La falta de personal eleva el n¨²mero de bares condenados a cerrar un d¨ªa en plena campa?a tur¨ªstica

La de este verano ha sido una buena temporada tur¨ªstica pese a no cumplir las expectativas marcadas en julio. Hay un factor, sin embargo, que la ha empa?ado: la falta de personal iniciada tras la pandemia y la imposibilidad de hacer rotaciones obliga cada vez a m¨¢s empresarios a cerrar un d¨ªa sus restaurantes o bares para permitir el descanso de su personal tal y como estipula el convenio colectivo del sector, que garantiza dos jornadas consecutivas sin trabajar. Esta pr¨¢ctica empez¨® a detectarse el a?o pasado en poblaciones donde hist¨®ricamente era impensable, como Begur o Lloret de Mar, y es...

La de este verano ha sido una buena temporada tur¨ªstica pese a no cumplir las expectativas marcadas en julio. Hay un factor, sin embargo, que la ha empa?ado: la falta de personal iniciada tras la pandemia y la imposibilidad de hacer rotaciones obliga cada vez a m¨¢s empresarios a cerrar un d¨ªa sus restaurantes o bares para permitir el descanso de su personal tal y como estipula el convenio colectivo del sector, que garantiza dos jornadas consecutivas sin trabajar. Esta pr¨¢ctica empez¨® a detectarse el a?o pasado en poblaciones donde hist¨®ricamente era impensable, como Begur o Lloret de Mar, y este verano se ha extendido el n¨²mero de negocios que han renunciado a abrir toda la semana.

¡°Los tiempos est¨¢n cambiando, parece que muy poco a poco los horarios intempestivos y las jornadas maratonianas de la hosteler¨ªa van desapareciendo¡±, apunta el secretario general de la UGT en Girona, Maxi Rica. Para ¨¦l, ¡°se han puesto un poco las pilas y empiezan a intentar conciliar la vida de sus empleados y el trabajo, pero a¨²n es una gota que empieza a calar entre el empresariado, para muchos lo que cuenta es la pela¡±. El secretario general de Servicios de CC OO en Girona, Antonio Ferro tambi¨¦n cree que ¡°lo hace un porcentaje muy peque?o¡±.

En Lloret de Mar, principal destino tur¨ªstico de Catalu?a tras Barcelona, o Blanes, tambi¨¦n se ha detectado la tendencia a cerrar un d¨ªa entre semana. ¡°No son los \[locales\] a pie de playa, son de calles interiores. Cierran un d¨ªa y todos los trabajadores hacen el descanso a la vez porque no tienen capacidad para hacer rotaciones¡±, indica Ferro para destacar el impacto que est¨¢ teniendo esta nueva pr¨¢ctica.. En hoteles grandes el cierre se traduce en servicios limitados a la media pensi¨®n, desayuno y cena, y en los m¨¢s peque?os, como los de la Costa Brava centro, cierran el restaurante un d¨ªa y s¨®lo dan desayunos, como se hace tambi¨¦n en Francia.

¡°No tengo personal para poder hacer la rotaci¨®n, me falta un cocinero¡±, asume Marcos Morales, propietario del restaurante mexicano Xela de Begur. En su caso, ha optado por cerrar los lunes. ¡°No se puede dar descanso a unos y a otros no, as¨ª que cerramos y ese d¨ªa lo tienen todos a la vez. En principio no quer¨ªa cerrar porque en agosto pierdes mucho dinero, pero si no se puede organizar de otra manera, se tiene que cerrar¡±. En la misma poblaci¨®n tambi¨¦n cierran otros locales c¨¦ntricos, que consideran que no se trata solo de no tener mano de obra sino de mostrar a posibles trabajadores de que se respetan las condiciones del descanso. ¡°Es la manera de encontrar personal, sino no te viene nadie¡±, reconoce un restaurador de la poblaci¨®n, Jordi Val¨¦s. ¡°Los tiempos han cambiado, antes trabaj¨¢bamos meses seguidos, ahora dejamos de ganar un dinero, pero hay que disfrutar un poco mas de la vida¡±, sostiene.

Algunos trabajadores procedentes de otras zonas no tienen d¨®nde vivir, por eso algunos empresarios alquilan pisos o casas para acogerlos. ¡°De Francia llegan ofertas de trabajo en las que ofrecen sueldo, comida y alojamiento. Aqu¨ª ya no es que se les vaya m¨¢s de la mitad del sueldo, hay casos de ¡°camas calientes¡±, gente que hace turnos distintos y comparte cama. ¡°Es terrible, esperemos que no sea una pr¨¢ctica habitual¡±, lamenta Ferro. ¡°Esto no cambiar¨¢ hasta que no se d¨¦ la importancia al sector tur¨ªstico que realmente tiene, teniendo en cuenta el PIB que representa, y que se den las condiciones para fidelizar al trabajador¡±, asegura.

Sindicatos y trabajadores creen que son necesarias inspecciones y sanciones para que los empresarios acaten el convenio. Por lo general s¨®lo se cumple en grandes negocios con representaci¨®n sindical. Carlos hace 30 a?os que trabaja en un restaurante del coraz¨®n de la Costa Brava y tiene claro que ¡°los empresarios se pasan el convenio por el forro¡± y que ¡°la Inspecci¨®n de Trabajo es una pantomima, no quieren abordar el problema; si hicieran inspecciones a saco, encontrar¨ªan todos los incumplimientos, que son muchos¡±. Este a?o ha sido el primero que han tenido un d¨ªa de descanso. La due?a del local no tuvo m¨¢s remedio ¡°por la presi¨®n de los j¨®venes que tra¨ªan el curr¨ªculum. Cuando les dec¨ªa que no se descansaba de junio a septiembre se iban todos¡±, explica. Los camareros han incluido en sus tareas la limpieza de los lavabos porque no hay personal de limpieza.

Maximizar ingresos

No todos los empleados quieren perder la oportunidad de aprovechar la cantidad de trabajo e ingresos que ofrece la temporada tur¨ªstica. Una empleada como Mar¨ªa no quiere que se denuncie. Trabaja 12 horas diarias por 1.500 o 1.800 euros mensuales, incluidas las propinas. Considera que ¡°en ning¨²n otro empleo podr¨ªa sacar esta cantidad¡±. Algunos empresarios se aprovechan de esa necesidad. Este verano, dicen propietarios de establecimientos y sindicatos, ha habido m¨¢s inspecciones administrativas, sobre todo para comprobar que se cumplen los calendarios y los horarios de trabajo.

Las organizaciones sindicales han puesto varias denuncias en Lloret, Tossa de Mar, Platja d¡¯Aro, Palam¨®s o Begur, pero se desconoce el n¨²mero de inspecciones y sanciones que se han efectuado y d¨®nde, ya que Inspecci¨®n de Trabajo de Catalu?a, con total opacidad, no facilita la informaci¨®n.

¡°El empresario quiere beneficios similares a la prepandemia, y con el personal actual no puede ser, con menos plantilla deben soportar cargas de trabajo absolutamente enloquecidas¡±, dice Rica. Esto, en momentos determinados como con las olas de calor, puede afectar a la salud del empleado. Este a?o ha afectado a personal de exterior y a los que trabajan dentro a m¨¢s de 40 grados, explica Jes¨²s Lourido, responsable del sector de Hosteler¨ªa y Turismo de Catalu?a de la UGT. Varios negocios han tenido bajas este final de agosto por desmayos o problemas diversos de salud. UGT ha presentado varias denuncias por determinadas condiciones de trabajo y por las altas temperaturas que ten¨ªan que soportar los empleados.

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