Investigando para curar el c¨¢ncer infantil, ?d¨®nde estamos?
En un mundo globalizado y pleno de inequidades, invertir en una asistencia e investigaci¨®n p¨²blicas es la ¨²nica forma de garantizar el mejor tratamiento para todos los pacientes
Siempre me han impactado todas las historias de nuestros pacientes, ni?os, ni?as y adolescentes con c¨¢ncer, cuando el tratamiento actual, basado en la quimioterapia, radioterapia, cirug¨ªa y a veces el trasplante, no funciona; y el c¨¢ncer nos gana la batalla.
Por ejemplo, esto sucede con el neuroblastoma, uno de los tumores infantiles del desarrollo m¨¢s agresivos. En los ¨²ltimos 30 a?os, se ha aprobado un solo nuevo f¨¢rmaco espec¨ªficamente dise?ado para este tumor, un tipo de inmunoterapia. Para la mayor¨ªa de los c¨¢nceres infantiles, ni siquiera se ha desarrollado un solo f¨¢rmaco.
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Siempre me han impactado todas las historias de nuestros pacientes, ni?os, ni?as y adolescentes con c¨¢ncer, cuando el tratamiento actual, basado en la quimioterapia, radioterapia, cirug¨ªa y a veces el trasplante, no funciona; y el c¨¢ncer nos gana la batalla.
Por ejemplo, esto sucede con el neuroblastoma, uno de los tumores infantiles del desarrollo m¨¢s agresivos. En los ¨²ltimos 30 a?os, se ha aprobado un solo nuevo f¨¢rmaco espec¨ªficamente dise?ado para este tumor, un tipo de inmunoterapia. Para la mayor¨ªa de los c¨¢nceres infantiles, ni siquiera se ha desarrollado un solo f¨¢rmaco.
En Catalunya se diagnostican unos 300 casos al a?o en menores; y ofrecemos los mejores est¨¢ndares de tratamiento, al nivel de centros europeos y norteamericanos; gracias a la experiencia y capacidad de los dos grandes centros de referencia que tratamos a estos pacientes.
Aun as¨ª, hay ni?os que recaen y fallecen. Uno de cada cinco; cada uno de ellos una tragedia inaceptable. Aqu¨¦llos que lo superan, que ya son muchos miles, afrontan importantes secuelas del tratamiento a lo largo de su vida. Nos despertamos obsesionados con mejorar estos resultados para curar a todos ellos y adem¨¢s que vivan libres de secuelas; y lo hacemos buscando nuevos f¨¢rmacos y terapias.
En Catalunya, somos afortunados de vivir en un ecosistema que favorece enormemente la investigaci¨®n en oncolog¨ªa. En nuestro grupo de investigaci¨®n en c¨¢ncer infantil de Vall d¡¯Hebron, investigamos en todas las fases del desarrollo de estos nuevos f¨¢rmacos: empezamos por sintetizarlos, crearlos y probarlos en el laboratorio; pero adem¨¢s podemos acompa?ar a estos f¨¢rmacos durante todas las fases de los ensayos cl¨ªnicos hasta estar disponibles para pacientes de todo el globo. La tecnolog¨ªa nos permite secuenciar el genoma de estos tumores para dirigir los tratamientos y entender por qu¨¦ se hacen resistentes.
Vivimos rodeados de un sinn¨²mero de grandes compa?¨ªas farmac¨¦uticas y peque?as biotecnol¨®gicas que apuestan por la innovaci¨®n en tumores poco frecuentes; donde hay excelentes centros de investigaci¨®n b¨¢sica y traslacional y adem¨¢s, donde toda la ciudadan¨ªa, fundaciones y empresas, se implican para apoyar la investigaci¨®n.
Pero nos queda mucho por recorrer. Adem¨¢s de las barreras de la investigaci¨®n en nuestro campo a nivel global, como son la falta de incentivos para desarrollar f¨¢rmacos espec¨ªficamente para el c¨¢ncer pedi¨¢trico o desigualdades en el acceso al tratamiento a nivel global; nos enfrentamos con barreras propias de nuestro medio. En primer lugar, la falta de una carrera investigadora establecida en los centros p¨²blicos de investigaci¨®n dificulta la atracci¨®n y retenci¨®n del talento. En segundo lugar, para llegar a la excelencia y a resultados que cambien la pr¨¢ctica cl¨ªnica, necesitamos m¨¢s inversiones a medio y largo plazo, especialmente investigaci¨®n disruptiva y valiente. Finalmente, en un mundo globalizado y pleno de inequidades, invertir en una asistencia e investigaci¨®n p¨²blicas es la ¨²nica forma de garantizar el mejor tratamiento para todos los pacientes.
En conclusi¨®n, queda mucho trabajo por hacer, no solo a sanitarios o a investigadores; necesitamos que toda la sociedad civil, las empresas farmac¨¦uticas, los reguladores, las instituciones nos acompa?en para que dejen de suceder tristes historias.
El doctor Lucas Moreno es el jefe del Servicio de Oncolog¨ªa y Hematolog¨ªa Pedi¨¢tricas de Vall d¡¯Hebron y jefe del Grupo de investigaci¨®n en C¨¢ncer y Patolog¨ªas Hematol¨®gicas Infantiles del Vall d¡¯Hebron Institut de Recerca (VHIR)
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