Los magistrados catalanes reciben al borde del colapso los nuevos juzgados para combatir la multirreincidencia

Los jueces de Barcelona llevan tiempo exigiendo m¨¢s recursos para combatir la multirreincidencia, un fen¨®meno delictivo que genera alarma social (la inseguridad ha escalado hasta la tercera posici¨®n en los problemas de los catalanes, seg¨²n las encuestas) y que la Generalitat de Salvador Illa ha convertido en prioridad. Pero combatirla resulta casi imposible si...

Los jueces de Barcelona llevan tiempo exigiendo m¨¢s recursos para combatir la multirreincidencia, un fen¨®meno delictivo que genera alarma social (la inseguridad ha escalado hasta la tercera posici¨®n en los problemas de los catalanes, seg¨²n las encuestas) y que la Generalitat de Salvador Illa ha convertido en prioridad. Pero combatirla resulta casi imposible si, como ahora, los ¨®rganos judiciales est¨¢n colapsados. Por eso los magistrados han recibido con buenos ojos el anuncio del Gobierno de crear cinco nuevos juzgados en Barcelona. ¡°No necesit¨¢bamos tantas reformas legislativas que no serv¨ªan de casi nada, sino esto, m¨¢s medios¡±, explica una veterana magistrada de la capital catalana, donde la saturaci¨®n es insoportable: cada vez hay m¨¢s robos y detenciones y los juzgados no dan abasto para dictar sentencias que, eventualmente, retiren de la circulaci¨®n a estos delincuentes habituales. Los jueces lamentan que la mayor¨ªa de ¨®rganos sean temporales y no fijos y plantean interrogantes sobre su puesta en funcionamiento.

El ministro de Justicia, F¨¦lix Bola?os, y el president Salvador Illa anunciaron el mi¨¦rcoles en Barcelona la creaci¨®n de un nuevo juzgado de guardia exclusivamente para delitos leves, como los hurtos en los que el valor de lo sustra¨ªdo no supera los 400 euros. La ley dice que esos juicios deber¨ªan celebrarse como mucho en 15 d¨ªas. La realidad es que se est¨¢n se?alando a seis y hasta a ocho meses vista: ¡°El adjetivo de juicios r¨¢pidos ha perdido totalmente el sentido¡±, ironiza la jueza. Este es, en realidad, el ¨²nico de los cinco juzgados proyectados que, por ahora, tendr¨¢ car¨¢cter permanente y se suma a los dos que ya existen en la ciudad para ese fin. La administraci¨®n prev¨¦ que el nuevo ¨®rgano pueda celebrar 24 juicios por delitos leves al d¨ªa.

Los jueces consultados por este diario conf¨ªan en que no ocurra lo mismo que con el segundo juzgado de guardia: se cre¨® en 2019 como refuerzo, desapareci¨® con el descenso de delitos que trajo la pandemia y fue rescatado m¨¢s tarde, cuando el colapso empezaba ya a llamar a la puerta. Aunque no se ha incorporado a la planta judicial, los jueces dan por hecho que ese segundo juzgado ya es para siempre; en el plan de choque difundido el mi¨¦rcoles, sin embargo, la administraci¨®n explica que lo va a mantener al menos hasta verano de 2025. ¡°Si van a crear un tercer juzgado, no se entiende que el segundo no sea ya permanente¡±, lamenta otro magistrado.

Cuatro jueces de refuerzo

Distinto es el caso de otros cuatro nuevos juzgados de lo penal para delitos menos graves: aquellos en los que la pena alcanza hasta cinco a?os de prisi¨®n. En este caso, se trata de juzgados ¡°de refuerzo¡±: no se incorporan a la planta judicial sino que tienen car¨¢cter temporal, algo que no gusta a los jueces. Los responsables del Gobierno y de la Generalitat han anunciado, sin embargo, que los mantendr¨¢n ¡°el tiempo que sea necesario¡±. En Barcelona existen ahora 29 juzgados penales, que dictan unas 6.000 sentencias al a?o. Cuatro de esos juzgados ya son de refuerzo y se crearon para dar salida a estos delitos: dictan 2.000 sentencias al a?o.

Los juzgados penales son los que podr¨ªan dictar penas de prisi¨®n contra los multirreincidentes. La reforma del C¨®digo Penal de 2022 introdujo un nuevo tipo de hurto, agravado, que prev¨¦ penas de entre seis y 18 meses de c¨¢rcel para quien haya sido condenado por tres delitos leves y siempre que la cantidad robada supere los 400 euros. Esos juicios, que son los que deber¨ªan permitir sacar de las calles a los delincuentes, tambi¨¦n deber¨ªan ser r¨¢pidos, pero en Barcelona no lo son en absoluto: se demoran hasta 15 meses y las agendas ya tienen se?alamientos para 2026.

La incorporaci¨®n de cuatro nuevos jueces, con 15 funcionarios m¨¢s, deber¨ªa servir para dictar muchas m¨¢s sentencias. Los jueces dudan si esos juzgados servir¨¢n para vaciar la bolsa de asuntos pendientes o para hacer que los nuevos se celebren en fechas m¨¢s razonables. Tambi¨¦n se preguntan de d¨®nde saldr¨¢n esos jueces: si ser¨¢n sustitutos o bien nombrados en comisi¨®n de servicio; y en este ¨²ltimo caso, si ser¨¢n relevados para llevar a cabo la tarea o la compaginar¨¢n con otras funciones, lo que les impedir¨ªa tener una dedicaci¨®n plena. La incorporaci¨®n de nuevo personal, adem¨¢s, conllevar¨¢ el uso de nuevos espacios, ya que la mayor¨ªa de las salas de la Ciudad de la Justicia ya est¨¢n ocupadas para los se?alamientos programados. La Generalitat se ha comprometido a buscar nuevos espacios.

Todos esos aspectos organizativos tendr¨¢n que coordinarse, sobre todo, con la jueza decana de Barcelona, Cristina Ferrando, una de las voces m¨¢s cr¨ªticas con la falta de medios. Ferrando reclam¨® este verano nuevos ¨®rganos ¡°con urgencia¡± y reclam¨®, entre otros, nuevos juzgados de ejecutorias (los que se dedican a que se cumplan efectivamente las sentencias). Este aspecto no est¨¢ recogido en el plan de choque de las administraciones. ¡°Si se dictan m¨¢s sentencias, los de ejecutorias tendr¨¢n m¨¢s carga de trabajo a¨²n, y ya van saturados¡±, advierten esas fuentes.

Un problema end¨¦mico

El plan de choque de Gobierno y Generalitat asume que los delitos contra el patrimonio han registrado un ¡°incremento significativo¡± en Barcelona, lo que ha derivado en un n¨²mero de procesos judiciales por esos delitos ¡°muy superior al resto de ciudades en Espa?a¡±. El a?o pasado, por ejemplo, hubo el doble de juicios r¨¢pidos que en Madrid, pese a que la capital catalana tiene seis juzgados menos. El resultado es una creciente sensaci¨®n de inseguridad y de que los delincuentes resultan indemnes a la acci¨®n de la justicia.

El problema viene de lejos. Si en 2011 el top 10 de los delincuentes acumulaban 257 detenciones, el a?o pasado, la decena de delincuentes m¨¢s arrestados sumaban 367 detenciones. Solo en Barcelona, de los 2.700 arrestados en 2023, 500 fueron detenidos tres veces o m¨¢s, y 33 de ellos, 10 o m¨¢s veces, la mayor¨ªa por delitos contra el patrimonio, principalmente hurtos o robos con fuerza.

Los distintos responsables que han pasado por la cartera de Interior en Catalu?a han se?alado la multirreincidencia como un problema grave. Los Mossos d¡¯Esquadra han exprimido tambi¨¦n otras opciones para lograr que ingresen en prisi¨®n los delincuentes m¨¢s habituales, como solicitar ¨®rdenes de alejamiento de los lugares donde act¨²an, como el metro de Barcelona o el aeropuerto de El Prat. Un quebramiento de una medida judicial supone sumar agravantes para lograr prisiones preventivas. La actual consejera del Interior, N¨²ria Parlon, se ha fijado como una prioridad la lucha contra multirreincidencia. Para ello, los Mossos d¡¯Esquadra se han propuesto ¡°transformar el abordaje operativo¡±, con m¨¢s agentes de paisano centrados en la persecuci¨®n de los ¡°delincuentes m¨¢s activos¡± para conseguir m¨¢s condenas de prisi¨®n, m¨¢s medidas cautelares o que abandonen el territorio por la presi¨®n policial.