ERC y PSC afrontan la negociaci¨®n de las cuentas catalanas tras la decisi¨®n de los republicanos de facilitar los Presupuestos

La decisi¨®n de Esquerra Republicana de no presentar una enmienda a la totalidad a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) ha abierto un interrogante sobre el impacto que pueda tener en las Cuentas catalanas. De entrada, el PSC y los republicanos insisten en su estrategia de no vincularlas a las que se negocian en el Congreso. O incluso con los de Barcelona, donde tambi¨¦n est¨¢n implicadas ambas formaciones. Con todo, la decisi¨®n de...

La decisi¨®n de Esquerra Republicana de no presentar una enmienda a la totalidad a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) ha abierto un interrogante sobre el impacto que pueda tener en las Cuentas catalanas. De entrada, el PSC y los republicanos insisten en su estrategia de no vincularlas a las que se negocian en el Congreso. O incluso con los de Barcelona, donde tambi¨¦n est¨¢n implicadas ambas formaciones. Con todo, la decisi¨®n de los de Gabriel Rufi¨¢n de facilitar la tramitaci¨®n de las cuentas aliviar¨¢ la tensi¨®n que se ha visto esta semana en el Parlament entre las dos fuerzas pol¨ªticas. O al menos no la empeora, admiten fuentes de los socialistas catalanes. Pero si hay un cambio m¨¢s all¨¢ del tono s¨®lo se podr¨¢ saber a finales de la pr¨®xima semana, en la que est¨¢ prevista una reuni¨®n entre el jefe del PSC, Salvador Illa, y el del Govern, Pere Aragon¨¨s. Ante la evidencia de que es imposible llegar al 1 de enero con unas nuevas cuentas en marcha, en las filas de ERC insisten en que hay que dar tiempo al nuevo Ejecutivo auton¨®mico para que revise los n¨²meros y se haga alg¨²n cambio. Eso, aceptan, implicar¨ªa que el tr¨¢mite pudiera empezar despu¨¦s de que se aprueben los PGE.

Aragon¨¨s necesita desesperadamente un socio si quiere que la legislatura dure. Su debilidad es extrema al gobernar con solo 33 esca?os de un total de 135. Illa, jefe de la oposici¨®n, se ha ofrecido desde el principio de la legislatura a tender la mano a Aragon¨¨s para pactar las cuentas y solo ha recibido portazos desde el primer d¨ªa. El problema es que la salida de Junts del Ejecutivo obliga a los republicanos a tener que avenirse si o si con el PSC o con su ahora exsocio. La resaca de la ruptura de Govern, hace dos semanas, comenz¨® con el jefe de filas de los republicanos, Oriol Junqueras, poniendo muy alta la vara: solo se pactar¨¢ en el Parlament con las formaciones que, entre otras cosas, no compartan ¡°la represi¨®n¡± al independentismo. Para el exvicepresident est¨¢ claro que el PSC no entra ah¨ª, aunque asegur¨® que tendr¨ªa ¡°oportunidades¡± de mostrar alg¨²n cambio, se?alando sin mencionar la reforma del delito de sedici¨®n. Eso implica que si finalmente ese cambio se da, el veto podr¨ªa modularse y la decisi¨®n de Esquerra en el Congreso de no entorpecer el avance en el tr¨¢mite de los PGE deja entrever que alg¨²n avance se puede estar cocinando. El propio Aragon¨¨s, esta semana, dijo que hablar¨ªa con todo el mundo.

¡°No hemos visto reflejado ning¨²n cambio de actitud. Es una decisi¨®n en m¨¢s clave espa?ola que catalana¡±, dice Al¨ªcia Romero, portavoz parlamentaria del PSC

Al¨ªcia Romero, portavoz del PSC, afirm¨® este viernes tras el movimiento de ERC que no apreciaban ninguna diferencia sustancial respecto a la sesi¨®n del Parlament. ¡°No hemos visto reflejado ning¨²n cambio de actitud. Es una decisi¨®n en m¨¢s clave espa?ola que catalana¡±, sostiene la diputada, recordando que ERC juega diferente en los dos escenarios al negociar con el PSOE y, en cambio, no hacerlo con el PSC y que se ha movido por sus intereses, apuntando que no cree que se abra ahora una nueva etapa. ERC opta por insistir tambi¨¦n en que son dos pistas diferentes y que no se puede dar por sentado nada. ¡°Partido a partido¡±, insisten desde la direcci¨®n, recordando las palabras de Aragon¨¨s el pasado pleno. El pasado jueves, tras anunciar su enmienda a la totalidad a los PGE, el portavoz en el Senado de Junts, Josep Llu¨ªs Cleries, augur¨® que ERC y los socialistas har¨ªan ¡°el mismo teatro¡±, en referencia a escenificar el tira y afloja, pero que ya estaba todo decidido.

La gran duda es el c¨¢lculo del desgaste que ERC cree que le generar¨ªa pactar con el PSC o hacerlo sin antes agotar todas las v¨ªas posibles con sus exsocios. Junts, a¨²n en plena digesti¨®n de la salida de Govern, decide este s¨¢bado en un congreso nacional, el m¨¢ximo ¨®rgano entre congresos, sobre c¨®mo ser¨¢ su oposici¨®n y si se vislumbra alg¨²n tipo de colaboraci¨®n con las cuentas. El debate ya existente entre diferentes familias del partido fundado por Carles Puigdemont llega ahora a un foro amplio y est¨¢ por verse si quienes optan por no dar ni agua a ERC logran ganar el pulso a aquellos con una visi¨®n m¨¢s posibilista. Independientemente de esa colaboraci¨®n, s¨ª hay unanimidad en explotar el fil¨®n que ofrece un acercamiento entre socialistas y republicanos para erosionar no solo al Govern monocolor sino tambi¨¦n de cara a las futuras elecciones municipales. La ¨²nica manera de mitigar el efecto en esa cita electoral es poder mostrar los avances en la desjudicializaci¨®n.

Relaci¨®n testimonial

La relaci¨®n entre ERC y el PSC es ahora casi testimonial, aunque en lo que va que de legislatura han logrado pactar la ley del uso de lenguas en la escuela y renovar 112 cargos institucionales con mandatos caducados hace a?os y cuyo cambio hab¨ªa sido imposible dentro de la l¨®gica de bloques que marc¨® al Parlament durante los a?os duros del proc¨¦s. En el Pleno de esta semana, Illa mostr¨® su indignaci¨®n con los republicanos por ignorar de nuevo su mano tendida y acus¨® a Aragon¨¨s de ¡°rozar la temeridad¡± al querer mantener un Ejecutivo sin tener clara su ¡°viabilidad parlamentaria¡±. Illa siempre sostiene que no participar¨¢ en ning¨²n ¡°cambio de cromos¡± entre instituciones y recuerda como ejemplo que hace un a?o quedaron al margen de la ecuaci¨®n ERC-comunes, a diferencia de lo que ocurr¨ªa en Madrid, donde ERC vot¨® los Presupuestos del Congreso.

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