¡°Nos miraban mal desde el inicio¡±

¡±Ya nos miraban mal desde el inicio¡±, dice Nina, que el martes denunci¨® en las redes sociales que hab¨ªa sido agredida por sus vecinos. Ella es una mujer transexual y vive con su pareja, tambi¨¦n mujer. No duda que su condici¨®n sexual est¨¢ detr¨¢s de la pelea, que le ha causado varios moratones y magulladuras, seg¨²n mostr¨® en las redes sociales. El altercado acab¨® con la intervenci¨®n de la Guardia Urbana y denuncias cruzadas por lesiones leves, seg¨²n fuentes policiales.

Ocurri¨® a las siete de la tarde, en el barrio de Font de¡¯n ...

¡±Ya nos miraban mal desde el inicio¡±, dice Nina, que el martes denunci¨® en las redes sociales que hab¨ªa sido agredida por sus vecinos. Ella es una mujer transexual y vive con su pareja, tambi¨¦n mujer. No duda que su condici¨®n sexual est¨¢ detr¨¢s de la pelea, que le ha causado varios moratones y magulladuras, seg¨²n mostr¨® en las redes sociales. El altercado acab¨® con la intervenci¨®n de la Guardia Urbana y denuncias cruzadas por lesiones leves, seg¨²n fuentes policiales.

Ocurri¨® a las siete de la tarde, en el barrio de Font de¡¯n Fargues, en el distrito de Horta-Guinard¨® de Barcelona. La Guardia Urbana acudi¨® alterada de lo ocurr¨ªa. El origen de la disputa, seg¨²n fuentes policiales, fue un problema de luz de uno de los pisos del inmueble que termin¨® con la agresi¨®n. Algo que Nina no niega, sin que eso desmienta que detr¨¢s de la agresi¨®n est¨¢ la transfobia. Y lo relata as¨ª: ¡°Llegamos a casa y vimos que no hab¨ªa luz dentro pero s¨ª hab¨ªa en la escalera y el vest¨ªbulo. Fui a ver qu¨¦ pasaba en los contadores y sali¨® un vecino muy agresivo gritando qu¨¦ estaba haciendo y enseguida empezaron los insultos ¡®maric¨®n de mierda¡¯ y los golpes. Enseguida vinieron otros dos y siguieron con los golpes. Mi pareja vino a ver que ocurr¨ªa y tambi¨¦n la emprendieron con ella. Yo acab¨¦ en el suelo y me llovieron patadas y pu?etazos en la cabeza y casi perd¨ª el conocimiento. Sent¨ª verdadero miedo¡±.

Asegura que los problemas de convivencia con el vecino de arriba empezaron enseguida de haberse instalado en el piso, hace un a?o. Nina, de 31 a?os, convive con su pareja, de 29. Cuenta que en alguna ocasi¨®n subieron a quejarse por el alto volumen de la m¨²sica que las molestaba: ¡°Hasta temblaban los cristales de casa¡±. Tambi¨¦n sospecha que en alguna ocasi¨®n les hab¨ªan pinchado el agua porque han tenido consumos muy altos ¡ªde 200 y 300 euros¡ª para lo habitual en una vivienda de una pareja.

¡°Hab¨ªa gritos y follones que nos molestaban pero si nos quej¨¢bamos nos amenazaban. Hemos intentado aguantar porque no pod¨ªamos ir a otro sitio y porque ten¨ªamos miedo¡±. Tambi¨¦n cuenta que algunas de esas situaciones de ruidos y m¨²sica a todo volumen las registr¨®. De la misma forma que colg¨® en Twitter im¨¢genes en las que aparece con la cara magullada a consecuencia de los golpes sufridos en el incidente del lunes pasado.

Con el parte de lesiones, contusiones y traumatismos especialmente en el rostro de Nina, la pareja se reuni¨® ayer con un abogado del Observatorio contra la Homofobia de Catalu?a (OCH) para que se encarguen de su representaci¨®n jur¨ªdica. Por ahora, al margen del atestado de la Guardia Urbana, no se ha presentado una denuncia formal a los Mossos. ¡°Hemos pasado dos noches horrorosas porque seguimos teniendo miedo¡±, a?ade Nina.

Fuentes del Observatorio confirmaron que estudiaban el caso de Nina y su pareja para enfocar el proceso. Del mismo modo, apuntaron que, con este caso, ya se han denunciado tres agresiones LGTBI f¨®bicas en Catalu?a en lo que va de a?o. Una tendencia que, aseguran, se ha acentuado desde el inicio de la pandemia: ¡°Se est¨¢ viviendo m¨¢s en las casas y se est¨¢n produciendo m¨¢s tensiones y agresiones¡±, se?alan desde el OCH.

En 2020, se registraron en Catalu?a un total de 189 denuncias por agresiones LGTBI. De ¨¦stas, 26 tuvieron como v¨ªctima a una persona trans, lo que representa un incremento de un 25% respecto a 2019. El Ayuntamiento de Barcelona, a trav¨¦s de la Oficina por la No Discriminaci¨®n, est¨¢ haciendo un acompa?amiento a las dos mujeres. En el caso de que decidiesen denunciar finalmente ante los Mossos d¡¯Esquadra, les apoyar¨ªan en el proceso. El Consistorio de Barcelona mantiene adem¨¢s la posibilidad de personarse como acusaci¨®n si hay una investigaci¨®n judicial que siga adelante.