La justicia obliga a Catalana Occidente a pagar por la estafa de una agente de seguros a seis clientes

La Audiencia de Lleida ha condenado a Catalana Occidente por la estafa cometida por una agente de seguros de la compa?¨ªa a seis clientes. La aseguradora deber¨¢ asumir, como responsable civil subsidiaria, la devoluci¨®n del dinero a los afectados si la mujer, Marina B., no lo hace. El tribunal considera probado que la agente se apoder¨® de 187.000 euros de seis vecinos de Sant Lloren? de Morunys, en el Prepirineo de Lleida, por productos financie...

La Audiencia de Lleida ha condenado a Catalana Occidente por la estafa cometida por una agente de seguros de la compa?¨ªa a seis clientes. La aseguradora deber¨¢ asumir, como responsable civil subsidiaria, la devoluci¨®n del dinero a los afectados si la mujer, Marina B., no lo hace. El tribunal considera probado que la agente se apoder¨® de 187.000 euros de seis vecinos de Sant Lloren? de Morunys, en el Prepirineo de Lleida, por productos financieros que, supuestamente, les ofrec¨ªa la compa?¨ªa. Los afectados pusieron su dinero en manos de Marina B. porque estaban convencidos de que contaba con el respaldo de Catalana Occidente.

La sentencia, a la que ha accedido EL PA?S, concluye que ¡°no hay duda de la responsabilidad civil subsidiaria¡± de la empresa. Desde 2005 y hasta que fue despedida en 2019, Marina B. fue agente exclusiva de la compa?¨ªa, estaba ¡°sometida a las instrucciones¡± de la empresa ¡°sobre el modo de realizar su actividad¡±, se encontraba con los clientes en una oficina de Sant Lloren? que ¡°contaba con un r¨®tulo de Catalana Occidente¡± y utilizaba ¡°documentaci¨®n de la aseguradora en la elaboraci¨®n de los contratos fraudulentos¡±. En sus declaraciones, las v¨ªctimas coincidieron en que autorizaron las operaciones que les propuso la agente ¡°confiando en que contrataban con Catalana Occidente¡± y afirmaron que cre¨ªan que el dinero desembolsado iba a parar a cuentas de la compa?¨ªa.

Marina B. ha sido condenada a tres a?os y medio de c¨¢rcel como autora de un delito de estafa agravada. La Fiscal¨ªa solicitaba una pena de seis a?os, pero los magistrados la han rebajado al aplicarle, como circunstancia atenuante, dilaciones indebidas del proceso judicial. Adem¨¢s de pagar una multa de poco m¨¢s de 1.000 euros, la mujer tendr¨¢ que devolver a los afectados las cantidades que desvi¨® a su bolsillo y que, seg¨²n declar¨®, utiliz¨® para comprar droga porque sufr¨ªa una fuerte adicci¨®n. La mujer dif¨ªcilmente podr¨¢ devolver el dinero: seg¨²n declar¨®, tiene dos hijos a su cargo y cobra menos de 800 euros al mes. Si no lo hace, ser¨¢ Catalana Occidente la que deba asumir el pago.

Preguntado por decisi¨®n de la Audiencia de Lleida, un portavoz asegur¨® que la compa?¨ªa ¡°atender¨¢¡± el dictado de la sentencia y no la recurrir¨¢. Catalana Occidente record¨® que tiene ¡°establecidos controles internos¡± y que, ¡°tras detectar las irregularidades¡± cometidas por la agente, actu¨® ¡°de forma r¨¢pida y diligente¡± y ¡°puso los hechos en conocimiento de los cuerpos y fuerzas de seguridad¡± en abril de 2019. Antes del juicio, la empresa ya hab¨ªa anunciado su intenci¨®n de asumir ¡°cualquier responsabilidad¡± que se determinara en la sentencia.

P¨®lizas fraudulentas

La estafa, seg¨²n considera probado la sentencia, se prolong¨® de 2013 a 2019. Marina B. ¡°aprovech¨® su larga trayectoria¡± para ofrecer productos y servicios que supuestamente iban a ser muy ventajosos para los clientes. Lleg¨® a prometerles, entre otras cosas, un inter¨¦s anual medio del 2,5% con un plazo fijo que, adem¨¢s, iba a reportarles un descuento en el importe de los seguros. El dinero iba a parar a una cuenta corriente personal de Marina B. Dos de los afectados, el matrimonio formado por Antoni Gasol y Dolors Rabella, lleg¨® a ingresar 120.000 euros que, hasta ahora, no han logrado recuperar, tal como ha explicado su abogado, el penalista Jordi Bertomeu. Empezaron a ver que algo no iba bien en febrero de 2019, cuando intentaron rescatar la inversi¨®n por necesidades econ¨®micas. Marina confes¨®: les dijo que hab¨ªa ¡°reinvertido personalmente¡± el dinero, les pidi¨® disculpas pero les anim¨® a no denunciar el caso porque no iba a servir de nada.

A Dom¨¨nech C., la agente le hizo firmar una p¨®liza de vida con la promesa de que, si ingresaba 5.000 euros, recibir¨ªa a los dos a?os 400 euros. Con Mayra T. gestion¨® el seguro de un coche que tambi¨¦n iba a reportarle un beneficio (380 euros anuales) pero dej¨® sin efecto el producto al d¨ªa siguiente de haberlo contratado. Magdalena T., otra afectada, ¡°cancel¨® anticipadamente una p¨®liza de seguros¡± con 55.000 euros para firmar un nuevo contrato que, supuestamente, le iba a aportar mayor rentabilidad. As¨ª, hasta seis vecinos del peque?o municipio de Sant Lloren? (apenas mil habitantes) que reclaman esas cantidades. Otros cuatro clientes de esa misma oficina tambi¨¦n fueron estafados con cantidades menores, pero alcanzaron un acuerdo extrajudicial con la condenada y ya no reclaman.

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