Las cinco claves de la cita de ERC y Junts en la c¨¢rcel para pactar el Ejecutivo
Las dos comisiones se re¨²nen este martes en Lledoners para garantizar la presencia de Jordi S¨¤nchez, condenado en el juicio al ¡®proc¨¦s¡¯
Las comisiones negociadoras de Esquerra Republicana y Junts per Catalunya se re¨²nen este martes en la prisi¨®n de Lledoners, donde siete de los l¨ªderes independentistas cumplen sus condenas tras el juicio al proc¨¦s. Pese a que ambas partes insisten en que se trata de una ¡°reuni¨®n m¨¢s¡± dentro de las conversaciones para llegar a un pacto de Gobierno, lo cierto es se trata de una cita trascendente por el momento, el lugar...
Las comisiones negociadoras de Esquerra Republicana y Junts per Catalunya se re¨²nen este martes en la prisi¨®n de Lledoners, donde siete de los l¨ªderes independentistas cumplen sus condenas tras el juicio al proc¨¦s. Pese a que ambas partes insisten en que se trata de una ¡°reuni¨®n m¨¢s¡± dentro de las conversaciones para llegar a un pacto de Gobierno, lo cierto es se trata de una cita trascendente por el momento, el lugar y la tem¨¢tica.
En un mes exacto se tendr¨ªan que convocar nuevas elecciones si no hay acuerdo, un extremo que tanto los de Oriol Junqueras como los de Carles Puigdemont descartan. En Lledoners, el grupo negociador de ERC pondr¨¢ sobre la mesa el tema central de cualquier coalici¨®n, el reparto del poder en el Ejecutivo, una arquitectura que posteriormente habr¨¢ que ir completando con los nombres propuestos por los socios. Y la visita a la prisi¨®n por parte del presidenciable republicano, Pere Aragon¨¨s, implica su bajada a la arena de unas conversaciones que ya suman m¨¢s de 72 d¨ªas. Jordi S¨¤nchez, secretario general de Junts y l¨ªder de su grupo negociador, ser¨¢ el ¨²nico preso que participar¨¢ en el encuentro, que ha tenido que ser en Lledoners para poder asegurar la presencia f¨ªsica de todos los negociadores.
?Qu¨¦ se espera de la reuni¨®n?
La negociaci¨®n entre ambas fuerzas est¨¢ dividida en cinco carpetas: la estrategia independentista, la soberan¨ªa parlamentaria, las prioridades del Govern, los mecanismos de coordinaci¨®n y la arquitectura del Ejecutivo. En el centro penitenciario, ERC pondr¨¢ sobre la mesa sus cartas en este ¨²ltimo apartado, que se hab¨ªa reservado para lo que considera ¡°el tramo final¡± de las conversaciones. Junts descarta en absoluto que se est¨¦ tan adelante, pero reconoce cierto avance.
El dise?o de c¨®mo se ha de organizar el nuevo Govern es un punto vital para la buena gesti¨®n, pero dentro de los partidos es siempre visto como un foco de problemas. El debate transmite la idea de que se lucha por la silla y no por las prioridades. Lo cierto es que hay mucho para repartir. El Ejecutivo catal¨¢n cuenta actualmente con 13 consejer¨ªas m¨¢s la presidencia de la Generalitat. A eso hay que sumar una constelaci¨®n de empresas p¨²blicas y participaci¨®n en consorcios muy variopintos, desde el Circuit de Catalunya (donde se celebra la F¨®rmula 1), el Teatre Nacional de Catalunya o el Patronato de la Monta?a de Montserrat. Solo la c¨²pula del Govern provee unos 500 puestos de confianza y directivos de entes p¨²blicos. Suman 45 millones de euros en retribuciones.
Aragon¨¨s expondr¨¢ un organigrama, sin nombres, que en teor¨ªa debe estar en consonancia con las prioridades del mandato que ya se han ido negociando con Junts. Tanto ERC como Junts, durante la campa?a, abogaron por crear dos nuevos departamentos: uno dedicado a la acci¨®n clim¨¢tica (las competencias de medio ambiente est¨¢n ahora en la consejer¨ªa de Territorio) y otro de igualdad y feminismos (el Instituto de la Mujer depende actualmente de Presidencia). El l¨ªder de ERC dice que no quiere hacer crecer el n¨²mero global de consejer¨ªas. Junts quiere ver qu¨¦ cuadratura del c¨ªrculo proponen los republicanos.
En el pasado mandato, los republicanos se hicieron con todas las carteras sociales (Educaci¨®n, Salud y Asuntos Sociales) y, con el tiempo, los de Carles Puigdemont consideran que fue un error estrat¨¦gico. De ah¨ª que Junts quiera m¨¢s protagonismo en ese campo. Todo parece indicar que la cartera de Salud podr¨ªa ser la moneda de cambio. El otro centro de atenci¨®n est¨¢ en Econom¨ªa. Los republicanos ansiaban mantenerla, pero Junts insiste que les corresponde ahora a ellos. El fondo de la discusi¨®n es la gesti¨®n de los fondos europeos, que Aragon¨¨s quiere mantener en su partido. Una negociaci¨®n ardua.
?Qu¨¦ est¨¢ listo?
De momento solo hay una carpeta cerrada: los mecanismos de coordinaci¨®n. Los equipos negociadores la dieron por cerrada el pasado jueves e incluye c¨®mo actuar ante desacuerdos durante el d¨ªa a d¨ªa del Ejecutivo. Tanto en ERC como en Junts son conscientes que los continuos choques que se vivieron en la pasada legislatura no se pueden repetir y de ah¨ª que se intente protocolizar al m¨¢ximo c¨®mo atender este tipo de desencuentros.
La negociaci¨®n de este punto no ha sido f¨¢cil. Fuentes de ERC creen que es muy inocente intentar recoger todos los supuestos de problemas y la forma como resolverlos. En Junts lo ven distinto: creen que en Catalu?a ¡°falta cultura de gobiernos de coalici¨®n¡± y entienden que es indispensable caminar a cierta sistematizaci¨®n de la experiencia.
El texto del acuerdo no es p¨²blico pero, seg¨²n explican fuentes cercanas a la negociaci¨®n, se establecen cinco niveles de coordinaci¨®n, entre ellos el del Parlament; el del Govern y el de la estrategia independentista.
?C¨®mo est¨¢n las otras carpetas?
En las filas republicanas no entienden por qu¨¦ el eje sobre la soberan¨ªa parlamentaria a¨²n no est¨¢ cerrado. T¨¦cnicamente se cumpli¨® con la puesta en marcha de la C¨¢mara, la investidura de Laura Borr¨¤s como presidenta del Parlament y la garant¨ªa del dominio independentista en la Mesa. Junts dice que quedan ¡°flecos¡±, aunque no concreta cu¨¢les.
ERC amag¨® con presionar a sus eventuales socios diciendo que era necesario apresurar la investidura de Aragon¨¨s si se quer¨ªa el apoyo a la diputada Aurora Madaula para reemplazar a Jaume Alonso Cuevillas en la Mesa. El pr¨®ximo jueves se har¨¢ esa votaci¨®n y posiblemente se desencalle tambi¨¦n esa carpeta. Junts, dicen los republicanos, ha renunciado a la reforma del reglamento del Parlament que cambiaba los supuestos para suspender la condici¨®n de diputado y que podr¨ªa afectar a Borr¨¤s, investigada por un presunto delito de prevaricaci¨®n.
La de las prioridades del Govern se tendr¨¢ que rematar con el debate de la arquitectura del Ejecutivo. Hay avances pues la semana pasada se comenzaron a reunir los comit¨¦s t¨¦cnicos sobre ¨¢reas de Gobierno, como la sanidad. Est¨¢ pendiente la de econom¨ªa.
Finalmente, queda el apartado independentista. Aqu¨ª el principal punto de desencuentro es la apuesta de Junts por mantener viva la influencia de Carles Puigdemont mientras que ERC considera que se le intenta tutelar de manera externa. Los republicanos rechazan crear cualquier ¨®rgano mayor que lidere la hoja de ruta secesionista, pero se abre a una mesa colegiada donde se debatan los pasos a seguir. Junts insiste en la necesidad de coordinar las votaciones en Madrid sobre ¡°temas nacionales¡± y los republicanos se niegan. ERC no concreta qu¨¦ har¨¢ si la operaci¨®n di¨¢logo con el Govern fracasa. ?Por qu¨¦ ha sido tan dif¨ªcil el acuerdo?
La desconfianza, la ra¨ªz de todos los males que supuestamente las negociaciones quieren desterrar, es parad¨®jicamente la principal raz¨®n para que no se concrete el nuevo Ejecutivo independentista. Las dos partes se siguen mirando de reojo y, como rivales pol¨ªticos que son, ven en cada movimiento un intento desgaste del oponente. Los republicanos creen que Junts sigue sin hacer ¡°la digesti¨®n¡± de la ¡°derrota¡± del 14-F (fueron la tercera fuerza despu¨¦s de ERC, 30.000 votos y un diputado menos) y ven dentro de las filas de los de Puigdemont sensibilidades distintas sobre el pacto.
Pese a que S¨¤nchez ya dicho en muchas ocasiones que no habr¨¢ repetici¨®n electoral, Junts quiere marcar territorio ante ERC. Aragon¨¨s asegur¨® que el pacto ser¨ªa r¨¢pido, pero ya lleva 70 d¨ªas intent¨¢ndolo. Los de Puigdemont han logrado imponer el relato del empate t¨¦cnico (la diferencia en voto fue menor en 2017 y ERC asumi¨® su papel de hermano peque?o con m¨¢s facilidad) e insisten en apretar a los republicanos por el flanco independentista. Tampoco les perdonan que hayan dado prevalencia a la CUP en el pacto, defendiendo que ellos tienen 32 diputados mientras que la CUP solo tiene nueve. Los republicanos insisten en que el 14-F mostr¨® que el independentismo vir¨® a la izquierda.
?Qui¨¦nes estar¨¢n en la reuni¨®n?
La reuni¨®n se realiza en Lledoners para que pueda estar de manera presencial Jordi S¨¤nchez, el secretario general de Junts y l¨ªder de su comisi¨®n negociadora. El expresidente de la ANC paga una condena de nueve a?os de prisi¨®n por un delito de sedici¨®n. Aragon¨¨s ha querido tomar las riendas en este momento crucial, un gesto que tiene varias lecturas. ERC intenta dar as¨ª la idea de que el pacto est¨¢ al caer, pues el manual de las negociaciones dice que el l¨ªder solo toca el fango cuando hay poco riesgo de ensuciarse mucho. Junts no quiere dar esa idea de hechos consumados, pero puede vender la idea de que ha presionado tanto que ha obligado al l¨ªder republicano a implicarse a fondo.
Por ERC, adem¨¢s de Aragon¨¨s, estar¨¢n los diputados Sergi Sabri¨¤, Marta Vilalta y Laura Vilagr¨¤ (n¨²mero dos de la lista de los republicanos en las elecciones y que tendr¨¢ un rol destacado en el Ejecutivo). Tambi¨¦n estar¨¢ el presidente del grupo parlamentario, Josep Mar¨ªa Jov¨¦. Este l¨ªder republicano est¨¢ a un paso de ir a juicio por los preparativos del refer¨¦ndum unilateral del 1-O, pues este lunes el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a ha anunciado que se concluye la instrucci¨®n.
La delegaci¨®n de Junts, adem¨¢s de S¨¤nchez, la componen los diputados Francesc de Dalmases (mano derecha de Borr¨¤s), Josep Rius y Elsa Artadi, que tiene todos los n¨²meros para ser la futura vicepresidenta del Govern.