¡°Nadie habla en este bus, todos est¨¢n en silencio¡±
Una conductora de TMB traslada a pacientes de coronavirus desde los hospitales a los Hotel Salud
Un autob¨²s con el r¨®tulo Queda¡¯t a casa gira por la calle de Josep Tarradellas y enfila la avenida de Sarri¨¤. Se para justo en la puerta del hotel Meli¨¤ Sarri¨¤, pero los pasajeros no bajan. Esperan a que les vengan a buscar. Son enfermos de coronavirus trasladados de la residencia del Vall d¡¯Hebron a ese establecimiento para pasar la cuarentena. Quien s¨ª baja de la cabina es la conductora, Rosa Maria Lirola, vestida con un mono blanco impoluto, un EPI con mascarilla y guantes.
Morena, sonriente, aguarda a que termine la operaci¨®n junto con Carlos Varela, el bombero que la acompa?...
Un autob¨²s con el r¨®tulo Queda¡¯t a casa gira por la calle de Josep Tarradellas y enfila la avenida de Sarri¨¤. Se para justo en la puerta del hotel Meli¨¤ Sarri¨¤, pero los pasajeros no bajan. Esperan a que les vengan a buscar. Son enfermos de coronavirus trasladados de la residencia del Vall d¡¯Hebron a ese establecimiento para pasar la cuarentena. Quien s¨ª baja de la cabina es la conductora, Rosa Maria Lirola, vestida con un mono blanco impoluto, un EPI con mascarilla y guantes.
Morena, sonriente, aguarda a que termine la operaci¨®n junto con Carlos Varela, el bombero que la acompa?a en el servicio. Ella es uno de los dos centenares de conductores de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) que desde la semana pasada son voluntarios. ¡°Est¨¢ claro que los autobuses podemos ayudar bastante y liberar a muchas ambulancias para otros servicios¡±, apunta. El mi¨¦rcoles de esta semana, Rosa Maria transport¨® a una treintena de pacientes en dos traslados: uno del hospital del Mar al hotel Princess y el segundo del Vall d¡¯Hebron al Meli¨¤ Sarri¨¤.
En su caso, ha optado por hacer el voluntariado en los d¨ªas en los que descansaba. El autob¨²s parece normal hasta que se observa de cerca. Es un veh¨ªculo midi, de 9 a 10 metros de longitud, a medio camino entre el minib¨²s y el convencional. Para aislar a la cabina, se ha levantado un panel con una parte transl¨²cida que deja ver al pasaje. ¡°Hay contacto cero con los enfermos¡±, a?ade.
Rosa no se lo pens¨® dos veces en apuntarse: ¡°Es que es algo muy heavy lo que est¨¢ pasando. Yo creo que todos tenemos que echar una mano, aunque luego el gobierno hace lo que hace, como conceder subvenciones a las televisiones privadas. Es que¡¡±, reniega. S¨ª que hubo, tambi¨¦n, una raz¨®n personal: ¡°Mi abuelo empez¨® a tener fiebre y nos asustamos y pens¨¦ que las ambulancias deb¨ªan estar para gente como ¨¦l y que el traslado de los leves lo pod¨ªamos hacer los autobuses¡±. Su abuelo se ha recuperado. Cuenta que le choca el silencio: ¡°Nadie habla en este autob¨²s. Todos est¨¢n en silencio. Tiene que ser muy duro. Est¨¢n solos y tampoco se conocen. A algunos se les ve algo nerviosos¡±, se lamenta.
Conductora de TMB desde hace tres a?os pero con m¨¢s experiencia como ch¨®fer de otras compa?¨ªas de autobuses, dice que otra cosa que le est¨¢ impactando es el cambio de Barcelona: ¡°Cero estr¨¦s, resulta incre¨ªble. Hasta estoy descubriendo cosas en la ciudad que no pod¨ªa ver porque vas absolutamente concentrada. Ahora puedes mirar porque hay muy poco tr¨¢fico y vas m¨¢s tranquila¡±.
Asegura que no tiene miedo a riesgo de contagio porque las medidas son estrictas. Los veh¨ªculos se someten al protocolo de limpieza y desinfecci¨®n que ya se aplica desde hace semanas en TMB. Al llegar a la cochera, en su caso la de la Zona Franca, tiene que ajustarse a un protocolo para quitarse el EPI y las botas que utilizan en el servicio: ¡°Cuando llegamos vamos a una zona en las que nos roc¨ªan de arriba abajo y tenemos que esperar 10 minutos para quitarnos el traje. Llevamos dos pares de guantes. Los de fuera est¨¢n unidos a las mangas del mono con cinta aislante, as¨ª que cuando te quitas el mono caen con ¨¦l y te quedas con los otros puestos. Adem¨¢s, nos ayudan en todas las maniobras¡±.
Mientras conversamos, todos los enfermos ya han abandonado el autob¨²s y ella regresa a la cochera sin saber si tendr¨¢ otra salida como voluntaria: ¡°Prolongan el servicio hasta el 26 de abril. Ojal¨¢ no hagamos falta porque eso indicar¨ªa que la cosa est¨¢ mejor¡±.
De ayudar a enfermos al autob¨²s
Nombre. Rosa Maria Lirola tiene 29 a?os y vive en Cornell¨¤.
Profesi¨®n. Ch¨®fer de autob¨²s de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB).
?C¨®mo ve¨ªa el voluntariado y la solidaridad antes de la crisis? De joven hab¨ªa sido voluntaria para ayudar en actividades con enfermos de Alzh¨¦imer.
?Qu¨¦ har¨¢ cuando acabe la crisis del coronavirus?> Estos d¨ªas se ha informado y ha visto que hay una plataforma de conductores solidarios. Buscar¨¢ m¨¢s datos. ¡°Igual me apunto¡±, se?ala.