Una semana sin internet en la Universidad Aut¨®noma de Barcelona: ¡°Es llegar al campus y quedar completamente incomunicado¡±

¡±Ya hab¨ªamos recuperado cierta normalidad y ahora esto¡±, lamenta de camino al campus de Bellaterra (Barcelona) en los Ferrocarriles Berta, una estudiante de Pedagog¨ªa que, en segundo curso, hab¨ªa empezado a saborear la vida universitaria cotidiana, este viernes ya oficialmente con el 100% de aforo permitido por el Govern. Tras un ciberataque el lunes, la UAB ha pasado de una ...

¡±Ya hab¨ªamos recuperado cierta normalidad y ahora esto¡±, lamenta de camino al campus de Bellaterra (Barcelona) en los Ferrocarriles Berta, una estudiante de Pedagog¨ªa que, en segundo curso, hab¨ªa empezado a saborear la vida universitaria cotidiana, este viernes ya oficialmente con el 100% de aforo permitido por el Govern. Tras un ciberataque el lunes, la UAB ha pasado de una adaptaci¨®n total a lo virtual por el coronavirus a una presencialidad desconectada: sin campus virtual ni Wi-Fi y con la poca cobertura m¨®vil que tiene el campus, saturada ahora por un pico de demanda. El rectorado prev¨¦ que los efectos del ataque inform¨¢tico se prolonguen durante varias semanas.

Una profesora que manda los PDF por WhatsApp a la delegada de clase, una amiga ansiosa porque tiene examen la semana que viene y no se puede descargar los apuntes y una incertidumbre general dominan la conversaci¨®n de Berta y sus dos compa?eros de trayecto y estudios, Arnau y Emma. ¡°Es llegar al campus y quedar completamente incomunicado¡±, explica Jana, alumna de primero de Ciencias Pol¨ªticas de una clase al aire libre en la plaza C¨ªvica. Su compa?era, Paula, dice que tiene estudiados algunos puntos de una sala de estudios donde llega el 4G. Ella, adem¨¢s de estudiar, tambi¨¦n vive en la Vila y se siente a¨²n m¨¢s aislada.

¡°Llevo a?os haciendo campa?a para que pongan una torre de telecomunicaciones m¨®vil en el campus y es muy lento¡±, explica el comisionado del rector para las TIC, Jordi Hern¨¢ndez, que detalla que a partir del lunes la UAB pondr¨¢ en marcha una red Wi-Fi provisional, desconectada de sus servidores internos y solo con acceso a internet. Los t¨¦cnicos a¨²n est¨¢n en una fase de evaluaci¨®n de los da?os y, seg¨²n Hern¨¢ndez, ¡°el entorno virtual de la universidad se tendr¨¢ que reconstruir desde cero¡±. La UAB, que tiene el apoyo de la Agencia de Ciberseguridad de Catalu?a para denunciar los hechos, prev¨¦ que todo 2022 estar¨¢ trabajando en mejorar su seguridad. Los piratas inform¨¢ticos que atacan con ransomware suelen pedir recompensa. No obstante, el comisionado explica que, como instituci¨®n p¨²blica, la UAB no har¨¢ ning¨²n pago, adem¨¢s que opina que ¡°que tampoco ser¨ªa garant¨ªa de nada¡±. La universidad tuvo que desmentir una informaci¨®n aparecida en algunos medios, que aseguraba que los atacantes hab¨ªan pedido tres millones de euros.

En las aulas de la Facultad de Ciencias Pol¨ªticas, pese a las mascarillas, las clases se desarrollan a lo tradicional, con m¨¢s o menos un 50% de estudiantes tomando notas en papel y el resto en ordenador. La vicedegana de Comunicaci¨®n, Dafne Muntanyola, debate en los pasillos con una compa?era sobre c¨®mo se las ingenian para imprimir. Considera que las clases se ven poco afectadas: ¡°Tenemos que copiar los PowerPoint a USB previamente formateados¡±. Sin embargo, dice que el ataque inform¨¢tico llega en un momento en el que el profesorado arrastra un ¡°cansancio del esfuerzo extremo durante la covid¡±. Muntanyola apunta a Twitter e Instagram como canales de comunicaci¨®n alternativos que utilizan profesores para contactar con los alumnos. Este viernes la UAB abri¨® un canal de Telegram para informar sobre el ciberataque. El rectorado quiere solucionar de forma oficial c¨®mo se har¨¢ la entrega de material evaluable.