con ministros y con gente del PSOE para buscar soluciones¡±, explica para subrayar que entiende que el caso de ?dena puede sentar un precedente pero que es necesario tramitar las bajas. Tras admitir que el Ayuntamiento ha recibido cientos de llamadas de vecinos, la alcaldesa ha reforzado los servicios sociales al temer que la situaci¨®n se agrave. Con el 15%, Vilanova del Cam¨ª es uno de los municipios con m¨¢s paro de Catalu?a.

Dos sueldos recortados en una misma casa

David Camacho y Sheila son una pareja mileurista de Igualada y ha visto de golpe como en su casa entraban este mes 600 euros menos, un tercio de sus ingresos. Hasta el 12, iban a trabajar a Martorell a una empresa de transporte. Nunca les lleg¨® la baja por confinamiento y la empresa a los cinco d¨ªas firm¨® un ERTE. ¡°A m¨ª me tocar¨ªa la baja por accidente laboral y que me pagaran el 100%¡±, dice Camacho, impotente. ¡°Podemos tirar gracias a la paga extra pero esto no puede durar mucho m¨¢s¡±.

No todas las f¨¢bricas han impulsado ERTES. La firma Nonwovens, de Sant Quint¨ª de Mediona, que produce toallitas h¨²medas, ha mantenido la producci¨®n al 100% y ha abonado la n¨®mina con normalidad pese que 25 de sus empleados de ?dena no pudieron ir a trabajar hasta que no fueron considerados esenciales. La empresa ha realizado tests de coronavirus a todo ese grupo. ¡°Por miedo, muchos preferir¨ªan no ir a trabajar. Y otros de fuera de ?dena no quieren que vayamos¡±, admite Ra¨¹l Rodr¨ªguez, de 41 a?os, delegado, que dice que ha pasado los d¨ªas colgado al tel¨¦fono resolviendo dudas de sus compa?eros: ¡°He trabajado m¨¢s que nunca¡±, dice. ¡°No soy independentista pero el alcalde de Igualada lo est¨¢ haciendo bien. Mete ca?a¡±.

La inc¨®gnita es si las empresas retirar¨¢n ahora los ERTES despu¨¦s de que decaiga la frontera en ?dena. La realidad es que la confusi¨®n era tal que como dec¨ªa Alfonsa Santiesteban, de CC OO, muchos empleados depend¨ªan de la buena voluntad de la empresa para cobrar la n¨®mina completa mientras no se aclaraba el asunto de las bajas. Es el caso de V¨ªctor Fern¨¢ndez, empleado de una multinacional de telecomunicaciones en L¡¯Hospitalet. La empresa incluso le ha hecho una entrevista para distribuir por los canales internos. Antes del confinamiento, iba a coger un ordenador para teletrabajar. Ni ha podido volver ni le han enviado un port¨¢til porque en el per¨ªmetro solo entran mercanc¨ªas b¨¢sicas. La direcci¨®n ha reconvertido sus horas de ¡°absentismo" en una bolsa de tiempo a recuperar. El viernes acumulaba 130 horas. ¡°Es rid¨ªculo¡±, dice. ¡°Los derechos de los trabajadores esenciales no los tengo yo. La cuesti¨®n es: ?la empresa se cansar¨¢ de la actual situaci¨®n?".

¡°La Generalitat nos ha enredado. La gente est¨¢ muy enfadada: si no pod¨ªa conseguir (las bajas) no ten¨ªa que anunciar el confinamiento: que asuma las consecuencias", dice Carles Eguiburu, de 49 a?os, de Igualada, afectado por un ERTE en la empresa tur¨ªstica de Vic. ¡°Me dijeron que si lograba la baja laboral me sacaban de ¨¦l pero ha sido imposible¡±. Su sueldo ha quedado reducido a la mitad: ¡°Podemos tirar de ahorros pero s¨¦ de gente que vive al d¨ªa. No podr¨¢ resistir ni dos semanas¡±.

El confinamiento tambi¨¦n ha castigado a los aut¨®nomos. Llueve sobre mojado porque Robert Vidal, de 28 a?os, t¨¦cnico de sonido, no puede trabajar en el almac¨¦n que a veces le reclama: ¡°Y no he facturado nada desde febrero cuando se cancel¨® el Mobile¡±. Fina P¨¦rez, de 54 a?os, trabaja de cajera en Caprabo y fue recolocada en un super de Igualada. Desde este lunes, ha cruzado la ¡°frontera¡± y ha vuelto a su puesto en Capellades, delante, cuenta desolada, de una residencia donde han muerto 18 ancianos. ¡°Ha habido mucha pol¨ªtica. Muy lamentable¡±, afirma. La cuesti¨®n es que el Viernes Santo expira el permiso retributivo recuperable para los trabajadores no esenciales. Y los de ?dena, lo sean o no, ya son como todos.