El viaje a la centralidad de Salvador Illa
El ¡®president¡¯ acumula gestos hacia el centro del tablero pol¨ªtico para atraer al nacionalismo moderado desenga?ado del ¡®proc¨¦s¡¯ mientras este s¨¢bado asiste a la celebraci¨®n en Madrid del 12-O
No lo hizo ni Artur Mas, ni Carles Puigdemont ni Quim Torra ni Pere Aragon¨¨s. Ninguno de los ¨²ltimos cuatro expresidentes de la Generalitat, que dirigieron la instituci¨®n durante la d¨¦cada del proc¨¦s, todos ellos independentistas, recibieron a Jordi Pujol en el Palau de la Generalitat desde que se declar¨® en 2014 defraudador fiscal y fue despojado de todos sus honores....
No lo hizo ni Artur Mas, ni Carles Puigdemont ni Quim Torra ni Pere Aragon¨¨s. Ninguno de los ¨²ltimos cuatro expresidentes de la Generalitat, que dirigieron la instituci¨®n durante la d¨¦cada del proc¨¦s, todos ellos independentistas, recibieron a Jordi Pujol en el Palau de la Generalitat desde que se declar¨® en 2014 defraudador fiscal y fue despojado de todos sus honores. El pasado 17 de septiembre, el president Salvador Illa rompi¨® por sorpresa con esa din¨¢mica y acogi¨® a Pujol en su despacho en una imagen que caus¨® estupefacci¨®n tanto entre miembros de su partido como asombro entre el independentismo.
¡°El expresident Jordi Pujol es una de las figuras m¨¢s relevantes de la historia pol¨ªtica de Catalu?a. Ha sido un placer recibirlo hoy en el Palau¡±, apunt¨® Illa despu¨¦s en la red sobre la visita, inscrita en la ronda de entrevistas que ha mantenido con sus antecesores, en la que no ha incluido de momento a Carles Puigdemont. El mensaje lo acompa?¨® de cuatro fotos, una de ellas en la Galer¨ªa G¨®tica, en las que se aprecia que recibi¨® con calidez al anciano pol¨ªtico. No era la primera vez que lo mencionaba: en la campa?a electoral lo cit¨® de forma recurrente al reconocer su liderazgo en la primera transformaci¨®n de Catalu?a encarnada en el autogobierno. La segunda, dec¨ªa, la protagonizaron los socialistas Pasqual Maragall y Jos¨¦ Montilla, y la tercera la quiere pilotar ¨¦l.
La menci¨®n en la campa?a. El paseo en campa?a con Miquel Roca. El fichaje de Miquel S¨¤mper, ex de Junts, como consejero de Empresa y Trabajo. El de David Bonveh¨ª, exsecretario general del PDeCAT como director general de Acci¨®n Social. O los comentarios del propio Mas ¡ªdijo ver en Illa un ¡°talante convergente¡± y admiti¨® que en CDC hab¨ªa perfiles como el suyo¡ª o los elogios que le dedic¨® Josep Antoni Duran Lleida, exl¨ªder de la extinta Uni¨®, tras reunirse con ¨¦l en el Palau. ¡°No es un simple gestor. Es un buen l¨ªder para lo que necesita ahora Catalu?a¡±, apunt¨® el democristiano. Todos los gui?os del president socialista parecen destinados a lanzar la red para atraer al sector, dicen fuentes del PSC, que qued¨® ¡°hu¨¦rfano¡± al desaparecer el nacionalismo moderado o que est¨¢ desencantado del proc¨¦s y no les convence Junts. Pero no solo eso: mientras sus rivales est¨¢n en fase de renovar liderazgo, Illa hace equilibrios y sale indemne del debate de pol¨ªtica general con el apoyo de sus socios ERC y comunes, y este s¨¢bado estar¨¢ en la Fiesta Nacional del 12-O. Sus cuatro antecesores, en los ¨²ltimos 14 a?os, nunca asistieron.
¡°Creo que quiere ocupar y personificar el espacio de la sociovergencia (t¨¦rmino para definir la suma de CiU y PSC) de la que hemos o¨ªdo hablar tanto y que nunca se materializ¨®. Es una especie de leyenda urbana: se ha hablado mucho, nunca ha sido una suma o coalici¨®n de siglas, pero sociol¨®gicamente existe¡±, esgrime Toni Aira, profesor Comunicaci¨®n Pol¨ªtica e Institucional de la Universitat Pompeu Fabra, de Barcelona, que apunt¨® que muy c¨®modo debe sentirse Illa circulando por el carril de la centralidad con esa foto con Pujol de esa enorme carga simb¨®lica. ¡°Si los otros no se ponen las pilas, tenemos president para rato¡±, vaticin¨® en la red. Con el objetivo de anclarse en la centralidad, Illa, tarradellista convencido, reuni¨® a su Govern en Poblet (guarda los archivos del primer expresident) pero no tard¨® en visitar Montserrat, siempre asociado al nacionalismo y a Converg¨¨ncia.
Mas ha reconocido a Illa su ¡°talante convergente¡± y que en Converg¨¨ncia hab¨ªa perfiles como el suyo
Tras admitir que vio el gesto ¡°audaz¡±, Aira a?ade que Illa ha rehabilitado a Pujol en una imagen que mucha gente cre¨ªa necesaria. Y justo en el momento en que sus rivales est¨¢n en un momento de debilidad y ofreciendo la imagen de no hacer ruido, de dotar institucionalizar la presidencia y de ¡°anar per feina¡± (¡±ponerse manos a la obra¡±). Y a?ade: ¡°La foto con Duran vuelve a poner en valor la sociovergencia. Y cuando una de las dos patas est¨¢ m¨¢s fuerte, intenta copar la mayor parte del pastel. Lo hizo Pujol y otros expresidents¡±. La polit¨®loga Ver¨®nica Fumanal interpreta esa reuni¨®n con Pujol como un ¡°gesto de reconciliaci¨®n y transversalidad¡± con una parte del pasado. ¡°Illa quiere conectar con la Catalu?a preproces, la del nacionalismo no independentista que lograba para Catalu?a mejoras sin romper¡±, argumenta.
La entrevista con Pujol no entusiasm¨® ni agrad¨® precisamente en el PSC, pero fuentes del partido precisan que tampoco suscit¨® grandes cr¨ªticas. Otros sectores de la formaci¨®n sostienen que la coyuntura actual permite al PSC tener la segunda oportunidad en su historia de situarse en el centro de la escena pol¨ªtica: la primera la ubican en 1980 tras rechazar el pacto con Converg¨¨ncia y la segunda ahora. Su sensaci¨®n es que tras el proc¨¦s gran parte de la sociedad catalana, tras a?os de mucho estr¨¦s, est¨¢ muy desorientada (un mill¨®n de votantes independentistas se abstuvo) y que Illa busca atraerlos trazando puentes con gestos como el de Pujol, para muchos nacionalistas un pol¨ªtico con enorme ascendente.
Y, desde luego, admiten fuentes socialistas, la idea de orden anida en la centralidad. Joan Botella, catedr¨¢tico em¨¦rito de Ciencia Pol¨ªtica de la Universitat Aut¨°noma (UAB), sostuvo, preguntado en la precampa?a, que ¡°frente al desorden aventurero¡± de la Converg¨¨ncia de Mas, la propuesta de Illa era de orden. Y que se remit¨ªa a Pujol, que tambi¨¦n lo era, cuando reconoc¨ªa su liderazgo como primer impulsor del autogobierno. Aira ha comparado las fotograf¨ªas de los ¨²ltimos presidentes y las de Illa y Pujol se asemejan: sentados, ante una mesa, con una imagen en las que se aprecia la solemnidad de la Galer¨ªa G¨®tica. ¡°Es una imagen muy pujoliana¡±, afirma respecto a Illa que ha sido el primer presidente que vuelve a ir a Misa en las Festes de la Merc¨¨ por primera vez desde 2018.
Con un Gobierno en minor¨ªa, Illa se sostiene gracias a los pactos con ERC y los comunes, y se ha fijado como bandera la financiaci¨®n y la vivienda. La realidad es que en la ¨²ltima legislatura PSC y Junts exhibieron, para exasperaci¨®n de comunes y la CUP, un repertorio de afinidades socioecon¨®micas abogando por la ampliaci¨®n del aeropuerto de El Prat, en la prolongaci¨®n del cintur¨®n del Vall¨¨s o en la construcci¨®n del megacasino Hard Rock, que parece ya arrinconado. Hay quien ve que esos equilibrios los hace Illa por si le fallan las alianzas o razones electorales. No lo ve as¨ª Fumanal, que alega que cualquier gesto ahora no ser¨¢ cuantificable en las elecciones. ¡°No veo c¨¢lculo electoral. Illa no va a impostar un personaje. Es moderado, cat¨®lico, dialogante y estilo templado. ?l es consciente que el liderazgo debe ser aut¨¦ntico¡±, afirma.
El empresario e ingeniero industrial Toni Garrell, promotor del colectivo de profesionales y empresarios El Pa¨ªs de Dem¨¤, rechaza tambi¨¦n que Illa se mueva por electoralismo para buscar el voto hu¨¦rfano del proc¨¦s. ¡°Observo sin pasi¨®n y yo me creo que Illa quiere que Catalu?a recupere el liderazgo econ¨®mico que perdi¨® ante Madrid. Y para eso se necesita estabilidad, certeza jur¨ªdica y alinear intereses¡±, dice. Y remacha: ¡°Por primera vez en mucho tiempo vuelvo a o¨ªr hablar de colaboraci¨®n p¨²blico-privada¡±.