Las viejas carpetas catalanas que tendr¨¢ que afrontar el nuevo gobierno del 23-J

¡°Las infraestructuras m¨¢s estrat¨¦gicas para la competitividad de la econom¨ªa catalana y, por tanto, de la espa?ola, avanzan a un ritmo muy lento y, en algunos casos, las obras est¨¢n paradas¡±. La patronal Foment del Treball, nunca sospechosa de tesis soberanistas, volvi¨® a alzar la voz el pasado mes de junio para denunciar un problema end¨¦mico en Catalu?a: el d¨¦ficit de inversi¨®n en obra p¨²blica, sobre todo por parte del Estado. No es balad¨ª que en el ¨²ltimo ejercicio de pragmatismo pol¨ªtico que ha protagonizado ERC, ya al final de esta campa?a electoral, dos de las tres condiciones fijadas por los republicanos para volver a investir presidente a Pedro S¨¢nchez est¨¦n directamente relacionadas: reducir el denunciado d¨¦ficit fiscal que sufre Catalu?a y el traspaso completo de Rodalies, principal fuente de incidencias del transporte p¨²blico en la comunidad. Son las principales carpetas catalanas, sin tener en cuenta la del conflicto pol¨ªtico ¨Dmantener viva la mesa de di¨¢logo es el tercer requisito de ERC¨D, con las que tendr¨¢ que bregar el gobierno que salga de las elecciones de este domingo y no son muy diferentes de las que ya se encontr¨® S¨¢nchez en 2019 tras su elecci¨®n.

En plena campa?a, el Gobierno, a trav¨¦s del Ministerio de Transportes, ha licitado diversos proyectos que muestran la intenci¨®n de enmienda. Uno es el estudio informativo para desdoblar la v¨ªa de Rodalies entre La Garriga y Centelles, relevante porque supone asegurar el inicio de los trabajos preparatorios para la doble v¨ªa en la l¨ªnea R3 que conecta Barcelona con Vic y Puigcerd¨¤, una de las que m¨¢s fallan de Catalu?a, aunque no hay ninguna que no sufra constantes incidencias t¨¦cnicas.

Pese a que la ejecuci¨®n presupuestaria en Catalu?a se ha mantenido muy por debajo de lo presupuestado durante este mandato, el Gobierno ha abierto los procesos de ejecuci¨®n de proyectos en muchas obras de la red ferroviaria que esperaban en los ¨²ltimos a?os. Desde la remodelaci¨®n de la estaci¨®n de Pla?a Catalunya, hasta la de Sants, e incluso la vasta operaci¨®n de l¡¯Hospitalet de Llobregat, que servir¨¢ para descongestionar la actual red barcelonesa y a la vez acabar con la divisi¨®n en el municipio que provocan las v¨ªas. Acabar la estaci¨®n de La Sagrera es otro hito pendiente. La gran cuesti¨®n es que el nuevo Ejecutivo en marcha no dilate los trabajos y, una vez listos, los consigne presupuestariamente y ordene el inicio de unos trabajos que pueden prolongarse al menos hasta final de esta d¨¦cada

Por si acaso, el Govern aprieta para cerrar un traspaso completo de la red de Rodalies y superar la actual situaci¨®n, en la que apenas controla el control de los horarios. Eso supondr¨ªa que la Generalitat asumiera la infraestructura y el control de las v¨ªas, como sucede con FGC, pero quiere asegurarse que antes el Estado no le traspase deuda y asegure las inversiones pendientes para no encontrarse as¨ª con la situaci¨®n a la que se ha visto sometida la red ferroviaria.

Otro proyecto ya casi en fase de elaboraci¨®n es el de construir un carril adicional en la ronda Litoral, entre Can Tunis y el Morrot. La actuaci¨®n debe reducir la presi¨®n en una v¨ªa que sufre constantes periodos al d¨ªa de circulaci¨®n lenta y agilizar la entrada y salida de camiones del puerto de Barcelona.

El Govern deber¨¢ negociar asimismo con La Moncloa la prolongaci¨®n del Cuarto Cintur¨®n o B-40, que ahora finaliza en Terrassa, pero que hace unas semanas las diferentes administraciones implicadas ¨Dmunicipales, auton¨®micas y estatales¨D lograron desencallar para hacerlo llegar hasta la vecina Sabadell. Seg¨²n el protocolo firmado este julio, en unos meses Generalitat y Estado deber¨ªan firmar un convenio e iniciar los tr¨¢mites para su construcci¨®n. Pero un cambio de Gobierno puede hacer ¡°tambalear¡± el acuerdo actual ¨Dseg¨²n fuentes de la negociaci¨®n¨D, en que el Estado, titular de la v¨ªa, cede a la Generalitat la redacci¨®n del proyecto y la definici¨®n del trazado, una concesi¨®n que est¨¢ por ver si el PP respeta.

Aunque ninguno de esos proyectos mencionados ha atra¨ªdo tanto la atenci¨®n del empresariado, y la oposici¨®n de una parte de la poblaci¨®n, como la posible ampliaci¨®n del aeropuerto de El Prat para que pueda operar con mayor agilidad los despegues y aterrizajes de aviones que vuelan rutas transoce¨¢nicas. Generalitat y Estado ten¨ªan que crear una comisi¨®n t¨¦cnica ¨Dy no lo han hecho¨D que debatiera si era necesaria esa ampliaci¨®n y la inversi¨®n de 1.700 millones prometidos por el propietario de la instalaci¨®n, Aena, pero la controversia que rodea al proyecto lo ha dejado apartado durante el periplo electoral iniciado con las elecciones municipales de mayo.

Modelo de financiaci¨®n

La otra cuesti¨®n, m¨¢s compleja, es el modelo de financiaci¨®n. Ni Mariano Rajoy ni S¨¢nchez se han atrevido a abrir la caja de los truenos, pese a que el actual sistema est¨¢ caduco. Y ning¨²n gobierno independentista ha querido liderar ninguna negociaci¨®n, al considerar el desgaste que comporta y que, por convicciones soberanistas, ser¨ªa traicionar el discurso de demanda del Estado propio.

En todo caso, Aragon¨¨s s¨ª ha se?alado a S¨¢nchez que, si quiere su apoyo, tendr¨¢ que comprometerse a reducir el d¨¦ficit fiscal que sufre Catalu?a ¨Dentre 14.000 y 20.000 millones de euros, seg¨²n el ¨²ltimo c¨¢lculo de la Generalitat¨D, lo que supone m¨¢s recursos directos para la Generalitat o bien incrementar la partida de inversiones en Catalu?a o las transferencias para algunas competencias, como la sanitaria.

El cap¨ªtulo barcelon¨¦s

El entonces ministro de Cultura, Jorge Sempr¨²n, anunci¨® en 1989 la voluntad del Gobierno central de construir una biblioteca de grandes dimensiones en Barcelona. Hasta este 2023 no se ha derribado el edificio donde se construir¨¢ la infraestructura cultural al lado de la estaci¨®n de Francia. Se prev¨¦ una inversi¨®n de 55 millones, pero no se inaugurar¨¢, al menos, hasta 2027. Las sucesivas partes del proyecto las deber¨¢ aprobar el nuevo Gobierno.

El edificio de la Jefatura Superior de Polic¨ªa de Barcelona es otra de las instalaciones que o bien sigue su funci¨®n relacionada con la seguridad o se transforma en una biblioteca o memorial sobre la tortura ejercida en las instalaciones durante el r¨¦gimen franquista. Lo que suceda en esta comisar¨ªa depende mucho de los pactos de gobierno que se alcancen o de los apoyos a seg¨²n que candidaturas.

Si en alg¨²n ¨¢mbito el Govern teme la llegada de un Gobierno PP-Vox es en el educativo y, especialmente, en la lengua. Se espera que una de las primeras acciones de un eventual nuevo Ejecutivo conservador sea la elaboraci¨®n de una nueva ley org¨¢nica educativa que aumente la presencia del castellano en las aulas catalanas. La actual, la Lomloe, y por intervenci¨®n de ERC, no establece porcentajes y permite que el peso de cada lengua cooficial se module, seg¨²n la realidad de cada centro, siempre que al final de la ESO se logre el pleno dominio de ambas, una l¨ªnea que han seguido las posteriores normativas catalanas.

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