Maria Elisabet Silva: ¡°Llevo tres meses durmiendo en la Terminal 1 del aeropuerto porque me da miedo pasar la noche en la ciudad¡±
El aeropuerto de Barcelona desaloja por segunda noche a los sin techo que duermen en sus terminales sin presencia de los servicios sociales
Hasta las 23.30 todo transcurre con normalidad en la zona de llegadas de la Terminal 1 del aeropuerto de Barcelona-El Prat. Los pasajeros de un vuelo de Vueling procedente de Bilbao empiezan a preguntarse el porqu¨¦ de la presencia de numerosas patrullas de los Mossos d¡¯Esquadra. Personal de seguridad del aeropuerto comienza a bloquear los accesos a la terminal y a pedir billetes a todo aquel que entre al edificio. Es el segundo operativo de AENA en dos d¨ªas para desalojar a las cerca de 160 personas sin techo que duermen en la terminal, pero esta vez no hay rastro de los servicios sociales ni del Servicio de Emergencias M¨¦dicas (SEM).
Maria Elisabet Silva, una mujer de 56 a?os natural de Oporto (Portugal), lleva tres meses durmiendo en la zona intermodal de la Terminal 1 junto a su hijo de 32 a?os. ¡°Durante el d¨ªa bajamos a la ciudad a buscarnos la vida, pero por la noche venimos aqu¨ª porque me da mucho miedo y se pasa fr¨ªo fuera¡±, cuenta. A diferencia de muchos otros, a Silva no la echan porque su hijo est¨¢ en una situaci¨®n de extrema vulnerabilidad por los problemas con el alcohol.
El personal de seguridad, que deambula entre ch¨®feres de traje encargados de recibir a los primeros asistentes del Mobile World Congress (MWC), advierte a los sin techo -la mayor¨ªa dormidos- de que deben abandonar la terminal para que as¨ª el servicio de limpieza pueda proceder a la ¡°desinfecci¨®n¡± de la zona. Una t¨¦cnica de AENA acompa?a, con libreta y boli en mano, a los vigilantes del aeropuerto mientras notifica caso por caso las personas desalojadas. ¡°No se les obliga a irse, porque no podemos echarlos. S¨®lo los invitamos a salir hasta que las tareas de limpieza terminen y a las 04.00 vuelven a entrar. Supongo que esto tiene que ver con el Mobile World Congress¡±, asegura un trabajador de seguridad. M¨¢s de un centenar de personas duermen a diario en las instalaciones.
Durante las cuatro horas que dura la operaci¨®n, los sin techo que son expulsados se dedican a deambular por los alrededores de la terminal en busca de cobijo, ya sea en los aparcamientos de AENA o bajo la pasarela que conecta con el estacionamiento para tripulaciones. Otros logran escabullirse entre pasillos y columnas del edificio para evitar que se les desaloje, ya que la temperatura exterior ronda los seis grados.
Emilio, un hombre anciano que lleva a?os durmiendo al raso, asegura que no molesta a nadie. ¡°Yo me quedo aqu¨ª tranquilo, sentado, a resguardo del fr¨ªo. Si me echan, me fumo un par de cigarrillos, me hago unos crucigramas, y vuelvo a entrar cuando acaban. La cosa es que aqu¨ª no se ha presentado nadie a ofrecernos ninguna alternativa¡±, explica. En la segunda noche de operativo, a diferencia de la primera, no han aparecido los servicios sociales ni el SEM para atender posibles emergencias a aquellos que se quedan en el exterior.
El tercer sector social reclama aprobar la nueva ley
Entidades del tercer sector social tildan de ¡°inaceptable¡± la normalizaci¨®n de la situaci¨®n de las personas sin hogar que pernoctan en el aeropuerto. Entitats Catalanes d¡¯Acci¨® Social critican que no se haya previsto un dispositivo de acompa?amiento social con alternativas habitacionales en el que AENA denomina una ¡°prueba piloto¡± para tratar la creciente ¡°insalubridad¡± de la infraestructura.
¡°Celebramos que este mi¨¦rcoles se haya vuelto a registrar en el Parlament de Catalu?a la Proposici¨®n de Ley para erradicar el fen¨®meno del sinhogarismo, pero es urgente acelerar su aprobaci¨®n para garantizar que estas personas tengan un espacio digno en el residir¡±, trasladaron las entidades este mi¨¦rcoles en un comunicado conjunto. El texto establece que los municipios catalanes deber¨¢n hacer recuentos y encuestas en localidades de m¨¢s de 50.000 habitantes para dimensionar el problema del sinhogarismo. Adem¨¢s, recuerda a los municipios la obligaci¨®n de empadronar a cualquier ciudadano sin hogar para asegurar su acceso al sistema p¨²blico de servicios sociales, a asistencia sanitaria y al derecho al ingreso m¨ªnimo vital.
La situaci¨®n en Barcelona no es la excepcional. Las cuatro terminales del aeropuerto de Barajas, en Madrid,, seg¨²n un estudio del sindicato ASAE, de Aena, acogen cada noche una media de entre 400 y 500 personas. De acuerdo con un informe presentado por ASAE, ¡°la expectativa es que se siga incrementando¡±. Las cifras se han multiplicado por 10 respecto al a?o 2014, cuando hab¨ªa contabilizadas unas 30 o 40 personas. .