Colau-Collboni: un a?o por delante como socios y adversarios en Barcelona
Comunes y PSC descartan categ¨®ricamente una ruptura, pero visualizar¨¢n sus logros y diferencias
No habr¨¢ ruptura, pero Ada Colau y Jaume Collboni empiezan a mostrar claramente sus diferencias. Hac¨ªa tres mandatos que en Barcelona no hab¨ªa una coalici¨®n de Gobierno en v¨ªsperas a las elecciones. En el mandato pasado, los comunes y el PSC tambi¨¦n gobernaron una temporada, pero rompieron en los momentos de mayor tensi¨®n del proc¨¦s. Ahora, ...
No habr¨¢ ruptura, pero Ada Colau y Jaume Collboni empiezan a mostrar claramente sus diferencias. Hac¨ªa tres mandatos que en Barcelona no hab¨ªa una coalici¨®n de Gobierno en v¨ªsperas a las elecciones. En el mandato pasado, los comunes y el PSC tambi¨¦n gobernaron una temporada, pero rompieron en los momentos de mayor tensi¨®n del proc¨¦s. Ahora, a un a?o vista de las elecciones, tanto la alcaldesa Colau como el socialista Collboni han aprendido esa lecci¨®n y descartan categ¨®ricamente romper el pacto. La gente est¨¢ harta de pol¨ªticas partidistas y que lo que esperan los barceloneses es que gobiernen y les resuelvan los problemas, argumentan.
En mayo Colau fue oficialmente designada alcaldable por tercera vez por las bases de Barcelona en com¨². En el PSC, Collboni ha sido bendecido por la direcci¨®n, pero oficialmente todav¨ªa no es candidato: pide a los comunes centrarse en gobernar y no acelerar la campa?a. En el gobierno hay cordialidad y est¨¢ ¡°blindado¡±, aseguran unos y otros. M¨¢s cuanto m¨¢s arriba de la c¨²pula, se?alan. Si hay roces, es con concejales de menor rango.
No hay ning¨²n pacto expl¨ªcito, no hay una hoja de ruta del ¨²ltimo a?o de convivencia. ¡°Si miras el programa de Gobierno, la mayor¨ªa de proyectos se han hecho y no hay grandes diferencias estructurales. Y en cada actuaci¨®n es reconocible la marca¡±, asegura un miembro del ejecutivo.
¡°El ¨²ltimo a?o no se toman grandes decisiones, ni se abren melones. Si el pacto est¨¢ bien engrasado, la gesti¨®n va por inercia: las obras est¨¢n en marcha y tienes que ponerte de acuerdo en las cosas que importan a la gente, como la limpieza y la seguridad¡±, explica una veterana concejal que ya no est¨¢ en el Ayuntamiento. ¡°Eso s¨ª, rezas para que el ¨²ltimo verano vaya bien¡±, a?ade. De hecho, es tal cual lo cuenta: los comunes acaban de presentar un superplan de limpieza y mantenimiento de la ciudad; y el PSC el refuerzo veraniego de la Guardia Urbana.
¡°No hay inter¨¦s en armar ruido, la gente est¨¢ muy harta de los partidos y los pol¨ªticos. Defenderemos el gobierno de izquierdas, marcaremos perfil, se mantendr¨¢ el pacto hasta el final y entraremos en campa?a cuando toque¡±, aseguran en la direcci¨®n de los comunes. El d¨ªa que comunic¨® que volv¨ªa a presentarse, Colau agradeci¨® y pidi¨® sosiego tanto al PSC como a ERC. Tanto defiende la alcaldesa que los grandes acuerdos han sido a tres, que a veces otorga la misma relevancia al socio oficial que al externo. Las encuestas publicadas hasta la fecha dan un resultado muy ajustado a las tres fuerzas.
¡°Las ¨¢reas de gobierno est¨¢n repartidas y muy acotadas, en el pacto se dejaron cuestiones en las que no encajamos y adem¨¢s desde octubre pasado decidimos visualizar la discrepancia¡±, se?ala, por su parte, una relevante voz socialista. Juegos Ol¨ªmpicos, ampliaci¨®n del aeropuerto, Hermitage, horarios comerciales o la ejecuci¨®n de la superilla figuran entre estas cuestiones. La ¨²ltima en sumarse, los cruceros: Colau pide que se regulen y limiten, aunque el acuerdo alcanzado con el Puerto en 2018 prev¨¦ dos terminales m¨¢s de 700 metros cada una. Collboni apuesta por estudiarlo.
En antiguas coaliciones de los socialistas con ICV o ERC, el PSC era claramente mayoritario. Ahora la ecuaci¨®n est¨¢ m¨¢s igualada: Colau tiene 10 concejales y Collboni 8. ¡°El alcalde es siempre quien tiene la relevancia. El socio puede intentar desgastar, pero hay que medir, para que no se te gire en contra: si cargas contra pol¨ªticas del otro, no puedes perder de vista que tu tambi¨¦n formas parte del gobierno¡±, advierte una de las voces citadas.
Impl¨ªcitamente tambi¨¦n est¨¢ claro qu¨¦ vender¨¢ cada uno de los dos partidos. C¨®mo marcar¨¢ perfil. Basta ver despliegues recientes de cada una de las ¨¢reas de gobierno. Los comunes han echado el resto con jornadas sobre la superilla o el festival de arquitectura. El PSC, con las jornadas React sobre reactivaci¨®n econ¨®mica o presumiendo de haber tra¨ªdo la Copa del Am¨¦rica.
Las obras en marcha y las que vienen (Diagonal, Meridiana, Via Laietana y cuatro calles del Eixample patas arriba) no ayudar¨¢n. ¡°Defenderemos que tenemos proyecto, que estamos transformando la ciudad¡±, apuntan en Barcelona en com¨². ¡°M¨¢s que los proyectos, podemos cuestionar la gesti¨®n y buscar aliados entre los perjudicados. O visualizar promesas que no se puedan cumplir¡±, replican en el PSC.
Mientras, la tentaci¨®n electoral es muy grande. La semana pasada la alcaldesa convocaba a la prensa en un acto de partido para explicar que M¨®nica Garc¨ªa, de M¨¢s Madrid, estaba en Barcelona tomando nota de los proyectos de los comunes. Dos d¨ªas despu¨¦s, el partido repart¨ªa 19.000 ejemplares por toda la ciudad de un diario que da cuenta de la obra de gobierno. El PSC, por su parte, hace d¨ªas inserta publicidad pagada en redes sociales (Instagram y Facebook) de presentaci¨®n de Collboni.
Puedes seguir a EL PA?S Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal